En un mundo donde lo místico es irreal y lo paranormal se convierte en locura, Katherine Felming una joven mujer quien recién empieza su nueva vida en Cambridge descubre que nada es lo que parece y las personas no son quienes pensó que eran.
Tras co...
-tha xanagennitheí Ravinugtah -. Exclamo con una voz de ultratumba mientras los demonios y los Ángeles caídos continuaban repitiendo "Ra-vi-nugtah" al unísono.
Respire forzadamente tratando de regular los latidos de mi corazón pero era inútil la única amiga que me quedaba estaba muerta y lo peor es que la vi morir al igual que vi morir a Cher.
Lordanem alzó la vista mientras sus labios formaban una sonrisa victoriosa, busco mi mirada con la suya dejándome presenciar sus ojos negros atrapados en esa mirada aterradora que solo él poseía, se acerco caminando lentamente hasta mi mientras yo por mi parte sollozaba en silencio viendo venir mi final.
Una vez que estuvo cerca de mi dejo salir sus grandes colmillos abriendo la boca de una forma espeluznante, Iba a matarme así que cerré los ojos respirando agitadamente Pero algo pasó, y un fuerte sonido interrumpió el sacrificio esparciendo polvo por todo el lugar cuando la pared principal voló en pedazos.
Cerré los ojos evitando que la tierra entrara en mis ojos y para cuando volví abrirlos mi corazón dio un brinco una vez más.
Esta vez no era por temor ni pánico si no por qué Joseph estaba de pie frente aquel hueco que se había formado en la pared, sus facciones se mostraban tensas mientras observaba fijamente la escena. -aquí se termina la fiesta! -. Exclamo dando varios pasos siendo seguido por más Ángeles incluyendo, Liam, Alex y Pablo
No pude evitar sonreír mientras me sentía mal por haber dudado de el.
-llegas tarde -. Una carcajada maligna renoso desde el interior de aquella bestia la cual aún frente a mí levanto su mano derecha para luego encajar el pequeño puñal en mi pecho dejándome casi sin aliento.
-No! -. Joseph grito hechando se a correr intentando llegar a mi siendo detenido por varios demonios; podía sentir un dolor punzante sobre el lado derecho de mi pecho, en ese momento una lágrima recorrió mi mejilla mientras el ardor se hacía presente.
-tan solo necesita una gota de sangre humana para despertar y todo el ritual estará listo para mí -. Sonrío plácidamente sacando el puñal de mi pecho el cual comenzó a derramar la sangre caliente permitiéndole deslizarse por mi cuerpo. Lordanem aún sonriente camino tranquilamente hasta Ravina mientras Joseph aún intentaba llegar a mi sin tener éxito.
Dejó caer la gota que amenazaba con caer al suelo sobre los ojos de Beatriz quien después de unos segundos los abrió mientras removía su cuerpo y se levantaba de a poco atrayendo la mirada de todos al alrededor, sus ojos ahora eran totalmente negros y su cabello fue tornándose a un tono oscuro, lacio y muy largo, las heridas en su piel fueron desapareciendo mientras su piel tomaba a un color pálido, al transformarse cada vez lucia más como yo dejando atrás la imagen de la mujer que anteriormente había sido asesinada sobre esa mesa transformándose en la tan buscada Ravina?
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