Regreso

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Después de como una eternidad completa de escuchar monótonas melodías de violines el concierto terminó.
En verdad me hubiera gustado, no, más bien me hubiera encantado dormirme durante el concierto, pero mientras Flippy está despierto es imposible para quedarme dormido.
Mi opinión sobre ese tipo de música no ha cambiado.

Ya eran mas o menos las nueve de la noche (, el concierto había durado como cuatro horas), y debíamos regresar.
Tomamos el primer autobús a la base, eramos los únicos pasajeros, aunque claramente para el chofer sólo estaba Flippy.

Cuando llegamos a nuestro destino, notamos que el lugar estaba muy agitado; habían soldados corriendo de aquí para allá sin parar a toda velocidad. Flippy continuó adentrándose, incluso había cadetes equipándose con armas y granadas y demás. Eso nos estremeció.
Fue entonces cuando un soldado se nos acercó corriendo.

--¡Flippy! ¡cadete Flippy!

--¿Qué ocurre?

--El general ha mandado a llamar a todas las tropas de la base este, todos debemos prepararnos.

--¿Prepararnos?

--¿Prepararnos para qué?

--¿No te enteraste?

--Esto suena malo.

--¡Explícame! ¿qué ocurre?

--Nos han declarado la guerra total.

Todo a nuestro alrededor se detuvo al oír esas palabras:
Nos han declarado la guerra total.
Y pensar que cuando cerramos el trato con el capitán creíamos que las probabilidades de guerra eran muy pequeñas; pero obviamente los hecho nos contradecían a ambos.

¿A qué sabe la vida?Donde viven las historias. Descúbrelo ahora