Amor Escarlata 2° Parte

Desde ahora 4

Ya han pasado unos cuantos meses desde que me despedí de Itachi en su tumba y debo admitir que seguir adelante ha sido difícil, cuando pensaba que todo estaba bien repentinamente me derrumbaba en medio de la noche llorando su ausencia y clamando su nombre. Fue como una montaña rusa.

Hoy en día la imagen tan clara de Itachi se ha vuelto como una foto que ha estado demasiado tiempo bajo el agua y a perdido sus colores, su imagen es borrosa y poco nítida, aquellas facciones tan marcadas están ahora difuminadas. Ya no recuerdo muy bien su rostro, a decir verdad lo que recuerdo de él no tiene relación a como lucía, sino que a su esencia. Itachi se ha convertido en un recuerdo que solo me produce nostalgia y amor que guardaré en el fondo de mi corazón.

Supongo que de eso se trata la resiliencia humana, de que los recuerdos dolorosos se van borrando con el paso del tiempo y eso hace posible que sigamos viviendo sin tanto dolor.

Es curioso lo que sucede con la mente y el corazón: el como algo que te lastimaba tanto hace un tiempo atrás, ahora no es más que una cicatriz a la incluso le tomas aprecio.

— ¡Kira-chan!— la voz de Naruto me saca de mis pensamientos.

<Hoy es el cumpleaños de Kakashi-senpai>

Termino de arreglar mi cabello y abro la ventana de mi casa que da a la calle.

— Ya te dije que no me llamaras así — le reto. Hace tiempo ya que le dije que me molestaba que le agregara  “chan” a mi nombre, y aún así lo hace. Supongo que en eso consiste nuestra relación: molestarnos.

— Solo faltas tu, Kira-chan— insiste él.

— Estoy lista— le indico.

— Bien — dice— entraremos en cuanto lo saques de la casa.

— Si— asiento — ¿ estás seguro de que todo estará listo en la noche?

— Seguro.

— Bien— suspiro— espero que resulte. Es muy difícil sorprender a Kakashi-senpai porque siempre lo sabe todo.

— ¡ Esta vez lo si haremos, de veras!— indica — No sabe absolutamente nada.

Me es inevitable no reírme por su entusiasmo.

— Bien— tomo confianza— Manos a la obra.

Naruto se reúne con el resto del grupo a esperar mi señal mientras yo voy al blanco: Kakashi.

Tomo el regalo de Kakashi y salgo en dirección a su casa. Una vez que llego toco la puerta y afortunadamente me abre enseguida.

— ¿ Kira?— pregunta un tanto adormilado. Quizás se acaba de levantar.

— ¡ Buenos dias, Kakashi-senpai! — sonrío y extiendo el paquete de regalo a sus manos — Feliz cumpleaños.

— Oh, gracias — se muestra sorprendido — No me esperaba esto.

— ¡Vamos, abrelo!— lo animo.

Me hace pasar a su casa y abre el regalo. Sus ojos se abren en sorpresa.

— Y ¿ Te gusta?— pregunto.

— ¿ Lo escogiste tu?— cuestiona —
¿Lo leíste?

— No, le pedí al vendedor que me recomendara un libro para un lector de Icha-Icha— indico — Aunque me costó mucho que me lo vendiera porque no creía que fuera mayor de edad. Incluso le tuve que mostrar mi identificación. No entiendo porqué tantas trabas.

— Ya veo, que bueno — se relaja— muchas gracias por el libro.

— No hay de que— admito — Ahora ¿ tienes el día libre?