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Un mes después.

Estoy esperando a JungKook en la cafetería que en alguna vez ya nos habíamos visto. Hoy es un día muy especial, pues él y yo  cumplimos un mes de novios ya. ¿Cuándo fue? Sucedió la última vez que me quedé con él en su casa cuando se encontraba enfermo. Todo fue muy lindo hasta que su madre nos encontró basándonos, como consecuencia ahora mi actual novio está de novio todavía con MinJu, tuve que dejarlo enfermo y por último su madre me ha estado tratando bastante mal.
Escuché el ruido de la puerta, mi atención de fue hacia ella pero lastimosamente JungKook no era, hoy es la única oportunidad que hemos tenido para vernos, además le tengo una sorpresa.

Ha pasado media hora y mi invitado no llega, resignado me levanto de la mesa, doy unos cuantos pasos, se escucha la puerta y veo a JungKook entrar por allí.

—Por fín llegas— le digo mientras sus brazos me envuelven.

Nos separamos y se sentó al lado mío, pero no hay que excluir el hecho que le llamó mucho la atención de lo que tengo detrás mío. Aprovecho que in mesero pasa, le pido dos capuchinos junto con dos tartas de fresa. De imprevisto saco el regalo de detrás mío para lanzarlo en el rostro de JungKook.

—¿Qué es?— pregunta curioso JungKook.

—Es un peluche, para que me recuerdes cuando no esté ahí— le explico.

—¡Oh~! JiMin muchas gracias— dijo mientras me abraza y deja besos por mi rostro —Te quiero.

...

Ya se ha hecho de noche y vamos caminando tomados de la mano por un parque.

—JiMinnie— susurro, pero al parecer mi novio me escuchó.

—¿Qué?— pregunta extrañado.

— Así mismo le pondré a mi peluche— claro que lo haré, por algo se lo hago saber.

JiMin se coloca enfrente mío, sin verlo venir me besa los labios, no tardo nada en responderle, lo necesito y él a mí, un mes sin vernos no es fácil.

—Te quiero— me hace saber después de separarnos.

—Yo igual— no lo dudo.

Las gotas de agua empiezan a caer, tomo su mano y empezamos a correr, él se quiso quitar su saco para dármelo, no lo dejé pero yo si lo hice con él.
Nos quedamos debajo del techo de una casa que sobresale, compartimos un húmedo beso, pero no por la lluvia, nos separamos y de nuevo empezamos a correr pero esta vez hasta la entrada de mi casa.

—Déjame entrar así pase lo que pase— me dijo pero no puedo hacerlo.

—Sabes que no puedo— creo que no es necesario hacerle recordar.

Tomo su rostro redondo hasta que sus labios se juntan con los míos; un beso de despedida. La lluvia nos está terminado de mojar pero no nos separamos.

—Tengo que irme— dije yo.

Compartimos un último abrazo y un beso junto con lágrimas que amenazan con salir de nuestros ojos. Le hago saber que lo quiero mucho y simplemente lo dejo ir.

Al entrar a la casa me encuentro con la grata sorpresa de ni madre sentada en el sillón, decido pasar derecho de ella pero me detiene.

—Toma JungKook— me extiende el teléfono; lo tomo pero no digo una sola palabra.

Subo a mi habitación; me quito absolutamente toda la ropa, pero la cambio por un pantalón cómodo y un saco abrigado. Me acuesto bajo las mantas, me traen buenos recuerdos con JiMin, su olor está impregnado en ellas.
Por otra parte JiMinnie no se mojó gracias al plástico que trae, se lo quito para poder abrazarlo mejor. No sé cuánto tiempo ha pasado desde que me separé de JiMin y ya lo extraño
Tomé mi móvil, lo encendí y encontré lo que tanto deseé: un mensaje de él.

Sex Trip (Jikook)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora