Epílogo.

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N/A: Y hemos llegado al final, fue todo un honor hacer esta historia y espero la hayan disfrutado. Este capítulo va dedicado a una persona especial para mi, esto demuestra que siempre al final del túnel, hay una hermosa luz. Quiero que como último capítulo, todas las lectoras fantasmas se den a conocer y rompamos el récord, dejando este capítulo como el más votado y comentado de la novela. GRACIAS POR LEER. NO SE OLVIDEN DE VOTAR Y COMENTAR, ES GRATIS ;3

Leer con: 1000 Hands — Fifth Harmony.



Mi mente se puso en blanco y dejé de reaccionar un segundo. Los recuerdos de mi infancia se hicieron presentes y las lágrimas que antes caían con dolor, ahora eran de arrepentimiento.

"—¡Mami! ¡Corre y atrapa el disco! —Grité corriendo al otro lado del parque arrojando el disco. Mi mamá se levantó e hizo lo que le dije mientras reía, el disco resbaló y cayó al césped. —¡Gané! —Dije y corrí riendo y dándole un fuerte abrazo a mi madre. —Te amo, mami.

—Yo también te amo, Camila. "

Escuchaba la voz lejana de Abby llamarme pero no me importaba, simplemente me sentía como si una parte de mi me hubiese sido arrebatada. Apreté mi puño fuertemente.

"—Camila. —Mi madre me llamaba, sentía la humedad de mis mejillas y mi almohada. —Debes irte, es hora.

Me levanté y la miré sin entender mientras ella recogía mi ropa, miré a la ventana y aún no amanecía. Sofía descansaba a mi lado en mi cama, sonreí y besé su mejilla. —¿Irme? ¿A dónde?

—Lejos de Alejandro. —Mi miró con lágrimas en los ojos pero sonriente. —Lejos de nosotras.

—Pero mamá, ¡yo no quiero irme! Puedo soportarlo. —Respondí abrazándola y ella me correspondió.

—Vístete, el taxi vendrá en veinte minutos, no hay tiempo que perder. —Acarició mi mejilla. —Te voy a extrañar mi pequeña. —Respondió besando mi frente. Terminó de recoger mi ropa mientras yo me vestía y lavaba mis dientes. —Tu amiga, Dinah, te espera lejos de aquí, en el aeropuerto de Miami. —La iba a interrumpir pero ella no me dejó. —Ella te cuidará. Toma. —Me entregó un paquete de dinero, un teléfono nuevo y una tarjeta con mi segundo nombre y mi apellido. —Te espera una mejor vida lejos de él, hija. —Me abrazó y me hizo darle un beso a Sofía antes de que saliera de la casa. —Apresúrate, llegará pronto y tu vuelo sale en treinta minutos. —Me lanzó un beso. —Adiós, hija. "

¡Camila! —Gritó Abby y yo volví a la realidad, una realidad donde no me quedaba más nadie que mi pequeña hermana. —¡Camila, responde!

—Aquí estoy... —Respondí apagada. Recordé mi promesa a Sofía de volver por ella y eso haría. —Quiero que haya un juicio.

Lo siento, ¿qué? —Preguntó atónita y yo me levanté del suelo mirando por la ventana hacia el hermoso aeropuerto. Si Alejandro Cabello quería guerra, guerra tendría.

—Quiero un juicio en contra de Alejandro Cabello. —Le dije seria. —Por la custodia de mi hermana. Soy mayor de edad y puedo mantenerla. Que se quede con su manutención si quiere, pero Sofía se queda conmigo.

Camila, eso es imposible, no tienes abogados, además, si te acercas sólo un metro a Sofía, Alejandro te pondrá tras las rejas, debo recordarte que te están buscando. —Susurró lo último.

—Lo sé, la corte apelaría a mi favor por tener un expediente. —Le aclaré. —A menos que Alejandro tuviese un expediente mayor. —Sonreí. —Quiero acusarlo de acoso, violencia doméstica, violencia infantil...

Psycho In Love CamrenDonde viven las historias. Descúbrelo ahora