Mariana

Tus ojos también se ven igual al mar

Capítulo 34

Diego: Agarro hacia aquel pasillo -Señala el pasillo-.

Manuel: Ok, espera un momento -Va a buscar a Joao Matías-.

En el pasillo de la joyería.

Manuel: -Molesto- JOAO MATÍAS VEN ACÁ, EN QUE IDIOMA YO TE HABLO A TI, QUE PARTE DE NO TE MUEVAS DE MI LADO, NO ENTIENDES.

Joao Matías: Papá estaba viendo los afiches donde sales tú y el tío Andrés, pero no vuelvo hacer -Agacha la cabeza- No me vayas a pegar.

Manuel: -Agarra el bolso que tiene Joao- Camina Joao –Vuelven a donde estaba Diego y le muestra las prendas- Este es el reloj -Lo coloca en la vitrina- Y esta es la cadena -La coloca en la vitrina- ¿Crees que la cadena tenga arreglo?

Diego: El reloj si se puede reparar, pero la cadena no sé, Papá ¿Usted cree que esta cadena se pueda arreglar?

Antonio: Para ver la cadena hijo -Diego le enseña la cadena- Es de plata, si se puede reparar, joven ¿Que le paso a la cadena?

Manuel: La cadena es de mi hijo -Le toca el cabello a Joao Matías- Este niño insoportable que está aquí, el jugando en la casa la enredo y cuando la jalo, la rompió.

Antonio: Así son los niños –Sonríe- Diego hazle los recibos a él joven para cuando venga a retirar las cosas, en total serán 1.500bs.

Manuel: Ok, ¿Puedo cancelar de una vez?

Diego: Si, ¿Cuál es su nombre?

Manuel: Manuel Fraiz.

Diego: ¿Tu eres el de los afiches de publicidad, el de la familia Fraiz?

Manuel: Sí, soy yo.

Diego: Tus hermanas son hermosísimas, por cierto, tengo una hermana que está loca por ti, FRANCESCA VEN UN MOMENTO –Francesca se acercó a donde Diego-.

Francesca: ¿Que Diego?

Antonio: Voltea, mira quien está allí.

Francesca: -Voltea y ve a Manuel- Papá, es Manuel Fraiz -Se pasa las manos por el cabello- Esto tiene que ser una broma –Sonríe-.

Manuel: -Se quita los lentes y se ríe- No es broma Francesca, soy real.

Francesca: -Sonríe- Estoy sorprendida, ¿Te puedo dar un abrazo?

Manuel: Por supuesto -Se abrazan- Me parece que nos conocemos de algún lugar.

Francesca: Nos conocimos hace un par de meses en una heladería.

Manuel: -La mira fijamente- Ya me acorde, después de todo, no tengo tan mala memoria –Sonríe- Este pequeño es mi hijo Joao Matías.

Francesca: Hola Joao, ¿Te puedo dar un abrazo?

Joao Matías: -Serio- No quiero.

Manuel: -Mira a Joao- Joao estas muy grosero últimamente, está bien sigue así, pero te vas olvidando del paseo con tu padrino y mañana mismo te vas a donde tus tías.

Joao Matías: Pero Papá –Se pone a llorar-.

Manuel: Dejas la lloradera Joao Matías, antes que te joda aquí mismo –Joao dejo de llorar y agacho la cabeza- Disculpen, este niño me tiene casi loco, no sé qué hacer con él.

Francesca: Tranquilo, está creciendo, a veces se ponen así.

Antonio: Tomemos una foto de todos juntos -Se toman la foto-.