-No sabía que eras tan cursi, Yuridia -volvió a decir James.
-No lo soy, ¿quién es cursi? Nadie -guardé mi celular en un bolsillo de mi pantalón.
James se rió.
-Estuve preguntando y no hay noticias de absolutamente nada, mejor vamos a salir a comer.
-No James, quiero trabajar.
-Pero no hay noticias.
-Aquí me quedaré a esperar una.
-Que necia.
Le saqué mi lengua como si fuese niña chiquita.
-Tonta -río-. Iré a ver a tu amiga, me llamó la atención -empezó a caminar. Fui hacia donde el y le puse una mano en su hombro.
-Tiene novio, ¿no me escuchaste? -dije un poco molesta.
-Oye, oye pero no te enfades, sólo quería platicar con ella.
-Déjala, mejor vamos a la habitación.
-¿Para qué? -puso cara de pervertido.
-No pienses cosas que no son, iremos a sacar papeles o algo para entretenernos, hay que buscar noticias muchacho.
-Ñaaaah -exclamó-. Mejor vamos a caminar, salir, comer, no sè lo que menos quiero es estar aquí en el trabajo.
-Para ti es fácil, tu abuelo es dueño de la televisora, puedes hacer lo que quiera y a fin de cuentas estarás en su puesto dentro de poco, eso creo.
-Es cierto, puedo hacer absolutamente lo que yo quiera y llegaré a ese puesto a como de lugar, puesto que soy el nieto del gran director pero mi abuelo me obligó a pasar por estas pruebas, tengo que tener experiencia para estar en su lugar, supongo que no es fácil el puesto de mi abuelo, casi nunca está lo cual es raro, debería sólo estar en su oficina o ayudando a sus empleados pero no, nunca está. Así que no me queda de otra más que aprender.
Me quede callada.
-Pero aún así tengo hambre, iré por algo. ¿Vienes?
Lo vi seria.
-Yo pago.
Sonreí.
La verdad si tenía ganas de comer algo pero soy demasiado orgullosa para decirle que si, así que me agradó la idea de que el pagara. Aunque a fin de cuentas usé eso como pretexto para ir, yo fui quien pago mi propia comida.
El día se paso muy rápido, no llegaron nada de informes, noticias, todo estaba normal, eran las 11 de la noche cuando vi a Priscila afuera en la sala del hospital hablando por teléfono. Se notaba algo triste, eso me preocupaba, me acerqué y al momento de verme colgó su llamada.
-¿Estás bien, Priscila? -le pregunté.
Pasaron dos segundos y calló en mis brazos llorando.
-¿Qué tienes? -dije preocupada.
-No podré ver a Sebas -siguió llorando.
-¿Qué? ¿Por qué? Casi siempre se ven ustedes aunque tengas demasiado trabajo.
-Ya no será más así. Se irá.
-¿Adónde?
-A Inglaterra, con Erick.
-¿Irá a trabajar con él?
-Supongo, pero lo que más me enoja es que Erick es soltero.
-¿Y?
-Un chico con un soltero terminan llendo a buscar chicas solteras.
-Ay por Dios, Sebas no es soltero, te es demasiado fiel y lo sabes... o ¿no recuerdas a Molly?
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Amor A Distancia
Novela JuvenilYuridia y Ángel llevan conversando muchísimo tiempo. Se contactaron por Facebook, claro que sí. Los dos tienen ansias de verse de frente a frente pero hay una distancia muy larga que los separa y evita que se vean. Un chico llega a la vida de Yuridi...