Let Me Love You. √√

29.

Problemas. Sólo habían problemas.
Los caminantes estaban entrando, ¿como?, no lo sabían, pero estaban entrando, muchos, todos trataban de salvarse y ayudarse a sí mismos.

-¡Corran, por aquí!.-escuchaba los gritos de Jessie, quién estaba alado de Cristal, disparando a los caminantes que se acercaban a los demás, quienes estaban más cerca, corrían hacia las casas, a esconderse, a prepararse.

-¡Mierda!-gritó Cristal al ver qué ya no tenía balas, golpeó varias veces el arma con coraje, y entró a la casa al ver a los demás cerca, entraron y cerraron la puerta con rapidez. Subieron a buscar armas, a hacer un plan para salir de allí, o bien, para buscar una solución del lugar, salvar el lugar.

Cristal buscó por todos lados un arma qué pudiera servir, tenía un cuchillo, sí, pero eso era sólo para enfrentamiento cuerpo a cuerpo, no podría salir de ahí sin una pistola, sería cómo un suicidio, salir de la casa sin una pistola entre tantos caminantes, sería, sin duda alguna, un suicidio.

Encontró una pistola debajo de su cama, estaba cargada completamente, sonrió y bajó, en busca de Rick.

Miró a Michonne y a Rick con un caminante muerto en media habitación, con todos los demás rodeandolos, incluso Carl y Ron, quiénes se miraban desafiantes y con odio.

—¿Qué vamos a hacer con ese caminante?—preguntó Cristal sin idea alguna, todos voltearon a mirarla, aunque ella sólo podía concentrarse en un par de ojos azules qué la miraban sin expresión alguna, alguna parte del corazón de Cristal quebró, ¿Porqué a ella la miraba sin expresión alguna pero a Enid la miraba diferente?, y decía diferente, porque no quería empezar a decir que "con amor", porque rezaba por que no fuera así,  de ser así, simplemente tendría que resignarse y dejar qué Carl fuera feliz con Enid, no veía otra solución alternativa a eso, ¿Que podría hacer?, ¿esperar a que se cansé de ella y vuelva a Cristal?, no, eso es lo que lleva haciendo todo este tiempo, y no funciona.

—Vamos a encubrirnos, vamos a manchar toda una manta con sangre para que no nos huelan, y tranquilos, Glenn y yo lo hicimos una vez, funcionó.—Rick dio las indicaciones y empezaron a hacer todo eso, Jessie y Sam se volteaban a mirar a otro lado y tapaban sus narices.

Cada uno tenía una manta encima, olía como el infierno mismo, y ver los intestinos de lo que antes había sido una persona común y corriente.

—esto es asqueroso.—dijo Ron con una mueca de asco, Cristal sonrió con malicia.

—Tú eres asqueroso—dijo Cristal mirándolo con una ceja alzada, Carl soltó una risa y Ron la miró mal,—aunque, si no quieres ponertelo, por mi no hay problema, puedes ir sin él.

Ron rodó los ojos y apretó la mandíbula, Cristal le giñó un ojo a Ron divertida, Carl, quién estaba riendo dejó de hacerlo al ver el gesto de la chica.

—Es hora de ir afuera.—anunció Rick, suspirando, si bien, todos estaban nerviosos por lo que podría o no pasar.

Salieron de cada con precaución, mirando como los caminantes los olían, pero no los mordian, era una gran adrenalina, con muchos miedos. Obviamente, ninguno de los que estaban ahí querían morir. No ese día.

—Mamá—susurró Sam.—mamá.