Arcángel

Capitulo 33 "fue increible"

Desperté por los rayos de sol que daban en mi rostro, camine asomándome por la ventada mirando un hermoso jardín repleto de flores, pasto y muchas mariposas a su alrededor, el sol brillaba con fuerza sobre este. Sonreí recordando lo mucho que me gustaba jugar en el jardín de la casa de mi abuela. Percibí un olor exquisito proveniente del mismo lugar así que camine buscando la cocina topándome con Joseph frente a la estufa.

-te gusta cocinar? -. Recosté mi cuerpo del marco de la puerta mientras me cruzaba de brazos y sonreía al verle, este volteo a verme  devolviéndome la sonrisa.

-se nota? -. Cuestionó apagando el fuego para luego buscar platos y servir lo que parecía huevos revueltos y pan tostado, los colocó sobre el desayunador y me invitó a sentarme frente a él.

-huele delicioso -. Me acerqué tomando asiento, serví un poco de cada cosa "Huevo, pan, tocino, semillas" y el sirvió lo que parecía ser un licuado de plátano para cada uno y así nos dispusimos a desayunar.

-a donde iremos ahora? -. Cuestione antes de darle el último sorbo a mi bebida, estaba satisfecha.

-pensaba en caminar un rato y conocer el lugar antes de volver a movernos, que dices? -.  Me pareció una gran idea, eso de solo volar y dormir me parecía aburrido.

-claro, iré a ducharme -. Lave los trastes antes de dirigirme a la habitación, sacar ropa limpia de la mochila y darme una ducha corta pues temía a que la gente de esta casa apareciera de pronto y yo estuviera desnuda aquí dentro. Me puse un vestido corto cómodo y una chaqueta sobre este, deje mi cabello suelto y para cuando salí Joseph ya estaba duchado y vestido, Lucía Jeans ajustados con un suéter de capucha color negro y su cabello perfectamente peinado.

-estoy lista -. Les hice saber, tome la mochila colocándola sobre mi espalda y el tomo la mochila con comida, estábamos a punto de salir cuando escuchamos el sonido de un auto frente a la casa, ambos nos asomamos para ver y al parecer eran los recientes

-Que no dijiste que vendrían en tres días? -. Cuestione

-me equivoque -. Admitió el, nos movimos rápido buscando una puerta trasera la cual gracias a Dios encontramos en la habitación de atrás, debíamos esperar a que las personas se adentrarán en la casa para poder salir sin ser vistos ocultándonos tras la pared del jardín mientras yo observaba la puerta por la cual habíamos salido y Joseph observaba la entrada.

-Mama!, dejaste esta puerta abierta? -. Escuche la voz de un chico gritar dentro, mi corazón se aceleró, si salía nos iba a encontrar. Estaba desesperada, Joseph aún no encontraba el momento para salir cuando la puerta se abrió.

-Diablos! -. Exclamé y empuje a Joseph cayendo ambos al suelo dejándonos a la vista de aquel chico a mi espalda y un hombre en el frente

-corre! -. Exclamo Joseph tomándome por una mano echándonos a correr a toda prisa

-Hey! -. Exclamo el chico mientras este y el señor nos perseguían, no podía creer que nos habían descubierto justo en su casa, si llaman a la policía estoy frita.  -vuelvan aquí, cobardes! -. Grito el hombre, Joseph se adentró en un callejón, me abrazó con fuerza y se elevó ocultándonos en el tejado de un local , nos asomamos para ver cómo aquellos dos enfurecidos hombres se detenían confundidos.

-escaparon! -. Exclamo uno de ellos

-vamos! -. Susurro Joseph caminando libremente por el tejado de aquel lugar hasta llegar al lado contrario, bajamos y observamos que los hombres no estuvieran ahí para caminar tranquilamente.

-eso fue intenso -. Exclamé sonriendo por alguna razón, quizás haber estado a punto de morir a mano de seres sobrenaturales me hacía perderle temor a los vivos.