El pequeño Tae....// vkook

"Pasado"

// x años \\

"-Lo prometiste....- Dijo ella entre lagrimas.-Prometiste.... Que siempre estarías aquí, conmigo.- Sosteniendo esa arma de doble filo entre sus manos temblorosas.

-Cálmate Hyleen. Esto se solucionará.- Decía él, nervioso y atemorizado.

-Si... Y yo lo arreglaré.- Sin piedad y con locura, lo hizo. Incrusto aquel arma en aquel cuerpo, fingiendo solucionar todo."

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// x años \\

El sol estaba a su merced, iluminando como todas las mañanas aquel campo tan maravilloso, se sentía el extraño pero magnifico olor a césped húmedo, pero no por la lluvia, sino por aquella mangera la cual era sostenida por una mujer mayor.

-Buenos días pequeño.- Dijo ella volteando a ver el rostro de un somnoliento Taehyung.

-Buenos días Nona.- Saludo él, rascando su ojo.

-Ve a la cocina, ni bien termino de regar voy para allá cariño.- Dijo sonriente a su pequeño, Taehyung con mucho gusto asintió y se marcho al susodicho lugar.

"Aléjate de él Hyleen"

"No puedes obligarme..."

El pequeño tomó asiento en una de las sillas del lugar, sintiendo todo tipo de recuerdo pasar por su cuerpo, provocando escalofríos. No era la primera vez, al principio era siempre, pero ahora logró salvarse de aquel trastorno, pero atrayendo otro.

Su nona entró por aquella puerta trasera, le sonrío a su pequeño, el cual devolvió aquel gesto, y siguió su camino hacía el baño, para higienizarse. Luego de unos minutos volvió y preparo el desayuno a su nieto, un delicioso té junto a una rica tarta de manzana, su especialidad, Taehyung le agradeció con una cálida sonrisa y comenzó a comer.

-¿Como te sientes cariño?- Preguntó ella tomando asiento a un lado de él. Taehyung suspiro cansado, no había sido su mejor noche, ni las anteriores.

-No lo sé- Dijo triste. Su abuela lo observo, aquel rostro lleno de tristeza y confusion, le disgustaba demasiado.

-¿Otra vez tuviste pesadillas?- Preguntó de nuevo, apoyando su mano con delicadeza en su hombro, transmitiendole confianza, a lo que el pequeño asintió.

Estaba cansado de sufrir, como si lo ocurrido no hubiese sido suficiente, como si necesitara más, temía, temía a que nunca acabara, temía a quedarse solo, que se rompa por completo y que nadie lo salvase, temía a convertirse en alguien que nunca quiere ser, él temía.

-Nunca acabara... ¿Verdad?- Pregunto con un nudo en su garganta, tratando de no soltar sus lagrimas.

-No mi niño, no te pongas así, ya veras que todo se solucionara te lo prometo Taehyung.- Dijo ella triste, acercándose a su nieto y tomandolo por los brazos, apegandolo a ella, acariciando con una mano su delicado cabello.

-No me dejes Nona... Eres lo único que tengo.- Y se derrumbó, comenzando a sollozar lo más fuerte que pudo, abrazando al único ser que estaba a su lado.