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Un mes pasó desde que conocí a Tom, en ese tiempo me contó de su vida. Él fue un investigador hasta que lo acusaron de fraude ante un caso que según él era una farsa para hacerlo caer.

Al ser despedido no se rindió y continuó realizando casos menores que conocidos le pedían, logrando buenos resultados, en este caso él mismo decidió meterse ya que le pareció extraño la desaparición de sus vecinos por segunda vez. Lo único que tenía era la idea de que escaparon de alguien, investigo información de los padres y no tenían ningún familiar habitando en la ciudad como para ayudarle. Hasta que se enteró que el padre de Taehyung le gustaba apostar demasiado, pero es casi imposible sacar una hipótesis respecto a eso ya que nunca note nada extraño viniendo del padre y mucho menos su madre.

Caminé otras cuadras analizando cada detalle en el pasado, por si algo se me escapó y nunca noté pero nada resaltaba de lo normal. Con la comida entre manos crucé la última calle que me guía a la playa, era de noche y el verano mantenia un hermoso clima nocturno. A veces venía aquí a refrescar mi mente y comer algo con semejante vista, la luna parece estar brillante reflejándose en el tranquilo mar.

Nunca hay nadie a estas horas pero esta vez es distinto, alguien se mantiene parado en la orilla, me tome la molestia de quitarme los zapatos y sentir la fría arena enterrarse en mis pies para poder caminar hasta encontrar un como sitio.

No me parece extraño que alguien más esté, pero un escalofrío se avecino en mi espalda, como si tuviese que estar alerta de algo. No me acerce a lo que parecia ser un muchacho, mantuve una distancia y seguía observando su ancha espalda, tomé asiento ensuciando mi trasero y abrí la pequeña bolsa de papas fritas.

Mi respiración se mantuvo tranquila, al ritmo de las pequeñas olas rompiendo provocando el clasico sonido del mar. Mi vista dejó de enfocarse en el agua gracias a la figura lejana que comenzó a moverse, dándose la vuelta y caminando en dirección a la ciudad, al parecer se está marchando cabizbajo y encapuchado.

Metí una mano en mis bolsillos tomando el celular en busca de mi playlist. Eligiendo una canción que me trae tantos recuerdos, subiendo por completo el volumen siendo lo único que se escucha entre tanto silencio. Crei haberme equivocado al ver que la persona se detuvo a unos pasos míos, sin dejarme ver su rostro frunci mi entrecejo.

-¿Hola?- hablé extrañado, detallando su gastada ropa y su cuerpo con expresión de agotamiento.

-Recuerdo esa canción, hace que mi corazón se oprima. ¿A ti no?-

Mi rostro se endureció al igual que mi cuerpo, dejé caer el celular y mis ojos parecían salirse de órbita. Sus palabras se derivaron a mi corazón junto a una fria correntada en mi nuca, no se en que momento me levanté de la fria arena pero ahí quedé, frente a él y esa voz que para mi es tan familiar, en realidad todo de él es tan familiar.

Mi garganta se encerraba, conteniendo las lágrimas que se amontonan, tal vez falló mi vista, mi cabeza. Pero su rostro no deja de reflejarse bajo la luna,  sus muecas que tiemblan conteniendo algo. El temblor de mi cuerpo no quería detenerse y mi respiración se acortó en segundos.

-Tu..- formulé dando un débil paso, tragando con más necesidad. Ya era tarde, la humedad caía con velocidad de mis ojos, nublando mi vista. -¿Qu-Que ha...- un sollozo salió de mis labios interrumpiendo mis palabras, no quiero seguir hablando, tengo miedo de que en un parpadeo desaparezca como en mis sueños, pero se ve tan real, su acercamiento hace posible mi pensamiento, esta aquí.

Esta a escasos centímetros, sus lagrimas se ven tan claras, su rostro tan hermoso. Taehyung realmente se ve distinto, apagado, mis sollozos se apoderaron del sonido superando el volumen de la musica que ni me moleste en apagar.

-Eres tú, ¿verdad?- llorando elevé sutilmente una mano con miedo de que sea un espejismo al instante en tocarlo, pero mierda que me equivoque,  esa sensación  tan dulce que antes era costumbre hizo que mi cabeza haga un 'click' al instante. Su piel humedecida erizo hasta las puntas de mis pies.

Me balance a su cuerpo voluptuoso, el sentimiento vuelve, carajo, ¿Cuantas cosas se  marchitaron desde que se fue?, su aroma es igual que antes, su cabello ahora grisáceo sigue siendo tan suave ante mi tacto, mi respiración tan desesperada no da abasto, al igual que él.
-Taehyung... Taehyung en verdad eres tú- llorando a mares sin querer detenerme, quitando el dolor que por tanto guardé- estuve esperándote tanto, sufrí una Soledad inmensa. Mierda te extrañé demasiado.- mi saliva se seca provocando una ruidosa tos, sin dejarme hablar.

-N-No insultes- otro sollozo salió al recordar eso, pero la emoción no dejó de surgir en mi pecho al ser tan nostálgico. Parece que no mencionara nada gracias a su llanto. Sus brazos se aferran tanto a mi cintura que la sensación revivía.

El sentimiento es tan agridulce, no se como reaccionar realmente, el llanto no frena y la sonrisa no desaparece. Mi corazón parece unirse al suyo, latiendo a mil por hora, mis piernas se debilitaron por completo y no resistí más, caí  siendo sujetado por él pero que me ayudó en apoyar mis rodillas en la arena, en ese instante no dudé más, me tiré sobre él provocando un seco golpe de su cabeza en la fria arena manteniendo mi cuerpo sobre el suyo. No se molesto en moverse y apretó cada vez más mi piel sin querer despegarse, los llantos no cesaban y mi cabeza seguía escondida en su cuello sin querer moverme.

-J-Jungkook- un llanto ahogado se escapó de mis labios, por Dios, desde cuando no lo escucho decir mi nombre. Deseo que lo siga haciendo sin parar, taladrandome con su gruesa voz que al parecer se hizo más grave.

Tuve la valentía de alejar mi rostro y ponerlo sobre el suyo. ¿cuanto habrá madurado en estos torturosos años?, su estructura de cuerpo no es la misma, sus facciones tampoco, se ve realmente como un hombre, apreté mis labios frunciendo el ceño, pensar que me perdi tanto de su vida como él de la mia. Mis lágrimas caían sobre sus mejillas, no pude soportarlo y uni mi frente a la suya cerrando ambos ojos, quitando el dolor que parecía ser infinito, soltando estruendosos quejidos, escuchando los suyos.

-T-Taehyung..- solloce, alejando mi rostro del suyo, pero manteniendo mis ojos entrecerrados por el llanto.- d-duele...-  tragué saliva, apretando sus hombros con mucho miedo.

-¿te lastimaste?-  preguntó inocente, sorbi mi nariz y asentí irónicamente.

-D-duele mucho...- solloce aún más fuerte y sin más señale con una mano indicando de dónde proviene el dolor, tocando ni pecho suavemente, llorando a mares.

-Kookie...- sollozó, sorbiendo su nariz, de un momento a otro sus manos se colocaron en mi hinchado rostro, cautivandome por completo, su tórax comenzó subir hasta estar sentado, mi cuerpo no se despegó del suyo, sentado sobre él guiando ambos brazos sobre sus hombros, llorando al recorrer cada parte de él. Mordió su labio inferior colocando una expresión de tristeza, partiendo en llanto otra vez. -Abrazo de oso... P-Por favor- su voz tan débil atravesó mis oídos y no dudé en apretarlo junto a mi, ambos expulsando el dolor a través de lágrimas, gritos, sudor y más que nada en el abrazo que tanto extrañe.

'Duele'

El pequeño Tae....// vkookDonde viven las historias. Descúbrelo ahora