Amor A Distancia

Capítulo 28

-¿Y dónde vivirán, Yuridia? -preguntó James mientras revisaba unos documentos del caso de James.

-Probablemente en mi casa, estoy sola con mi hermana, bueno de echo en este momento se están quedando los padres de Ángel cuidándome mientras él está en sus cursos.

-Wow, yo creo que deberían comprar una nueva, vivir en tu casa no sería correcto.

-¿Por qué?

-Tu hermana habita ahí, imagina que tú y Ángel quieran tener sus noches de pasiones, a él le incomodaría por tu hermana.

Reí- James, Julie se casará, ya tendrá donde vivir.

-Am.. no no no, es capaz que ella quiera la casa y a lo que me has contado de ella, es muy necia.

-Es cierto, pero mamá nos dejó la casa a nosotras, no podemos hacer competitividad.

-Ay Yuridia -suspiró-. Cuando alguien tan importante como los padres mueren la competitividad es mucha entre hermanos y hacen que la familia que queda se destruya en algunas ocasiones.

-No lo creo, mira Ryder el prometido de Julie, él tiene su casa, ellos pueden vivir en ella, yo no tengo suficiente dinero ni Ángel para comprar una casa nueva, en cambio Ryder él se ve millonario.

-Tienes a los padres de Ángel, no dudo que ellos quieran ayudarles.

-Pero me sentiría en deuda, ellos pagaron nuestra boda, nuestra luna de miel, y sólo fue con el dinero de ellos, nadie más aportó nada, debieron haber gastado una fortuna.

-O se sacaron la lotería -sonrió.

-Callate James, no pienso que los padres de Ángel paguen algo más de nosotros.

-Sólo una cosa sí pagaran quieras o no.

-¿Qué?

-El parto, los gastos médicos, claro que esta empresa también te ayudará pero ellos por amor a "su nieto" querrán darle un nacimiento excelente.

-¿Por qué diablos hiciste comillas al decir "su nieto"?

-Porque ese bebé es mío.

-Ay callate, no te soporto.

-Uy uy uy, tranquila.

-Mejor ayúdame a leer tu caso, tuyo y ni sabes de qué trata.

-Chicos -llegó Nicole rápido- necesito que se vayan a la calle 13th washington, hay un incendio en un orfanato, necesito que lo reporten ¡Ahora!

Nos levantamos de inmediato y salimos a la camioneta, James empezó a conectar la cámara y todo para cuando lleguemos esté todo seguro. Llegamos a la calle, sólo se encontraban las monjas que cuidaban del orfanato.

-¿No han llamado a los bomberos? ¿Hay heridos? -pregunté.

-Sí, hace diez minutos pero aún no llegan, estamos tratando de sacar a los niños, en especial a los bebés -veía a varios niños saliendo con quemaduras. De pronto se escuchó una exploción un poco baja, empecé a escuchar gritos.

-Oh rayos -dije, decidí entrar al orfanato.

-¡Yuridia no entres! -.escuche gritar a James pero ya estaba adentro. Vi a una monja aterrada.

-¿Dónde se encuentran los bebés, o los grandes, o digame donde diablos se encuentran los niños?

-Sígame -empezó a correr, la seguí. Entramos a un cuarto, las camas se estaban incendiando, habían niños de no más de cinco años en el piso, llorando. Tomé a cinco y la monja tomó a otros tres que estaban abrazados y rezando, empezamos a correr a la salida y de pronto escuché a un bebé. Gritaba como si lo estuvieran torturando, ahorcando, algo peor.