El año final (SDLV #3)

41.- Mi mejor amigo

POV JAKE

Papá, Emilie y yo hemos estado toda la tarde en la sala de espera. Los demás chicos pasaron por aquí después de que las clases terminaran, pero se fueron hace algunos minutos y prometieron que mañana iban a venir cuando se pueda ver a Nate.

Una asistente social se acerca a papá y lo lleva a hablar a otro lado. ¿Por qué no pueden hablar frente a nosotros? No somos unos niños y Nate es nuestro amigo. Nosotros somos los que sabíamos que las cosas no estaban bien en la familia de Nate. Emilie y yo somos los amigos de él...

Mi rubiesita está cansada, pero se mantiene atenta y despierta sin problemas. Yo no soy tan fuerte como ella. Me he tomado como dos tazas de café y eso que no me gusta el café.

-¿No crees que Nate está durmiendo mucho?- pregunta Emmie a mi lado

-Tal vez ya despertó y le están haciendo algunos exámenes.

En ese momento aparecen en nuestro campo de visión personas a las que conozco muy bien aunque Emilie las conoce mucho mejor. Sus padres. Están hablando con el doctor que está encargado del caso de Nate y con el que papá casi pelea a golpes porque no entendía que somos la única familia que Nate tiene y que no seamos de sangre no significa que sea parte de nuestra familia.

Pocas veces había visto a mi padre así de enojado.

-Tranquilo, doctor Stone- dice la mamá de Emmie, mi tía Emma- Nosotros nos encargamos desde aquí

-Su mujer tiene un poder de convencimiento impresionante, doctor Bell- le dice el anciano amargado con clara expresión de enojo al papá de Emmie.

-Me lo dice a mí que llevo años casado con ella- le dice mi tío Josh con su sentido del humor normal.

El anciano, doctor Stone al parecer, camina rápidamente a la salida y lo perdemos de vista. En ese momento, Emilie se acerca a sus padres y se tira a los brazos de mi tío Josh. Obviamente su padre la recibe en sus brazos y comienza a acariciar el cabello de su hija.

Me acerco a ellos y aunque sé que la mamá de Emilie no es muy cariñosa, me envuelve en sus brazos. 

-Nate está bien, chicos- dice el papá de Emilie cuando nos separamos del abrazo tanto Emmie como yo- Se quedará aquí solo por observación, si no fuera así ya estaría en casa, así de bien está.

-¿En casa?- dice con un poco de ironía Emmie- ¿Para recordar que ya no tiene nadie de su familia en esa casa? ¿Qué solo él está aquí?

-Él aun tiene familia, Emilie- le digo poniendo una mano en su brazo- Nosotros somos su familia ahora.

-Jake tiene razón, hija- le dice tía Emma a su hija- Y ahora los necesita más que nunca

Los dos asentimos y yo tomo la mano de Emilie. Envolvemos nuestros dedos y yo aprieto un poco su mano para que sepa que estamos juntos en esto. 

Estamos juntos para poder ayudar a Nate.

-Ya pueden ir a ver a Nate- nos dicen- Vamos.

Seguimos a los papás de Emilie por unos pasillos hasta que nos paramos frente a una habitación... la número 204.

-Pueden estar allí una hora que es cuando termina la hora de visitas- dice el papá de Emilie- Y uno de ustedes puede quedarse a dormir dentro de la habitación, pero solo uno.

-Ahí se ponen de acuerdo quien de ustedes se quedará- completa la mamá de Emmie

A veces me sorprende la sincronía que tienen las parejas que llevan tanto tiempo juntos. Tal y como los padres de Emilie.