¿Ellos?

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Se que me tardé mucho
con esta parte, y se
también que si estuvieras
a mi lado me ahorcarías
o me darías un tiro con una
Tokarev. Pero bueno,
aquí está.

(Comentarios de odio
y desahogo aquí).




















Los tres (yo haciendo sugerencias a Flippy) pasamos un rato hablando sobre lo que podíamos meter en esa nueva casa, nuestra casa.

...Una cama, un retrete, una estufa y un comedor.

—Es muy poco ¿no crees? necesitarás también un refrigerador, sillones, muebles, estantes...

—En el ejército no necesitábamos mas que una tienda para sobrevivir.

Handy de hecho estaba enlistando un montón de cosas que para nosotros están de más; las conseguiríamos con el tiempo, pero por el momento nos bastaba lo básico.

En la ciudad, en la tienda de muebles conseguimos la cama, un comedor de dos sillas, un banco, unos muebles de cocina y un sillón, el cual Handy insistió demasiado en comprarlo.
El transportista del camión era Toothy, y Cuddles y Mime eran los ayudantes.
Entre los seis hicimos que los muebles entraran por la puerta, fue toda una odisea, pero lo logramos al final.

El chico vestido de mimo se la pasaba acomodando cosas imaginarias, y quizá invisibles para nosotros, pues él parecía hacer grandes esfuerzos por moverlas. Flippy se acercó para hablar con él.

Hey, ¿quieres ayuda?

—   —agitó un dedo en forma de negación.

Y ¿qué es lo que acomodas?

—                             — movía sus manos de muchas maneras dibujando figuras en el aire.

¿A qué sabe la vida?Donde viven las historias. Descúbrelo ahora