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// Actualidad \\

El sonido de la alarma resonó en la habitación, marcando las 06: 30 de la mañana. Jungkook se desveló gruñiendo del sueño que aún tenía, refregó ambos ojos con delicadeza para luego abrirlos y poder enfocar bien su vista, chocando con los pequeños rayos que entraban por su ventana, iluminando su habitación. El sonido ya le parecía irritante, por lo que estiró un brazo tomando su celular y así apagar la alarma con pereza, lo revisó por unos minutos encontrándose con un mensaje de su querido amigo

Charlie:

Hey jeon, ¿Que te parece si tomamos un cafe? Yo invito

Ayer, 11: 30 PM

El pelinegro sonrió al leer el mensaje, hace tiempo que no veía a su amigo y que tampoco salía, todo por horas extras en la empresa, su empresa. r
Respondió su mensaje aceptando y preguntando el horario.

Se levantó agotado de su cama y caminó a la puerta, saliendo de ésta y atravesando el marco del baño, que se encontraba a un lado de su habitación. Se higienizo sin ganas, por suerte hoy debería ir a una simple junta de trabajo, después tendría todo el día libre, salió del baño y volvió a entrar a su habitacion. Abrió el armario y tomo una camisa a cuadros junto a unos pantalones negros y bien ajustados, se desvistió y se puso dichas prendas, tomó sus típicos borsegos y se los puso. Jungkook nunca había perdido el gusto de usarlo, ni mucho menos a la hora de vestirse.

Luego de bajar y desayunar salió de su casa y entró a su vehículo bien cuidado. Manejó a su empresa por diez minutos y llegó justo a tiempo para la reunión. Entró por la recepción y fue recibido por la coqueta sonrisa de su secretaria, la cual devolvió seductor, provocando que la mujer de vestimenta ajustada se relamiera sus labios. Subió al elevador he indicó el piso que queria ir.

-¡H-Hey! ¡Detenlo por favor!- Una voz conocida llamo la atención del pelinegro, estiró rápidamente su mano para evitar que ambas puertas cerraran. Luego de unos segundos, apareció un hombre agitado de la corrida que se mando para poder entrar.-Gra... Gracias, Jeon- Agradeció aún controlando su respiración, reincorporándose de su pocision para alzar la cabeza y dedicarle una sonrisa- Buenos días- Saludó formal, provocando una sonrisa al pelinegro.

-¿Se te hizo tarde, Choi?- Rió seco, acomodando de su ajustada camisa, resiviendo un bufido de su parte.

-Que maleducado, Jeon- Reprochó frío.- Y no fue mi culpa. Brad me obligó a dormir en el sillón y olvidé cargar mi celular- Se excusó enfadado al recordar su, al parecer, desagradable noche. Jungkook no dijo más y esperó hasta llegar a su piso.

Las puertas se abrieron y Jungkook se despidió de Choi, uno de sus compañeros, que por cierto nunca para de hablar. Se acercó a la sala y entró recibiendo la mirada de todos y un silencio eterno, teniendo que ponerse de pie para recibir formal al jefe del lugar. Jungkook aceptó y devolvió el saludo, tomo asiento junto a todos, dando por comenzada la reunion.

(...)

Jungkook estaba dentro de su coche, manejando a la dirección que su amigo le había pasado para encontrarse, de seguro era una cafetería. Su reunión fue bastante aburrida, otra vez el mismo problema de crear algún tipo de proyecto, a él no le preocupaba ya que tenia algunos en mente, que no piensa mencionar ante nadie hasta ser bien organizado y planeado.

Miró la hora en su reloj de mano y marcaba las nueve y treinta. Estaba en la esquina del lugar, por suerte pudo aparcar en la misma cuadra de la cafeteria, quitó las llaves del auto y salio de éste, camino hasta la entrada del lugar y abrió de la trasparente puerta, sus fosas nasales fueron invadidas por un delicioso aroma a vainilla y café, Su aroma favorito. Observaba las mesas vacías, fue interrumpido por un saludo en la parte de recepción, lo cual devolvió educado, fijando de nuevo su vista a los asientos. Diviso a lo lejos una cabellera oscura, sonrió satisfecho al encontrarlo y comenzó a dar pasos a él.

El pequeño Tae....// vkookDonde viven las historias. Descúbrelo ahora