Amor Escarlata 2° Parte

Desde ahora 12

— ¡Vamos, Kira. Debes ir!

Ya han pasado algunos días desde aquella noche en que hablé con Itachi, y debo admitir que mi vida social ha disminuido a cero. Me he ensimismado en mis pensamientos con la esperanza de resolver el desorden que tengo en mi vida, pero no funciona en lo absoluto.

— No tengo nada que hacer ahí— digo tratando de escapar.

— Si tienes— asegura Sakura— lo pasaremos genial, te lo aseguro.

Hace ya una hora que Ino y Sakura están intentando convencerme de acompañarlas a una pijamada luego de terminar con el trabajo en el hospital. Quieren celebrar a Hinata su relación con Naruto, pero a mi me parece que solo es una excusa para divertirse y hablar de chicos.

— Mmm...— parezco pensarlo— Si digo que sí ¿ Dejarán de molestarme?

— Absolutamente — dice Ino bastante entusiasmada con la idea.

— Bien, las acompaño — digo.

Ellas celebran alegres y ni siquiera entiendo el porqué. No es como si fuera el alma de la fiesta, a veces pienso que lo hacen por lastima de mi situación.

— ¿ Aún te quedan personas que atender?— me pregunta Sakura luego de recobrar la compostura.

— Me queda solo uno— digo— ¿ ustedes ya terminaron?

— Si, te esperaremos aquí — inquiere Ino.

— Bien— me levanto del sillón y salgo de la sala de estar para ir a atender a la última persona— Nos vemos.

Cuando abro el biombo me encuentro con alguien que conozco. Pero no deja de tomarme por sorpresa.

— ¿ Itachi-kun? — pregunto mientras me acerco para ver su rostro. Hace varios dias que no sabía nada de él — ¿ E-estas bien?

Sus negros ojos se conectan con los mios y me pongo incontrolablemente nerviosa al ver que se demora en responderme.

— Tsunade está tratando mi enfermedad— dice.

Me había olvidado por completo de aquello.

< Que desconsiderada he sido>

— ¿Tienes muchos dolores?

Itachi me mira y no es necesario que me responda para saber la respuesta. Aún tengo vivo el recuerdo de su dolor cuando intentaba sanarlo inútilmente.

— Esto se va a demorar un poco— digo— es mejor que te recuestes  en la camilla.

Él hace como se lo pido y cierra sus ojos a mi completa disposición.

Pongo mis manos en su pecho y comienzo a utilizar mi técnica. Las venas de mi cuerpo se ponen negras mientras absorbo el dolor de Itachi y tengo que guardar un grito de sufrimiento.

< ¿ Cómo es posible que Itachi-kun aguante esto?>

— ¿ Tu enfermedad tiene cura?— le pregunto un tanto temerosa de su posible respuesta.

— Si.

Al oír su respuesta me relajo inmediatamente.

< Gracias al cielo>

— Me alegra oír eso— indico.

Pasamos unos minutos en completo silencio, en los que aprecio las facciones de Itachi.

Aun me parece irreal que estemos hablando.

< Es tan atractivo ¿ Como fue posible que lo estuviera olvidando?>

— ¿ Por qué me miras de esa manera?— pregunta mientras abre sus ojos y se percata de que lo contemplo.

Soy incapaz de mantener el contacto visual y desvio mis ojos. Siento que mis mejillas se enrojecen al haber sido pillada.

— No te estoy mirando de ninguna manera en especial— mi voz es suave.

— Tus ojos aún brillan cuando me miran— dice.

Mi corazón se acelera.

No me esperaba que dijiera eso, en lo absoluto. Y mucho menos que se percatara de aquel detalle.

< Había olvidado la facilidad con la que puede leerme. Estoy completamente expuesta a él, no puedo esconderme>

— Ah, pues...— busco alguna excusa— debe ser la luz.

Itachi se levanta de la camilla y sujeta mis manos sobre su pecho. Puedo sentir su respiración en mi mejilla, que de no ser por estar esquivando su mirada, nuestros labios estarían rozándose.

— Kira...— su voz es a modo de regaño. Estoy segura de que en su llamado me pide sinceridad— Mirame.

— N-no...

— ¿ Por qué?

— Porque si lo hago...— muerdo mi labio en signo de indecisión de si finalizar la frase— Si te miro, yo...

Un ruido en los pasillos llama mi atención.

— ¡ Dejame pasar, debo verlo!— oigo exclamar a una voz femenina.

— Lo están atendiendo, no pude pasar— oigo decir a Ino.

Momento después siento pasos acercarse a toda velocidad y veo a una chica hermosa acercarse corriendo a  abrazar a Itachi, haciendo que él suelte mis manos y nuestro contacto se rompa.

Me quedo congelada.

— Saki...— susurra Itachi cuando ella lo envuelve en sus brazos.

Al oír pronunciar su nombre, mi corazón se contrae.

Me quedo mirando como ella abraza con fuerza a Itachi mientras él mantiene su mirada en mi. La escena me causa dolor.

< ¿ Por qué mi pecho duele tanto?>

— Itachi-kun, debiste decirme que venias al hospital— dice la chica mientras suelta a Itachi y lo mira con preocupación — Estaba tan preocupada al no verte en casa.

< ¿Casa? ¿ Ellos viven...juntos?>

Antes de que mis ojos se empapen en lágrimas, me pongo de pie dispuesta a salir corriendo.

— Hemos terminado por hoy— digo antes de empezar a salir.

— Kira — la voz de Itachi intenta detenerme y antes de que pueda huir, una mano agarra mi muñeca.

Me volteo al sentir que no es precisamente la mano de Itachi la que impide que me vaya.

— Muchas gracias por tratar a Itachi-kun— me dice la chica de ojos turquesa— él es muy importante para mi.

Antes de responderle a la chica, miro a Itachi en busca de alguna respuesta, pero al igual que antes, su mirada nunca responde mis preguntas. Además, no tengo derecho de pedirle respuestas...

< Yo misma lo alejé de mi. Esto es lo que quería ¿no?>

No soy capaz de responderle educadamente a la chica, así que le asiento con la cabeza y salgo del lugar lo más rápido que puedo .

— Kira ¿Estás bien?— me pregunta Sakura al percatarse de toda la situación.

— No, no estoy bien— murmuro intentando no romper a llorar.

< Rayos...soy un desastre y no puedo culpar a nadie de ello>

— Si quieres te podemos acompañar a tu casa— indica Ino siendo condescendiente.

Niego.

— No quiero estar sola en mi casa— admito— No quiero porque sé que no lo soportaré.

— ¿Vendras con nosotras a la casa de Hinata?— me pregunta Sakura.

— Si— respondo.