Eres comprador de almas, las mas baratas, eres el vendedor de vidas, el mejor postor,cabizbajo esta el honor, muy triste el corazón.
Papel que mata, que engaña, te traiciona y te arrastra al oscuro abismo, papel marcado con sangre, donde sus rostros impresos no tienen sentimientos.
Metales arrancados a la madre tierra,ella no los quiere, porque manchan sus manos, hombres codiciosos rompen las rocas, matan su humanidad y entierran la bondad.
Codicia es tu credo, «quiero más » es tu plegaria diaria, bolsillos llenos es el sueño de cada noche, seis ceros tus mejores amigos.
Alguien llora pues no lo posee, alguien ríe pues todo lo posee, niños con hambre, madres desesperadas piden la limosna.
Dorados los falsos corazones, brillantes y cegadoras las falsas almas, vacías están pero rebosan de avaricia.
Plateadas son las espadas que matan las bocas que piden pan, que hieren los ojos con tus excesos caprichosos, que amputan las manos que piden lo justo por su sudor.
Maldito seas, en papel y en metal, maldigo tu poder, tu destrucción, tu frío tacto, maldito tu ser, carente de escrúpulos, que te entregas a las manos sedosas,, y te resiste con las manos del trabajo duro.
Dinero maldito.