I miss you {NarakuxKikyo}

Promesa

Sesshomaru frunció el ceño al ver a esas personas esperándolos, en especial a Hakudoshi, sabía por misma boca que Rin que habían hecho las paces y que se llevaban bien.

Aome se quedo muda a ver los ojos llorosos de Rin, Kai también estaba llorando y suponía que algo malo había pasado ya que Kai no lloraba. No frente a tantas personas. Sesshomaru estaba completamente serio, había insistido en ir a la policía para levantar la demanda, pero Rin se negó, no quería arriesgar a vida de su pequeña.

—¿Dónde está Mei? —Inuyasha pregunto tras un largo e incomodo silencio.

—S-se la llevaron —respondió Rin tragando duro. 

—¿Qué? ¿Quién? —esta vez hablo Hakudoshi. Rin negó mientras se encogía de hombros, no tenía ni la menor idea de quién y por qué se había llevado a su pequeña.

—¿Qué hacen aquí? —pregunto secamente Sesshomaru.

—Tienen que saber algo de Dean —respondió Inuyasha con tranquilidad.

Sesshomaru y Rin cruzaron la mirada por unos segundos y después miraron a los presentes. Hasta ahora Rin se daba cuenta de que Aome e Inuyasha no llevaban a su hijo con ellos, quizá lo habían dejado con la niñera. 

—Hablemos adentro —dijo por fin Rin, sacando las llaves de su bolso. Sesshomaru llevaba a Kai en brazos, trataba de tranquilizarlo con leves caricias en el cabello y espalda. 

Después de que Rin abriera la puerta, todos pasaron a la sala. Sesshomaru dejo a Kai junto a Kirara para que jurara un poco con ella, cosa que resulto, pues la gatita de inmediato comenzó a ronronear y lamer las pequeñas manos de Kai haciendo que él riera. Cuando se aseguro de que Kai estaba más tranquilo, fue a la sala donde tomó asiento junto a Rin, esta lo abrazó del brazo. Él no dijo nada, dejo que ella lo abrazara.

—¿Qué pasa? —pregunto Sesshomaru, una vez que pasaron unos cuantos minutos en completo silencio.

—Aquí dice todo de Dean —Hakudoshi dejo una carpeta sobre la mesa de centro—. Dean esta metido en muchos problemas —sabía que con el secuestro de Mei no tenían cabeza para leer tanto papel—. Hace seis años aproximadamente comenzó a rondar bares y casinos, todo parecía normal, un modelo exitoso teniendo sus escapadas con algunas chicas. Pero, con el tiempo su fortuna se fue terminando, pues al parecer se había vuelto adicto a las apuestas. Supo ocultar todo de sus familiares y medios de comunicación. Pero, al estar tan metido en las apuestas, descuido su apariencia haciendo que perdiera el trabajo. 

Rin escuchaba atentamente, ahora que lo pensaba, la ultima vez que vio Dean estaba un poco más delgado. Aunque casi no se le notaba, a menos que lo observaras bien.

—¿Qué tiene que ver con ahora? —pregunto confundida. 

—Al ver que su dinero no le alcanzaría para pagar su deuda volvió a ponerse en forma, logró obtener un par de contratos más y subir de nuevo a la cima, pero... —resopló—, ni con ese dinero abarca todo lo que debe.

—¿Cuanto es? —pregunto Sesshomaru, mientras en su mente ataba cabos. Pues, debía de admitir que cuando Rin le dijo que se habían llevado a Mei pensó que era un plan de su madre, así como había planeado quitarle los niños a Rin, pero luego pensó que eso era imposible, él ya había hablado con sus padres, así que estos sabían que estaba con Rin y que estaban por viajar para verlos. 

—No lo sé con exactitud —respondió Inuyasha—. Pero lo están buscando para que responda por todo ese dinero. 

—¿Creen qué él tiene que ver con el secuestro de Mei? —pregunto Aome, cosa que Rin agradeció mentalmente, estaba demasiado nerviosa como para hablar.