Es un poco imposible de creer que aún en la actualidad, haya personas que consideren que la homosexualidad es una aberración. Pero es lo que es, cada cabeza es un mundo y nadie nunca cambiará eso. Mucho menos Harry y Louis.
Ellos ahora estaban en un supermercado nuevo que había abierto, Louis estaba decidido a ir a hacer las compras, hacía mucho tiempo que no iba. El problema de todo es que una señora de unos sesenta años se les acercó al verlos agarrados de la mano y compartiendo uno que otro beso discreto, y no fue precisamente para decirles lo lindos que se ven juntos.
Estaba a punto de explotar, pero Harry seguía acariciando el dorso de su mano queriendo decir "tranquilo, Lou, no te vuelvas loco." Esa era la forma de Harry de decirle que se calmara desde que se conocieron. Louis de verdad admiraba aquella paciencia que tenía el ex-rizado para tratar con personas tan ignorantes.
-¡Es algo completamente en contra de las leyes de Dios!- berreaba aquella mujer haciendo que otras personas se detuvieran unos segundos para saber qué era lo que le pasaba a aquella mujer -¡Ustedes son unos pecadores! ¡Necesitan perdón de Dios! Arrepiéntanse ahora y tal vez la ira de Dios no caiga tan intensamente sobre sus almas.-
Eso fue más que suficiente para Louis.
-Señora, con todo respe...- comenzó a decir Harry pero Louis lo detuvo.
-No, mi amor. Déjame hablar a mí.- le dijo el castaño. Los ojos verdes del hombre más alto se abrieron completamente, esto no iba a terminar de una forma muy decente, pero al mismo tiempo, estaba seguro de que se divertiría con las ocurrencias de su esposo.
-Señora, no sé si por allá en el siglo XV cuando usted nació, la homosexualidad haya sido algo malo.- comenzó diciendo, la mujer abrió la boca en forma de "O" -Pero estamos en el siglo XXI, donde las personas han aprendido que el amor no conoce de géneros, donde juzgar a alguien por su sexualidad no es más que una estupidez, donde chillar como vaca pariendo cuando vez a dos hombres o dos mujeres besándose no es más que un grito de temor, y muchas veces, envidia, porque tal vez en su época quiso chupar una vagina pero su sociedad no se lo permitió.- su esposo le apretó la mano y le susurró un "Louis..." en forma de advertencia para que no sobrepasara los límites -Y mire, tengo a este hombre, un maravilloso hombre, mirándome con cara de "Louis, déjalo ir" porque es como es él, más bueno que el pan, no le gusta ofender a nadie.- mira a Harry le sonríe tiernamente, y luego se dirige a la mujer frente a él con el rostro súper serio -Pero usted me ha ofendido a mí, y yo no soy tan bueno.-
-Jovencito, mejor que cierres la boca ahora.- dijo entre dientes la mujer.
-No, mejor usted cierre la boca con todos sus comentarios ignorantes.- le dijo desafiante, Louis notó como había gente sonriendo y grabando la discusión -Nadie le ha preguntado si Dios ha estado de acuerdo con nuestra relación, nadie le ha preguntado si es una aberración o no, nadie le ha preguntado si está de acuerdo con esto que tenemos o no. Pero de igual manera usted ha abierto su inmensa boca chupa vaginas.- sonríe al ver la cara de molestia de la mujer -Ustedes los religiosos son tan contradictorios, dicen que no debes juzgar a nadie, y ustedes lo hacen en nombre de Dios. Dicen que el amor es lo más hermoso de la tierra, pero si dos hombres se aman, es algo asqueroso y deplorable.-
-Dios creó a hombre y mujer.- susurró la mujer.
-También creó a la vacas, ¿A quién diablos le importa?- las palabras de Louis soltaban veneno -Me parece gracioso que muchas personas digan que la "ira" de Dios recaerá sobre nosotros los gays. ¿La ira no es un pecado capital?- la mujer no respondió nada -No recuerdo mucho de la clase de teología que tomé en la universidad, pero si recuerdo que la ira era un pecado capital. ¿Dios tiene ira? ¿Dios también es un pecador? ¿Acaso no es él el misericordioso?-
-Lo haz malinterpretado.- susurró la mujer quien no sabía que responder ante eso.
-Sólo le diré, señora. Por el simple hecho de que usted esté soltando sus opiniones ignorantes e innecesarias, no me hará menos gays. Porque adivine algo...- se acercó a la mujer con una gran sonrisa -¡Amo los penes! ¡Los amo con locura! Y mi pene favorito es el de este hombre a mi lado.- abraza a Harry, quien a estas alturas tenía la cara roja por lo que había dicho Louis -¡Y amo a este hombre! Lo amo como a nada en mi vida, y si a usted no le gusta, pues entonces tápese los ojos porque estoy a punto de hacer algo que no va a querer ver.- y justo allí, Louis besa a Harry, se engancha en su cuello y lo aprieta más cerca de sí mismo, Harry corresponde el beso de inmediato, tomando a Louis por su cintura y cargándolo para que Louis coloque sus pies sobre los de él.
Todos aplaudieron por ese gran final. La señora los miró con asco, y despotricando palabras que a nadie le importaban, se fue del lugar. Harry comenzó a reír entre el beso.
-¿De qué te ríes?- sonrió Louis mientras pegaba su frente con la del hombre más alto.
-Creo que acabas de traumatizar a esa pobre mujer.- sonríe ampliamente.
Louis encoge los hombros -Que se joda.- y sin más, vuelve a besar a su esposo.
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Hola, mi gente hermosa y bella y de todo. Actualizando porque son bellos y se lo merecen
No se olviden de comentar porque amo los comentarios.
Y de votar claro.
Ah, por cierto, la historia se quedará Harry Tops, porque yo soy muy obediente y les hago caso chikis.
Bueno, eso es todo, cambio y fuera amiwos
- Fer xx
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Expediente #505: Un matrimonio fallido [Larry Stylinson] {{TERMINADA}}
FanfictionDespués de diez años de matrimonio, Harry y Louis ya no son los mismos. Sus discusiones son constantes y no se soportan ni un minuto más, todo está perdido. A veces hace falta más que amor para mantener viva una relación.