Capítulo 11
Mariana se quedó sentada un rato en el parque y Sebastián no pudo parar de mirarla a lo lejos, al observar tanta tristeza en esa jovencita.
Oswaldo: ¿Qué tanto miras a Mariana?
Sebastián: Oswaldo, yo necesito hablar con esa chica.
Oswaldo: ¿Me dejaras solo con todo esto? Deja a Mariana tranquila, no la conoces.
Sebastián: Ya vengo – Va corriendo al parque-.
En el parque.
Sebastián: Hola.
Mariana: ¿Te conozco?
Sebastián: Lo dudo soy el nuevo vecino -Se sentó junto a Mariana- ¿Cómo te llamas?
Mariana: Mariana, si vas a empezar a preguntar sobre el festival, ¡Es mejor que te largues!
Sebastián: Soy Sebastián, ¿Tú eres la chica que salió hoy en el periódico?
Mariana: Si y estoy cansada que me juzguen por lo mismo.
Sebastián: No te estoy juzgando.
Mariana: Ya cállate sí, tengo un problema súper fuerte, como para estar charlando contigo, si no te importa me voy.
Sebastián: No te vayas.
Mariana: -Se levantó del asiento- Voy a ver qué diablos hago con mi vida, quizás me suicide o amanezca muerta un día de estos por algún rincón de esta ciudad, total no tengo nada que perder.
Sebastián: Te pudo decir algo –Mariana lo miro a la cara-.
Mariana: ¿Qué?
Sebastián: -Miro a Mariana- No juegues con la muerte, no sabes cuando algo de eso te pueda suceder.
Mariana: -Sonrió y lo miro- Tú nunca entenderás lo que estoy sufriendo -Salió corriendo de la urbanización-.
Oswaldo: SEBASTIÁN MUÉVETE -Sebastián se fue corriendo a donde esta Oswaldo y siguieron trabajando-.
Oswaldo: ¿Qué tiene Mariana? ¿Cómo la viste?
Sebastián: -Mientras agarraba una caja, miro a Oswaldo- Estás mal, está cegada por la rabia, no me extrañaría que haga una locura.
Oswaldo: Ojalá que no Sebastián, ojalá que no –Suspiro-.
En la casa Fraiz.
Emmanuel: Te estaba esperando Andrés ¿Dónde andabas?
Andrés: a mí -Se apunta al pecho- estaba haciendo un par de llamadas.
Emmanuel: -Lo miro serio- Vamos a almorzar –Se van al comedor-.
En el comedor.
Manuel: -Miro a Emmanuel- ¿Papá qué pretendes con esto?
Emmanuel: A partir de este momento somos una nueva familia y propongo un brindis por esto –Levanta la copa para brindar-.
Andrés: ¿Que celebramos? ¿Que acabas de correr a tu hija? –Sonríe- Emmanuel, conmigo no cuentes para este show barato –Agarro su plato de comida, se levantó de la mesa y se fue del comedor-.
Ángela: ANDRÉS VEN ACÁ, NO SEAS GROSERO.
Emmanuel: -Miro a Ángela- Déjalo tranquilo, que estas niñerías se le van acabar.
Ana: Papi –Emmanuel miro a Ana- ¿Sabías que tenemos nuevos vecinos?
Emmanuel: ¿En serio?
Ana: Sí, parece que llegaron hoy.
Emmanuel: ¿A qué casa se mudaron?
Ana: A la casa, frente al parque del conjunto.
Manuel: Ana ya es amiga del hijo de los dueños, claro, pero a él le llamo la atención Mariana, que hasta llorando –Tomo un poco de vino- se ve espectacular –Ana y Ángela lo miraron con molestia- lástima que la corriste de la casa, porque si no, la pareja perfecta para Mariana –Emmanuel tosió-.
Emmanuel: -Volvió a ver a Ana- Entonces hay que invitar a cenar a los nuevos vecinos.
Ana: Si, papi.
Emmanuel: Ángela organiza una cena para hoy, para nosotros y los nuevos vecinos.
Ángela: Está bien, yo me encargo.
Durante el almuerzo, Manuel hacía sentir cada vez que podía mal a Emmanuel y Andrés subió a su cuarto agarro un bolso de él y se fue rápidamente al cuarto de Mariana a buscar la ropa, los documentos y la laptop, después de recoger las cosas sin que nadie se diera cuenta, bajo la escalera y nadie lo ve, pero cuando ya va saliendo de la casa con el bolso, su padre lo llamo.
Emmanuel: ANDRÉS –Andrés volteo a mirarlo y suspiro- ¿A dónde vas con ese bolso?
Andrés: Voy a jugar futbol, vengo ahora, me llevo mi carro.
Emmanuel: Andrés Leandro, -Andrés a punto de abrir la puerta del carro- cuidado con lo que piensas hacer, no me desafíes –Andrés se montó en su carro, lo encendió y se fue-.
Por otro lado, Emmanuel entro a la casa y se reunió con todos los trabajadores de servicio.
Emmanuel: He solicitado esta reunión, porque les quiero informar que, Mariana a partir de hoy le queda de terminantemente prohibido la entrada a la casa. No quiero que su nombre se escuche más aquí, las cosas de su cuarto se la pueden agarrar o regalar, no quiero chimes sobre esto, al primero que escuche hablando sobre el tema, será inmediatamente despedido, quedo claro -Todos se retiran de la sala excepto Teresa-.
Teresa: Don Emmanuel, yo me encargare de que desocupen el cuarto con orden y luego repartiré las cosas, me retiro con su permiso.
Emmanuel: Espérate.
Teresa: Dígame –Miro a Emmanuel-.
Emmanuel: Quiero que me traigas el celular y la laptop, apenas la encuentres, todo lo demás es de ustedes.
Teresa: Está bien, me retiro.
Mientras las personas de servicio desocupan todo el cuarto. Ángela, Ana y Manuel toman sol en la piscina y Andrés ayuda a escapar a Mariana. Pasada unos 45 minutos, Andrés llego con el carro a dónde está Mariana, ella se montó en el carro y se fueron vía al aeropuerto.
En el carro
Mariana: -Miro a Andrés- ¿A qué aeropuerto, vamos?
Andrés: Al Aeropuerto Caracas, es privado y yo he viajado por ahí muchas veces escondido y es sumamente estricto, no dan ningún tipo de información todo es confidencial y además tengo amigos que trabajan allí y me ayudaran contigo.
Mariana: Buena idea, aunque no creo que Emmanuel se interese en buscarme.
Andrés: ¡Lo conozco! sé que apenas pasen unos días y no regreses a casa te empezara a buscar.
Mariana: ¿Tú crees?
Andrés: Si, esto me recuerda un poco a lo que paso con Lionel.
Mariana: ¿Quién es Lionel?
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Mariana
Teen FictionMariana, es una joven productora audiovisual de 24 años, poseedora del color de ojos gris azulados. No ha tenido una vida fácil, su principal problema es llevar el apellido Fraiz y ser la hija de Emmanuel Fraiz proveniente de un vientre alquilado, a...