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// 14 AÑOS \\

-¡Jungkook! ¡Mira!-. Llamó eufórico el castaño, quien estaba frente a la ventana de su casa observando afuera.

-¿Que pasa Tae?-. Aparecio el pelinegro detrás de él con una sonrisa.

Esta nevando kookie!- Tomó el brazo del nombrado y lo zarandeó mientras saltaba de la emoción- ¡¿Podemos ir?!- Pregunto junto a un puchero rogativo, causando una risa por parte del otro.

-Hmm..- emitió dudoso, aunque era una broma- ¡El último en salir pierde!- Mencionó exaltado, corriendo hacia la entrada de la casa buscando su abrigo, el castaño refunto y lo siguió.

(...)

-¡Kookie! ¡Mirame! Estoy haciendo un ángel de nieve- Gritaba emocionado el castaño, moviendo ambas piernas y ambos brazos, formando aquel ángel que tanto mencionaba.

Ambos se habían puesto todo tipo de abrigo, desde guantes, hasta doble par de calcetines por el frió que hacía. La nieve había dejado de caer hacia rato, pero igual había caído bastante, amontonándose por todos lados ¿Y que mejor que aprovecharla?

-Te quedó bien Tae... Mira el mío- Dijo con un tono alegre, terminando de mover su cuerpo y saliendo del supuesto ángel que hizo.

-El tuyo también kookie, ¡Mira, son iguales!- Mencionó Taehyung señalando ambos ángeles y riendo.

El pelinegro asintió divertido, se levanto del suelo y corrió lejos del castaño, dejándolo con un entrecejo de confusión. Al encontrar un buen lugar para aguardarse comenzó a unir la nieve en su mano, creando aquella clásica bola de nieve.

-¿Kookie?. ¿Dónde te has ido?- preguntó preocupado, alzando la voz y comenzando a buscar con la mirada a su amigo.

De pronto sintió cómo algo duro golpeaba su espalda, asustandolo, volteo por donde previno y diviso al pelinegro con otra bola de nieve en su mano, Taehyung apenas reaccionó de la situación sonrió burlón y corrió a esconderse él también.

Estuvieron escondidos durante cinco minutos y ambos tenían preparado miles de bolas de nieve, esperando a lanzarlas contra el otro.

-Sal pequeño... No es bueno esconderte.- Amenazo juguetón el pelinegro. Escuchando una despiadada risita como respuesta.

Alzo la vista tratando de ubicar a su amigo. Pudo ver como él mismo salia de su escondite con ambas manos arriba, queriendo decir que se rendía.

-Me rindo kook, tu ganas- Dijo sonriente el castaño, dejando total duda al pelinegro. "Pero si esto acaba de comenzar...." Se cuestionó así mismo.

El pelinegro se levanto bufando de la fría nieve, soltando la que mantenía en su mano, seguía sin creerle.

-Pero si toda....-. Fue interrumpido gracias a que una desprevenida bola de nieve choco contra su pecho, sorprendido miro a su amigo quien mantenía una sonrisa de total burla y maldad, al parecer tenia aquella nieve escondida en sus bolsillos.

Jungkook sonrió malicioso he iba a tomar una bola que dejó en el suelo, pero fue detenido por su amigo, quien arrojo otra bola.

-Aléjate de ahí-. Advirtió burlón el castaño, Jungkook obedeció sonriente. Salio de su escondite y se acerco a Taehyung con cuidado-Arrodíllate-. Ordenó, el pelinegro hizo caso omiso y mantenía ambas manos sobre su cabeza.

-¿Que me harás?- Pregunto desafiante el pelinegro, quitando una pequeña risa al castaño.

-Dejame ver...- Menciono pensativo, ¿Que debía hacer? Se preguntaba Así mismo.
Lamentablemente el castaño había desviado la mirada al cielo, y terminó recibiendo una bola de nieve proveniente del pelinegro, quien la había mantenido escondida en su capucha.

-Corre pequeño- Aconsejo amenazante el pelinegro, recibiendo una burlona risa.

Y así comenzó la guerra de nieve para ambos. Se tiraban una por una, sin detenerse, ambos reían sin parar, eran los únicos en jugar con la nieve en todo el vecindario, en ocasiones Taehyung se resbalaba y en otras Jungkook daba vueltas en la nieve tratando de esquivar las bolas de éste.

Los minutos pasaban y las bolas de nieve se les acababa, en especial al pelinegro, además ambos ya estaban cansados de tanto correr.

-Maldita sea- Masculló divertido Jungkook, se acababa de quedar sin bolas de nieve, y lo peor era que no esta en su escondite.

-¡Ajá!- Grito el castaño, tirando otra bola de nieve al pelinegro, quien alzó ambas manos, en forma de rendimiento.

-Se me acabaron, me rindo- Dijo irritado, acababa de ser derrotado por su amigo. Quien solo se burlaba de él.

Taehyung se acerco corriendo a Jungkook, quien abrió los ojos de par en par al ver cómo éste se acababa de lanzar a él, literalmente. Provocando que Jungkook caiga y choque contra la fría nieve, Taehyung callo encima de su amigo y comenzó a reír como loco.

-Que bueno porque esa era mi ultima bola de nieve kookie- Confesó divertido, haciendo reír al pelinegro.

Ambos estaban tan cerca, ni si quiera les preocupaba, estaban tan entretenidos en reír como locos, hasta quedarse sin aire. Jungkook abrió sus ojos encontrándose con la hermosa sonrisa del castaño, quien accidentalmente chocó su nariz con la suya. Taehyung abrió ambos ojos ante el impacto, le dedico una sonrisa a su amigo y comenzó a refregar su fría nariz con la del pelinegro.

-Kookie tu nariz esta fría- Y es que era cierto. No solo estaba fria, sino que roja, al igual que sus mejillas, pero al menos no era el único.

-La tuya igual, Tae.- Sentía como la nariz de su pequeño friccionaba con la suya, haciendo que ambos se sonrieran.

-Ven, vamos a tomar un delicioso tecito- Mencionó tierno el castaño. Despegó ambas narices, se quito encima del pelinegro y lo ayudo a levantarse.

Aun tomados de la mano entraron a la casa del castaño, la cual mantenía aquel maravilloso ambiente caluroso. Se quitaron las prendas de más y entraron a la cocina. Prepararon el te caliente junto a unas deliciosas galletas ya orneadas por la madre del castaño y tomaron asiento en el cómodo sofá de la sala, no sin antes recoger una larga manta.

Ambos se sentaron apegados, queriendo crear un calor corporal, ya que seguían fríos.

-Quiero ver Kung Fu Panda, kookie- Hizo puchero el castaño. Jungkook ante tanta ternura aceptó y coloco dicha película, el castaño sonrió satisfecho.

Ambos estaban abrazados mientras tomaban su delicioso te. Antes de que comenzara la película Taehyung se removió de su lugar, incomodando al pelinegro.

-Kookie...- bramó el castaño, Jungkook volteo a ver su rostro.

-¿Que sucede pequeño?-. Preguntó con un tono suave. Pero no obtuvo respuesta, arqueo una ceja e iba a preguntar de nuevo.

Hasta que sintió una fría nariz chocar de nuevo con la suya. Comenzando a sentir la fricción de hace rato, queriendo crear algún tipo de calor. Jungkook sonrió ante la ternura de Taehyung, quien mantenía ambos ojos cerrados y su típica y tierna sonrisa cuadrada.

Taehyung se separó del pelinegro y plantó un tierno beso en su mejilla, dejando un notable rubor y una delicada sonrisa.

-Para que no tengas frío, kookie- Dijo con inocencia y sinceridad, una tierna sonrisa se colocó en el rostro del pelinegro.

Jungkook no quería ser mal agradecido así que deposito un dulce beso en la mejilla del castaño.- Tu tampoco, Tae- sonrió avergonzado.

Taehyung sonrió, mostrando cada diente blanquecino, y se apego al pelinegro, quien lo abrazo a él.

"Desde ese día creí no volver a tener frío"

El pequeño Tae....// vkookDonde viven las historias. Descúbrelo ahora