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Capitulo siete.

Ya había pasado alrededor de una semana.

Una semana en que se había pasado cada tarde después de clases en casa del teñido, luego se separaban para cada uno hacer sus trabajos de clases, a medianoche Luke esperaba que Michael cantara sin que éste se enterara, y luego ir a reunirse al balcón y caer dormidos ahí mismo.

Esa se había vuelto la corta rutina del rubio la cual no se podía y quejar, a éstas alturas ya parecían lapas pegados todo el día. Y Luke sabía que no estaba bien.

Ni siquiera había visto a Healy y un pequeño sentimiento de culpabilidad se había instalado en su pecho. Había dejado de lado a su novia, un par de veces se había cruzado con ella por los pasillos y entablaban un par de palabras pero más allá de eso no pasaba.

Luke bufó al lado de Michael y dejó el control a un lado mientras el teñido marcaba un gol.

—¿Qué sucede?— preguntó Michael mirándolo con el ceño fruncido.

—Healy— resopló el rubio frotando su sien.

—¿Tu novia?— cuestionó el teñido y Luke asintió en respuesta.— ¿Qué pasa con ella?

—No la he visto, o sea sí, pero no lo suficiente, no he pasado tiempo con ella.— explicó mirando a Michael.

El teñido asintió y apretó sus labios con desilusión. Se le había olvidado por completo el hecho de que el rubio tiene novia.

—¿Te quieres ir?— preguntó Michael rogando en su interior para que la respuesta fuera un rotundo no.

—Sí.— respondió Luke con pesadez para luego levantarse del sofá rápidamente.

Michael también se levantó y caminó junto a él hasta la puerta.

—Bien, supongo que... luego nos vemos.— se despidió brevemente Michael reprimiendo sus ganas por amarrarlo al sofá y no dejarlo ir nunca.

Luke asintió y salió del departamento en camino al suyo. Michael soltó un suspiro al cerrar la puerta y apagó la consola la cual se había convertido en la única excusa para tener al rubio más tiempo de lo normal junto a él.

Luke al llegar a su departamento fue a buscar un par de cosas y salió de inmediato en busca de Healy a su casa.

El camino lo halló bastante más largo de lo que recordaba pero suspiró con alivio al ver la casa frente a él. Tocó un par de veces la puerta y minutos después apareció la chica vestida con una bata sobre su cuerpo y sus pantuflas de conejitos.

—Y mira quien se digna aparecer.— apareció la castaña frente a él con los brazos entrecruzados sobre su pecho.

Luke hace una mueca.

—Lo siento. Estuve ocupado.— se excusó.

Healy rodó sus ojos y le dio espacio para que se adentrara a la casa.

—No quiero tus excusas Luke. Te extrañé.— murmuró la chica depositando un beso en la mejilla del rubio y éste la recibió con un abrazo. Por un instante se arrepintió de haber pasado todas esas horas con su vecino y no estar con su novia. La chica que siempre había estado ahí para él.

—¿Qué estabas haciendo linda?— preguntó Luke besándola en los labios.

—Estaba por entrar a la ducha.— sonrió la chica.

—¿Eso significa que estás desnuda?— preguntó Luke dandole una mirada pervertida mientras la chica asentía con una mirada divertida.

El resto es historia.

the sound of your voice ;; mukeDonde viven las historias. Descúbrelo ahora