Capitulo 5 *Viaje al pasado*

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Rin se recargo en su auto para esperar a que Kikyo saliera, vio de reojo a Sesshomaru quien también hacía lo mismo. Lo observo fijamente, nariz perfilada, labios finos, piel blanca sin ningún vello, lo admitía, era atractivo.

—¿Te gusta lo qué ves? —pregunto Sesshomaru serio, pudo darse cuenta de que ella lo estaba viendo.

—No —hizo seria—. He visto cosas mejores —presumió—. Aún me debes un café.

—Y tú una disculpa.

—Eso quiere decir que... ¿estamos a mano?

—No. 

—Lo sabía —sonrió de lado—. ¿Por qué no se va? —él frunció el ceño, pero no respondió—. ¿Acaso esta sordo? —sin respuesta de nuevo, ella chasqueo la lengua—. Naraku es más agradable que usted. ¿Cree que arreglen las cosas? —pregunto no tan altanera.

—No lo sé —la miro de reojo—. ¿Por qué ella está aquí en Japón? 

—Yo la traje —respondió seria.

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Kikyo buscaba algo en que enfocar su mirada, Naraku estaba con los brazos cruzados. La observaba de arriba abajo, estaba un poco más delgada que hace años, lo que llamo su atención fue que ella aún traía puesto el anillo de compromiso que él le dio. ¿Por qué? Se supone que se había fugado con alguien más y dudaba que esa persona le diera un anillo igual ya que él había diseñado la joya especialmente para ella. 

—¿Cómo te va? —hablo él primero.

—Bien —respondió tajante—. ¿Cómo está tu esposa? —miro fijamente un recuadro que estaba detrás de él.

—¿Cual esposa? —pregunto confundido. 

—No mientas —dijo seria—. Sé muy bien que estas casado y con hijos.

—Eso no es verdad —se acercó a ella—. Tú te huiste con otro —ella frunció el ceño.

—Jamás te traicione —sintió un nudo en la garganta.

—Ni yo —hablo seguro.

—¡Mientes! Siempre me mentiste —las lágrimas comenzaron a salir sin que pudiera evitarlo.

—No es verdad. Yo nunca te mentí.

—Ya no quiero escucharte —quiso salir pero él la detuvo del brazo.

—No te iras de aquí hasta que aclaremos todo —hablo molesto—. Te fuiste, no respondiste mis llamadas, te espere durante horas en la iglesia y nunca llegaste —reclamó con molestia, tomándola de los brazos—. Te busque por todas partes, me negaba a creer que te me dejaste por otro.

Kikyo lo miro a los ojos, sabía que estaba molesto. Conocía tan bien sus expresiones. Pero estaba confundida, ella no se había ido con nadie, nunca pensó en nadie más que no fuera él.

—Yo no te deje por otro —se soltó de su agarre—. En cambio tu —ahora le tocaba a ella—. Te acercaste a mi para poder quedarte con las joyerías y no sólo eso. Tenías una amante o dos, no sé cuantas —las lágrimas seguían saliendo de sus ojos. 

Naraku apretó los puños y tensó la mandíbula, tenía que controlarse de gritarle, la conocía y sabía que la estaba asustando al ponerse agresivo. Respiró profundo, tal vez que llevara su anillo de compromiso era algo bueno, ¿no? Kikyo estaba dándole la espalda tratando de controlar sus lágrimas, se suponía que no se mostraría débil ante él.

—Hablemos con más calma —susurró él, poniendo su mano sobre el hombro de Kikyo.

—¿Para qué? Es obvio que piensas que te deje por otro —sollozo—. Es mejor irme, olvida que nos volvimos a encontrar —trato de irse de nuevo. Naraku la detuvo del brazo.

I miss you {NarakuxKikyo}Donde viven las historias. Descúbrelo ahora