Capitulo 35- No me arrepiento

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Al día siguiente.

El día de hoy habia pasado demasiado lento, pero a pesar de eso, por fin se habia llegado la hora que quería.

Ahora estábamos Santana y yo en el aeropuerto, ya pasaban de las 6 y yo me moría de los nervios, necesitaba ver a Rachel ya y cada minuto que pasaba me intranquilizaba mas.

-S: Quinn, ya tranquilízate, llegaran en cualquier momento, para de caminar por todo el aeropuerto, por favor.

-Q: Ya son las 6:35 y no llegan... ¿y si en realidad no llegan hoy?

En verdad estaba comenzando a creer en esa posibilidad, y ademas, mi cabeza me estaba haciendo una mala jugada al comenzar a pensar en cosas malas, cosas que me preocupaban mas, pero la preocupación fue remplazada por un enorme nudo de nervios al girar mi cabeza y ver a Rachel caminar por los pasillos del aeropuerto con Brittany a su lado, por lo que llevé mi vista a Santana que también ya se había percatado de ellas.

-S: Bien, tenemos cosas que hacer, Q.

-Q: (Suspiré) Así es... vamos con ellas.

Santana asintió, se levantó de la silla en donde estaba sentada y comenzamos a caminar hacia ellas algunos pasos, ya que casi de inmediato, ellas nos vieron y se detuvieron.

Rachel me observó unos segundos, y luego llevó su mirada a Brittany, se le acercó al oído para decirle algo y enseguida intentaron alejarse de Santana y de mi, pero fue tarde ya que yo tomé el brazo de Rachel suavemente haciendo que detuviera su paso.

Después miré a Santana, ella asintió e hizo que Brittany la viera.

S: Britt, ¿podemos hablar?

-B: Yo no quiero hablar contigo, Santana, y tampoco pienso dejar a Rachel sola con Quinn.

-S: Por favor, tenemos que arreglar esto, anda, Britt-Britt, te puedo llevar a algún lugar, el que tu quieras.

Brittany solo dejó salir un suspiro, observó a Rachel y ella asintió, por lo que Santana tomó la mano de Brittany y con sus cosas, se la llevó a alguna parte lejos del aeropuerto, y gracias a eso nosotras tuvimos mas privacidad para que pudiéramos hablar mas tranquilamente.

-Q: Hola, Rach.

-R: ¿Que haces aquí?

Rachel contestó sin siquiera mirarme, por lo que apreté ligeramente mi agarre en su brazo, haciendo que por fin me viera a los ojos, cosa que me permitió observar mas detalladamente su rostro.

Se miraba cansada, sus ojos estaban tristes, tenia ojeras debajo de ellos, su cabello ligeramente despeinado... en fin, se miraba igual que yo, estaba sufriendo igual que yo y eso no lo podía tolerar.

-Q: Te extrañé... te extraño.

-R: Pues yo no.

-Q: Eso no es cierto, tus palabras me pueden mentir si eso quieres, pero tus ojos son realmente honestos conmigo.

-R: Puedes creer lo que quieras, no me importa.

-Q: Este tiempo que has estado lejos de mi ha sido horrible, no puedo tenerte lejos, Rachel, te necesito... te amo y lo sabes.

-R: Tu no me amas... Si me amaras nunca te hubieras burlado de mi como lo hiciste, Quinn.

-Q: Lo se, fui una estúpida, debí de haber cancelado esta jodida apuesta en cuanto me di cuenta de lo que sentía por ti, debí de haberte dicho toda la verdad desde un principio, pero tenia miedo ¿de acuerdo? Tenia miedo de perderte, tenia miedo de hacerte sufrir pero de todas formas nada sirvió, porque al final te perdí y te hice sufrir y eso es lo que mas lamento, haberte hecho daño... pero en verdad te amo y necesito que me perdones porque no puedo vivir sin ti.

La apuesta (Faberry)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora