Lo que le haría a Kim JongIn (LQLHAKJI)➡[KaiSoo + OTP's ] «En emisión»

Capítulo 36: Fiesta - Parte II

ALISTEN  SUS PAÑUELOS PENDEJAS, PORQUE ME DEMORÉ, PERO ESO NO SIGNIFICA QUE HAYA MENOS DRAMA!

POV KyungSoo

Desperté luego de una noche tranquila y caliente, pero lo del tipo que me solía agradar, sino de una que podría ser incluso mejor, porque desde un principio me sentí a gusto en los brazos de JongIn, lo cual era extraño para mí. Nunca dormía abrazado a nadie y la primera vez que JongIn me abrazó, me sentí fastidiado, quizá la comodidad era parte de aceptar a JongIn un poco más cerca de lo que ya estaba.

Por desgracias, todavía tenía pequeños recuerdos de mi sueño, los cuales lograban tintar la tranquilidad con dudad y nervios. Había soñado con MyungSoo, lo cual significaba que inconscientemente me perturbaba en sobremanera que nos volviéramos a encontrar.  La última vez no había sido nada agradable, él sabía cosas mías (distorsionadas) y eso me sorprendía que lo supiese. Era aterrador.

Extrañaba los días en los que MyungSoo y yo solo nos dedicábamos a jugar y pasarla bien hasta que nuestros padres nos llamaran para comer o ver una película juntos, pero ahora no había posibilidad de eso, lo peor de todo es que no sabía el motivo del cambio. Tal vez era cosa suya mezclada con las estupideces que hice.

Quise moverme, pero al abrir los ojos me topé con el pecho moreno de JongIn en todo su esplendor. Sus brazos me tenía apresado como lo imaginé y sus manos se cerraban en mi espalda baja, mientras que las mías delineaban su delgada cintura. Nuestras piernas eran un enredo, pero no era incómodo, de hecho todo era bastante agradable, incluso la temperatura. 

Levanté la cabeza para observar su rostro y me topé con unos labios separados, una respiración lenta y acompasada, ojos cerrados adornados por pestañas espesas y una flameante piel morena, parecía chocolate y yo tenía hambre.

Sonreí para mí mismo y me aproximé nuevamente a su pecho para, esta vez, besarlo. Casi gemí de placer cuando sentí el perfume que desprendía su piel, ¡De verdad parecía chocolate! Seguí lamiendo sus pectorales hasta llegar a sus clavículas, donde besé con un poco más de insistencia. Hice que mis manos acariciaran su cintura, al principio suave, pero ¡Mierda que tenía ganas! No pude contenerme, así que lo comencé a apretar, mientras que decidí comenzar a frotar mi pierna contra su miembro dormido. JongIn parecía un tronco, no reaccionó a los primeros pasados tres minutos, pero luego, cuando hice más fuerza con mi pierna, porque ya estaba ansioso, por fin despertó algo espantado, pero se lo atribuí a que lo había mordido con fuerza.

Me tomó de los hombros y me separó un poco para poder restregarse los ojos. La habitación estaba oscura todavía. Me puse de rodillas y sin titubear me subí encima de sus caderas, donde empecé a moverme. ¡Estaba cachondo! Me mordí el labio cuando JongIn dijo con voz ronca "KyungSoo, ¿Qu-qué haces?". Como si fuera difícil de adivinar, ¡Quería sexo! ¿¡Qué más sino!?

JongIn se sentó como pudo y me tomó de las caderas para evitar que me siguiera moviendo, aunque ya podía sentir su erección hincándome el trasero. Por fin se me haría el milagrito, todo yo danzaba en una  danza afrodisíaca de victoria, más cuando el moreno me besó con un poco de nerviosismo, estaba en el paraíso, pero claro, no debía olvidar que estaba con el señorito que le gustaba calentar la tetera más no servir el té.