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Taehyung


Haz cómo si nada. — dijo Jimin masticando la manzana rojo sangre, — No entiendo el problema del beso. — agregó, haciendo que sus mejillas se pongan redondas por el alimento dentro de ellas.

Que me gustó, — levantó una ceja — y me dio una erección. — oculté mi rostro entre mis manos mientras escuchaba cómo bajo mía se abría la puerta al infierno — Me la jalé cientos de veces, pero la textura de sus labios, su lengua y el cómo me sujetaba, — mis mejillas ardían y mi amigo no las podía ver — si sigo recordando la situación, tendré una tienda de acampar en mis pantalones.

Repito: haz cómo si nada. — volvió a decir, volviendo a masticar y atragantándose con la comida — ¿Te la jalaste por un beso? — interrogó. Asentí. Rio.

Hice caso a sus palabras.

Iba por el pasillo, caminando con mis manos en los bolsillos, escuchando cada palabra asquerosa de las chicas más habladas entre los hombres.

Mi paso relajado, respiración tranquila y leve silbido era mi burbuja más preciada. Sin darme cuenta, me encontraba frente a la puerta del salón de Jungkook y tenía a mi corazón latiendo a mil por hora.

Tragué fuerte y golpeé la puerta, diciendo un suave "Tock tock", pude ver la cabeza gacha del pelinegro. Me acerqué a él y pasé una de mis manos sobre sus cabellos, maldita sea, son muy suaves, los quiero jalar, pensé. El menor se giró, mirándome con sus enormes ojos, los mismos que lograban miles y miles de reacciones sobre mí.

Hey, te estuve esperando. — le sonreí, no era tonto, tenía un rostro cansado, cómo dije, no podía dormir sin recordarlo, me estaba volviendo loco. — ¿Por qué no sales? — Apoyé uno de mis pies sobre la silla libre a su lado, actúa como si nada, como si nada.

No me apetece salir. — dijo, volviendo a bajar la cabeza y seguir con sus cosas.

Bien. — dije, para luego sentarme y mirarlo fijamente.

Giró su cabeza, no me había dado cuenta, pero había una corta distancia entre él y yo, y pensar en ello, me sacó una sonrisa tonta. Las perlas de Jungkook estaban clavadas en mi sonrisa, ¿qué me haces, Jeon? Sonrió, haciendo que mi sangre hierva, no quería que nadie en el mundo la vea además de yo, posesivo era, lo admito, pero me molestaba que todos vean sus dientes de conejo, sus labios carnosos y aquel suave sonrojo en sus mejillas. Mi sonrisa desapareció al escuchar un "Ellos son novios" no me disgustaba la idea, es más, me encantaba, por mi mente pasaron miles de situaciones en las que era la pareja de aquel niño de trece años. Perdido en mis pensamientos, vi cómo los dientes de conejo desaparecían, haciendo que mirase sus belfos y él los míos, acercando nuestras cabezas.

Necesitaba tener otro rato más los labios de él sobre los míos, necesitaba su lengua, sus lindos gemidos, sus manos en mi camisa, quería ver más. Ya a punto de volver a tener todo ello, escuché cómo una jodida niña carraspeaba, haciendo que mi atención se viera en mi tienda de acampar, odiaba a Jungkook por hacerme esto.

Tartamudeando, le dije que me iría con los demás y él acepto.

Salí del salón apurado, necesitaba hablar con Jimin sobre estos sentimientos hacía el pelinegro. Cuando salí del establecimiento, corrí hacia aquel banco que era cubierto por un árbol hermoso; cerca de un grupo de chicas que siempre quería ligar con nosotros.

thanks hormones ; taekookDonde viven las historias. Descúbrelo ahora