24. Formalizando M. (4/5)

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Arturo: ¿Qué fue lo que te dijo Samuel para cambiar tan repentinamente?

Sofía: me sentí tan entendida por él... no sé, me contó su historia y me dijo que aunque todo estuviera así pronto encontraría quien me sacará de este agujero en el que estoy metida y ese será mi pequeño-acarició su vientre.

Arturo: me alegró que el testimonio de otra persona te haya servido para salir de esta crisis... No me gusta verte dando pasos atrás...

Sofía: lo sé y lo siento... no quiero que pienses que no valoro tu trabajo ni nada... he logrado muchas cosas gracias a ti.

Arturo: sé que lo valoras-acarició su rostro-a mí lo que me importa es que tu salgas adelante, si es con mi ayuda o no eso es lo de menos, Sofía-ella sonrió.

Sofía: gracias por ser tan bueno y paciente conmigo, por convertirte en alguien importante para mí y ayudarme con todo esto

Arturo: me alegro de eso, Sofía, pero no dejo de ser tu psicólogo, no lo olvides-sonrió y la vio pensando.

Sofía: sabes, me gustaría dar un paso más en mi vida... mi negocio ya está a punto de salir a la luz y necesito mi nombre de siempre.

Arturo: ¿Tu nombre de siempre?

Sofía: creo que me siento preparada para dejar de ser la señora de Montalvo... ¿será posible divorciarme de él?-Arturo sonrió.

Arturo: es una excelente noticia, Sofía, claro que será posible, él te abandonó y te dejó sola junto a tu hijo... va ser fácil ya lo verás.

Al día siguiente Andrea se despertó sobre la cama, envuelta entre las sábanas blancas y extrañó ver el cuerpo de Samuel a su lado... se incorporó y apartó la seda que cubría la cama, no vio ni escuchó ningún rastro de él, por lo que se dio cuenta que no estaba en la cabaña, se levantó con lentitud con las sabanas enroscadas en su cuerpo y se dirigió al salón, lo vio entrando con una bolsa de cartón y un par de cafés.

Andrea: buenos días-él se acercó y la besó en los labios.

Samuel: fui a por algo para desayunar-sacó lo que traía-espero que te guste.

Andrea: ¿De qué son?

Samuel: magdalenas de caramelo y nueces de pecan-Andrea metió un trozo en la boca y cerró los ojos.

Andrea: ¡están muy buenas! ¿Qué haremos hoy?

Samuel:-miró su reloj-pues, ahora a la mañana van hacer una cata de vinos a una bodega de aquí cerca... al atardecer hay un paseo en barco por el río.

Andrea: ¡Estupendo! Acabo esto y nos damos una ducha para ir-sonrió.

Acabaron de desayunar y se dieron los dos una ducha rápida, él se puso un pantalón vaquero con una camiseta corta de color azul claro mientras ella se puso también un vaquero con una camiseta corta de rallas azules y blancas con la espalda un poco al descubierto.

Samuel: ¿Lista?-ella afirmó y salieron, se reunieron con un grupo de personas que también iban a su mismo destino, él tomó su mano sorpresivamente y ella lo miró con ternura.

#: ¿También estáis de luna de miel?-una jovencita de cabello rubio y ojos claros acompañada de un hombre moreno de ojos verdes y pelo oscuro los interrumpió.

Andrea: no...-susurró Andrea con una media sonrisa.

%: ¡Ves! ¡Te lo dije! Gané la apuesta.

#: Ya no me lo restriegues ¿quieres?-lanzó una mirada furtiva a su marido-mi nombre es Irina y él es mi reciente marido Flavio-ambos sonrieron.

DULCE AROMADonde viven las historias. Descúbrelo ahora