Amor Escarlata 2° Parte

Desde ahora 24

— ¡ Kira!— grita Ino.

— Ah ¿ qué? — pregunto concentrando mi atención a quienes me rodean— ¿ Qué pasa?

— No estas poniendo atención — se queja la rubia—  Te he preguntado que tal van las cosas con Itachi.

— Ah, bien— contesto— genial.

— ¿ Cuando se casarán? — el tono de voz de Chouchi denota poco interés en la respuesta— Espero que sirvan buena comida.

Ino le da codazos y regaños a su amigo mientras yo me río.

— La verdad, no hemos hablado de eso— confieso.

— ¿¡ Qué!? — exclama Tenten— Yo los veo como una pareja consolidada, solo falta que se casen.

Me encojo de hombros sin saber que decir.

—¿ Y ya han tenido sexo?— pregunta Sai de lo más natural.

Sabía que Sai no tiene mucho filtro a la hora de hablar, pero no pensé que iría tan lejos.

— ¡ No les voy a decir nada de eso!— exclamo.

— Bueno, pero ¿ Quieren tener hijos?— Sai reformula la pregunta haciendo que no suene tan mal.

< Hijos...> mentiría si dijiera que durante todos estos años no me proyectado a ese punto con Itachi. Claro que lo he hecho, pero aún lo vro con algo muy lejano para ser realidad.

— Tampoco lo hemos hablado— admito— No tenemos planes para futuro, simplemente vivimos el día a día.

— Es normal que sea así después de todo lo que han atravesado— indica Sakura— Admiro la relación que tienen.

Sus palabras me enternecen. Para nadie es secreto el amor que ella tiene por Sasuke y que debido a la lejanía de él, parece algo muy complicado de concretar, por eso me emociona que admire la relación entre Itachi y yo.

— ¿ No has hablado con Sasuke?— le pregunto discretamente al notar que el resto habla de otro tema.

— No exactamente— responde— Naruto le ha enviado una nota hace algunos días y en respuesta Sasuke ha enviado a su halcón con una nota de felicitación. Ni siquiera hace mención de mi.

— Vamos— le animo— de seguro que Sasuke solo ha entendido la mitad de la nota que Naruto le ha enviado.

Sakura se ríe.

— En eso tienes razón— dice entre risas— La letra de Naruto es horrible.

Nos reímos juntas.

— ¿ De qué rien tanto?— la voz de Itachi me obliga a mirar a mi espalda, está sin Kakashi.

— Sólo nos preguntábamos sobre Sasuke— indico— ¿ Has sabido algo de él?

— Sí — responde con aire de misterio— no les puedo contar más.

— ¿¡ Eh!?— exclamo— ¿ Por qué no?

— Se lo prometí.

Hago una mueca de conformismo.

— No te preocupes— Me acerco al oído de Sakura para susurrar— Me encargaré de sacarle la verdad.

Le guiño un ojo a ella como símbolo de complicidad.

El resto de la velada transcurre entre risas, bromas, fotos, comida y bebidas. Todos disfrutamos de la noche hasta que la fiesta acaba y cada uno toma su rumbo a casa.

***×***

— Ha sido una noche muy larga—  murmuro al tumbarme en mi cama.

— Has hecho muchas cosas— dice Itachi mientras se acerca a mi lado.

— Tienes razón, pero...— me pongo de pie y me dejo llevar por la impulsividad — Hay algo que faltó.

Itachi me mira curioso. Expectante.

— Bailemos— pido, tomo su mano y en un giro me acerco a su cuerpo.

— Jamás lo he hecho.

< Por supuesto, los ninjas no se dedican a bailar >

— Tampoco yo— digo divertida— eso lo hace especial ¿no?

Itachi asiente; sus manos se posan en mi cintura y me apega a su torso. Con movimientos torpes y lentos, ambos nos movemos al ritmo de la música que tarareo, dejando que ese sonido de mi voz guíe nuestros pasos.

— Itachi-kun... ¿ Qué era lo que hablabas con Kakashi-senpai? — pregunto en medio del baile.

— Estaba esperando que hicieras esa pegunta— sonríe — Mañana conoceré al equipo del cual seré sensei.

— ¡ Sensei!— exclamo algo sorprendida. Recuerdo haberle pedido a Kakashi que le diera ese puesto a Itachi, pero después de lo ocurrido, no esperaba que lo hiciera— Eso es genial, ¿ Estás feliz?

— Jamás me hubiera imaginado como sensei— confiesa— pero es confortante saber que podré enseñarle valores ninjas a alguien más joven. Es lo que no pude hacer con Sasuke.

— Lo harás increíble — digo en medio de un fuerte abrazo que él me devuelve con la misma intensidad.

— ¿ Como están las cosas con Kakashi? — me pregunta luego de un momento de silencio.

— Ah, pues eso— decido jugarle un broma— La verdad es que... Mientras estabas con todas esas chicas hermosas, él aprovecho la oportunidad para besarme y fue correspondido.

Itachi se aparta del abrazo y me mira con enojo.

Me río.

— Es una broma — aclaro— No ha pasado nada. Supongo que tenías razón, Kakashi-senpai no me odia. Gracias por apoyarme, Itachi-kun.

— No digas esas bromas sólo porque estás celosa— murmura.

— ¡ H-hey!— exclamo— no fui yo quien miraba en forma asesina a quien estaba a tu lado.

Itachi se ríe al reconocer la forma en que miraba  Kakashi mientras  este estaba conmigo.

— Además — continúo — Siento celos porque cualquiera perdería la cabeza por ti, eso pasó conmigo cuando te conocí.

Al instante de terminar de hablar siento los labios de Itachi sobre los míos. De alguna forma ese movimiento me hace perder el equilibrio y caigo sobre la cama con él sobre mi.

— Somos un desastre— digo entre risas, refiriéndome al baile.

< Debe ser por esto que los ninjas no bailan>

— Completamente— dice, y me besa lenta y profundamente haciendo de mi una simple muñeca dispuesta a todo por él.

Pasan segundos hasta que el beso acaba e Itachi mantiene esa cercanía que me permite ver a plenitud sus ojos y esa sonrisa tentadora en sus labios. Nos quedamos mirando en silencio por minutos, así, sin más. Como si la mejor manera de hablar fuera a través de los ojos.

— Itachi-kun... — mi voz suena como suplica. No puedo ocultar mis deseos hacia él — ¿ Puedo...tocarte?

Sus ojos muestran la sorpresa ante mis palabras, pero al mismo tiempo denotan el deseo de que lo haga.

— No necesitas pedir permiso.