Capítulo 40 (actualidad)

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- Entonces...ese día en el aeropuerto...¿esos chicos te odian por no haberles contado la verdad? -yo solo me limité a asentir con la cabeza- me parece un poco inmaduro de su parte...

- ¿Inmaduro? ¿por qué? -pregunté curioso-

- A veces uno trata de olvidar el pasado, y creo que cuando le confiesas parte de éste a cualquier persona, es porque confías en esa persona...

- ¿Entonces...? -pregunté aún confuso-

- Tu les confesaste algo que has estado callando por años, me parece inmaduro de su parte, cuando les confiesas cosas y ellos toman esa actitud contigo -mencionó con ligero enojo-

- No lo sé, supongo que sus razones tendrán... -susurré-

- Sigo sin encontrarles justificación... -finalizó ese tema- por otro lado, ¿qué sabes de Niall y Ross?

- ¿Ahora? -cuestioné-

- Si, ahora... -aclaró Sterling-

- No lo se... -confesé-

- ¿Dónde están ellos ahora? -preguntó-

- No lo se...

- ¿Está Ross bien, o sigue en coma?

- No lo se...

- ¿No lo sabes? -preguntó incrédulo-

- No lo se... -reafirmé-

- ¿Cómo que no lo sabes? ¿Qué se supone que significa ese 'no lo se'? -cuestionó una vez más-

- Significa que no lo se... -volví a contestar-

- ¿Desde cuándo pasa esto? -preguntó más comprensivo, mientras me miraba fijamente-

- Desde que tenía 14 años... -confesé en un susurro casi inaudible-

- Vamos a encontrarlos, te lo prometo, y te voy a ayudar con eso...

- Yo nunca dije que quería encontrarlos -dije algo confuso por su propuesta-

- No hizo falta que lo dijeras, puedo ver las reacciones que haces al contestar preguntas relacionadas con ellos... -mencionó Sterling como si fuera todo un experto en el tema-

- Es solo que...a pesar del tiempo, y de lo que pasó...aun los considero mis mejores amigos... -dije sinceramente-

- Es normal...

Nos quedamos unos minutos en silencio...silencio que el rompió de una manera que yo agradecí.

- Espera, eres un maldito...me mantuviese entretenido con 'la historia detrás del mito de Abraham Mateo', y ya no nos fuimos... -agregó con fingida molestia-

- Jaja es solo que ya es tarde, pero tranquilo, si tanta es tu urgencia por regresar a casa, no te preocupes, mañana en la mañana salimos... -dije amablemente-

- Bien...

Sterling y yo nos levantamos de los sillones en los que nos encontramos sentados, y caminamos en dirección a las escaleras, cada uno con rutas diferentes por la ubicación de nuestras habitaciones, pero ambos con el mismo fin, ir a descansar.

Estaba a punto de entrar a la que había sido habitación durante las últimas semanas, cuando una voz detrás de mi me interrumpió, con una pregunta que me dejaba a pensar mucho...

- Un segundo...¿dijiste que todavía son tu mejores amigos? -preguntó Sterling pensativo-

- Así es Estela... -aclaré-

- Pero cuando nos conocimos, y me pusiste ese apodo horrible de 'Estela', dijiste que me sintiera afortunado por ello, ya que tu sólo le pones apodos a las personas que consideras tus amigos...¿acaso me has mentido? genial, y yo que he soportado ese horrible apodo por nada... -mencionó rápidamente, mientras sacaba sus propias conclusiones, sin dejarme la oportunidad de responder-

Era rara esta faceta de Sterling, nunca se había puesto de esa forma, y sé que él tiene un secreto, y muchas veces he sentido la necesidad de exigirle que me lo cuente, lamentablemente, acabo de confesarle mi pasado, no sería correcto que lo obligué a algo para lo que él aún no está listo.

Por otro lado, sabía que esa manera de reaccionar de Sterling, había sido la impresión al enterarse que quizás yo no lo considero mi mejor amigo, pero...a quien trato de engañar, él es el único que sabe a ciencia cierta mi historia, probablemente Daniela haya averiguado sobre mi, pero eso no quita el hecho de que realmente no me podrá conocer del todo jamás, o al menos mientras yo lo permita, ella solo sabrá de mi hasta donde yo desee...

- Sé a donde quieres llegar Estela... -lo interrumpí, mientras ponía mi mano en su hombro en señal de que se tranquilizara- ...y no te preocupes, tu también eres uno de mis mejores amigos, después de todo, eres el único que sabe toda la historia, al derecho y al revés... -confesé-

- ¿De verdad? -mencionó amablemente- o ¿no será que solo me dices eso para que no me enoje contigo y vaya a contarle a todos sobre tu pasado, ahora que me lo confesaste? -agregó de una manera sospechosa hacía mí-

Lo que dijo me dejó muy pensativo, tanto que ni note el momento en el que Sterling me tomó por ambos hombros, una clara señal que estaba desesperado por oír una respuesta de mi parte...

- No, hablo muy en serio... -sentencié mientras me soltaba de su agarre- además ya te dije que hace mucho que no los veo, ¿cómo se supone que les podría contar lo que viví estos últimos años, si hace mucho no sé de su existencia? -le obviedad-

- Buen punto... -mencionó en un susurró, y se mantuvo pensando unos minutos, minutos en lo que nadie decía ni hacia nada- ...y ¿a qué hora salimos mañana?

- Que te parece si...

Y justo cuando estaba por responder volví a sentir esa ligera vibración en el bolsillo de mi pantalón, un nuevo mensaje había llegado a mi celular...

- ¿Es tu madre otra vez? -preguntó Sterling, mientras yo sacaba el celular del bolsillo de mi pantalón-

- No...

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Holaaaa chicas, hace unos días, mientras respondía algunos comentarios, les dije a unas chicas que daría una sorpresa, bien aquí esta, el primer maratón de 'El Cuarto Vacío', espero y les guste, sigan leyendo ehh ;)

El Cuarto Vacío ~Abraham MateoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora