El Cuarto Vacío ~Abraham Mateo

Capítulo 41 (actualidad)

- Es Dan... -le revelé, al mismo tiempo que leía el mensaje-

- ¿Hablas de Daniela? -mencionó más en forma de afirmación que de pregunta-

- ¿Qué otra Dan conoces? -le dije respondí algo brusco-

- Bueno contigo nunca se sabe... -agregó en un susurro, algo que supongo que él esperaba que no oyera-

- ¿De que rayos hablas? -le pregunté algo confundido, al mismo momento en que volvía a guardar mi celular en mi pantalón-

- Es simple, tus apodos son raros, digo a mi me apodaste como a una chica y a ella como a un chico...

- Y...¿qué tiene eso de raro? -cuestioné sin comprender del todo a que se refería-

- ¿Es en serio? -preguntó Sterling mientras me miraba incrédulo- sabes que, olvídalo ¿qué quiere Daniela?

- Lo mismo que todos los demás... -dije tranquilamente-

- ¿Saber dónde estamos? -yo solo asentí con la cabeza como respuesta- ¿y le dijiste dónde?

- Por su puesto... -respondí, a lo que él mostró un rostro lleno de satisfacción- ...que no -finalicé mientras comenzaba a entrar a mi cuarto-

- ¿No? ¿cómo que no? -y fue justo ahí cuando cerré la puerta en su cara- Mateo abre la puerta ¡maldita sea! -dijo mientras trataba de forzar la puerta para poder abrirla, ya que había cerrado con seguro-

- Salimos mañana en la mañana, así que te aconsejo que te vayas dormir, porque el viaje es algo largo -grité a través de la puerta-

- No digas tonterías, estamos afueras de la ciudad, no es un viaje largo... -mencionó tratándome de dejar como un tarado que no sabe su ubicación actual, un chistesito que no le iba a resultar-

- Tiempo es tiempo, así que ya vete a dormir Estela...

- No me digas que hacer desgraciado... -dijo con notable enojo, mientras continuaba golpeando la puerta-

- Ni con lo que te enseñé de defensa personal podrías abrir esa puerta... -mencioné gracioso-

- ¡Te odio Mateo...!

- ¡Yo también Estela...! -finalicé-

Vaya quien lo diría, yo contándole mi historia a alguien que ni siquiera es de mi familia...si que es en serio cuando dicen que cada día tiene sus propias sorpresas...

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Desperté por la insoportable música electrónica, es verdad me gusta, pero que me despierten bruscamente en la mañana con ello, no es lindo, en lo absoluto...

- ¿Qué diablos haces con el audio encendido tan noche? -mencioné groseramente, ya que si hay algo que definitivamente no tolero, es que me despierten-

- ¡Oh, Mateo eres tu! ¡que bueno que estas despierto! ¿quieres bailar un rato, esta canción es increíble? -respondió mientras hacía unos pasos horribles de baile, de hecho creo que insultaba al baile con eso-

- Apaga eso déjame dormir... -sentencié con ligero enojo-

- ¿Dormir? pero ayer dijiste que hoy saldríamos temprano... -dijo mientras se hacía el confundido-

- Ya lo sé, precisamente por eso quiero que pagues este escándalo, para así no estar cansado en el viaje... -aclaré con algo de frustración por querer regresar a dormir-

- Me parece que no me estas entendiendo Mateo... -dijo mientras ponía su mano en mi hombro y me daba una sonrisa sínica- ...son las 5am

- Ya lo sé...espera ¿qué? -pregunté sin poder creerlo-

- Que son las 5am, tu dijiste que nos iríamos en la mañana, así que...vámonos... -mencionó sin quitar su sonrisa declarando victoria-

No lo podía negar, Sterling se había vengado muy bien de mi; sin embargo, eso no evitará que su venganza sea la mejor...así es, nadie me deja a mi en ridículo...

- Seguro, ¿qué estamos esperando, no? -agregué tratando de sonar lo más convincente posible, algo que en definitiva Sterling creyó sin dudar ni un poco-

El salir de la casa fue rápido, ya que desde la noche anterior Sterling había empacado las cosas, y en la mañana solo fue cuestión de subirlas al automóvil, junto con nosotros, y manejar aproximadamente por 3 horas...

Durante la primera hora estuvimos escuchando música como Spectre o Force de Alan Walker, definitivamente si había algo en lo que realmente admiraba a Sterling, era en su buen gusto musical... En la segunda hora comenzamos a cantar canciones que pasaban en la radio, ya que las listas de reproducción de nuestros celulares habían terminado, debía admitirlo fueron dos divertidas horas, pero eso acabó cuando llegamos a la tercera y última hora del viaje, el momento de tensión...

- Entonces...¿qué vas a hacer cuando regresemos a nuestras casa? -preguntó Sterling con algo de curiosidad-

- Dormir... -dije relajadamente-

- ¿Dormir? -preguntó incrédulo, supongo que creía que solo estaba bromeando-

- Aja... -respondí sin ponerle importancia alguna-

- ¿Qué no tienes que hacer cosas más importantes como solucionar los problemas con tu madre o Daniela? -cuestionó-

- No, además ¿de qué problemas hablas? -pregunté tratando de recordar si había hecho algo malo en donde ellas estuvieran involucradas-

- Dah, ¿qué no es obvio? -mencionó, pero al ver mi cara de confusión, agregó- en serio, ¿no tienes idea? -me preguntó, a lo que yo solo respondí moviendo mi cabeza de un lado a otro, dando a entender que no- ¡vaya! creí que eras más inteligente Mateo...

- Tienes menos de tres segundos para hablar antes de que detenga el automóvil, me baje y te golpee... -sentencié seriamente-

- Ya tranquilo, solo digo que no hay mucho que pensar...es obvio que ellas han de estar sumamente preocupadas por ti... -confesó sin ningún indicio de  broma-

- Quizás a mi madre le deba una que otra explicación... -revelé-

- ¿Y a Daniela?

- No, a ella no...

- ¿Por qué no? Ella es tu amiga, y también estaba preocupada por ti... -preguntó sin comprender el porqué de mi respuesta-

- No me interesa... -finalicé al ver que comenzábamos a entrar a la ciudad-

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Continuamos con el maratón, gracias por leerlo, comentén, eso inspira... ;)