Capitulo 3

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POV Christian

-Apresurense- nos ordena nuestra madre.

-Yo estoy listo- digo desanimado

-¡Mia!- llama Grace

-Aqui estoy- dice mi hermana

-¡¿Por que estás vestida asi?! Pareces puta, ¿quieres hacerle competencia a las Steele?- Escupe mi madre con rabia

-¡TE FUISTE A CAMBIAR DE ROPA!- Ordena Carrick gritando.

Mia llevaba una falda bastante corta, y una blusa muy escotada, y está más pintada que un barco

-Siempre hablando mal de las Steele- digo enojado a mi madre

-No empieces Christian...¡Apurate Mía! No quiero llegar tarde a la misa-

Mía se va dando patadas por todos lados...

Minutos después vuelve con una falda larga, color blanca, y la misma blusa

-Ahora si-dice ella

-Debiste cambiarte la blusa, pero ya no hay tiempo...¡Elliot!-

-Aquí estoy mamá- el idiota me fulmina con la mirada. Mis padres no se enteraron lo que sucedió ayer, sobre mi pelea con Elliot.

-Vamos-

Salimos de la casa, y nos subimos al auto....

Después de unos minutos llegamos a la iglesia.

Salimos del auto, y entramos a la iglesia, la misa ya ha empezado, el reverendo está hablando.

Cuando entro a la iglesia, veo a Ana sentada solita, detrás de sus padres y su madrastra...voy con las intenciones de irme a sentar junto a ella.

-No se te ocurra Christian- susurra mi madre a mi oído, y me tira de mi brazo...me lleva a sentarme a su lado.

Miro a Anastasia, y le sonrío...ella me devuelve la sonrisa.

-Es increíble cómo dejan entrar a los pecadores...pero tendré que hablar con el reverendo, no pueden seguir, dejando que esas mujerzuelas, y ese hombre promiscuo entren a la casa de dios- susurra Grace con voz audible

-¡Basta!- trato de levantarme, pero ella me lo impide.

Todos los Grey estamos sentados como "la gran familia que somos" que gran farza, lo que menos somos, es una gran familia, cómo mis padres fingen.

El reverendo da su sermón , habla del pecado, y no sé que mierda más...por que yo sólo estoy concentrado en Anastasia. Ella también me mira, y cada vez que lo hace, le sonrío...y ella también me sonríe.

-Basta Christian- susurra mi madre cerca de mi oído, sólo para que yo no más escuche

-No estoy haciendo nada malo- susurro

-Por supuesto que sí...estás mirando a esa puta- mi sangre empieza hervir, odio cuando se refieren a Anastasia cómo puta

-¡Anastasia no es ninguna puta! - Las demás personas nos miran, creo que oyeron, hablé un poco alto

El reverendo nos mira unos segundos, y después retoma su sermón.

-Ya verás, por atreverte levantarme la voz- susurra amenazante Grace

-Entonces nos siga-

Miro a Anastasia, y ella me mira con tristeza...siento un nudo en la garganta...me duele mucho, el trato que mi familia y las demás personas tienen con ella, ella finge que no le afecta, pero yo sé que le duele.

La misa se termina...las personas miran con desprecio a Ana, y su extraña familia, pero a ellos no les importa, Ray sale del brazo de Susy su esposa, y con Carla...Anastasia sale detrás de ellos, mientra la gente empieza a murmurar.

-Pero que sinvergüenzas- comenta una mujer

-Seguramente esa muchachita...sabe todo con respecto a lo que una jovencita de su edad aún no sabe- dice otra

-Carrick iremos hablar con el reverendo...los Steele no pueden seguir entrando a esta iglesia- dice mi madre

-¿Y quien te crees que eres? ¿La dueña de la verdad? Déjame decirte que no la tienes...Anastasia y su familia pueden ser una familia singular...pero al menos ellos no fingen algo que no son ¡ Cómo la mayoría de ustedes! ¡Que son unos hipócritas!- Ya no puedo controlar mi ira.

-¡Christian baja la voz! - Me regaña mi padre

Todos nos están mirando, incluso Anastasia se voltea, cuando iba saliendo en la puerta

Grace y Carrick están rojos de rabia y vergüenza

-Escuchame jovencito...estás castigado, no te daré ni un centavo este mes- me dice Carrick a mi oído

-No me sigan provocando...por que les aseguro que no respondo de mi-

-¿Algún problema, hijos míos?- El reverendo nos interrumpe

-Debemos hablar reverendo- dice mi madre

La gente, ha empezado salir, observo a Anastasia, me sonríe con tristeza, y después sigue su camino.

-Reverendo "¿en la casa del señor, se supone que entramos todos? ¿O sólo gente elegida?- Digo

-En la casa del señor entra todo aquel, que quiere entrar ¿Por que?- Mi madre me fulmina con la mirada

-Por que mi madre, quiere obligarlo a que no deje que los Steele entren a está iglesia- digo, soy consciente que me llevaré un buen castigo por esto que estoy haciendo.

-Señora Grey...yo estoy muy agradecido con usted y su familia, por su colaboración, con la iglesia...pero usted ni nadie, puede prohibir la entrada de los Steele, u cualquier otra persona- responde el reverendo, estoy seguro que Grace quiere que se lo trague la tierra en estos momentos

-¡Ya basta Christian! Deja de humillar a papá y mamá- gruñe el idiota de Elliot.

-¿Saben qué? Váyanse a la mierda, ustedes ¡y todos los hipócritas!- eso último prácticamente lo grito. Me doy la vuelta y salgo casi corriendo.

-¡Christian! - Me llama un furioso Carrick Grey. Que le den. Ya estoy harto de la gente que finge ser un buen samaritano, un buen cristiano...cuando en realidad no lo son...

-¡Anastasia! - la llamo, cuando ella está subiendo en un auto

-¡Christian! - ella se detiene, y me regala su bonita sonrisa

-Eh...me gustaría invitarte a dar un paseo ¿puedes?-

-No quiero que...-

-Por favor- suplico antes que ella termine de hablar

-Iré a dar un paseo con él- le dice a sus padres

-Claro cariño ve- ¿cómo son tan confiado? Me molesta su capacidad de ser padres responsables con Ana.

-Sí, ve con el vecino...nos vemos en la noche, si es que estás despierta cuando llegue- dice la madre de Anastasia

Anastasia, sólo finge una sonrisa, y cierra la puerta del auto

-¿Tus padres son siempre tan confiado? Ósea me refiero a que, te dejarían ir con un extraño-

-No sé, pero yo no iría con cualquiera Christian- contesta

-¿Quieres ir a tomar un jugo, o comer algo?-

-Vamos comer pizza?-

-Está bien- sonrío, por suerte mi "familia sigue adentro de la iglesia. Y no están aquí para fastidiarme

-Christian, ¿que sucedió allá dentro?- Pregunta

-No hablemos de cosas desagradable ¿quieres?- cojo su mano, y lo entrelazo con la mía

-Entonces ¿de que quieres hablar?- empezamos a caminar

-No sé...de cualquier cosa-

Se siente tan bien, su mano entrelazada con la mía. Cómo me gustaría que ella fuera mi novia, pero eso sólo es una ilusión

NUNCA TE OLVIDÉDonde viven las historias. Descúbrelo ahora