CAPITULO 30

27 3 0
                                    



Una tarde mientras me encontraba en el centro comercial, comprado algunas cosas que me interesaban. Si. Libros, mangas, animes etcétera. Me encontré con Taehyung, fue una sorpresa volver a verlo, y en un lugar como ese, repleto de adolescentes "raros"

— ¿Tú? —Murmuro, evidenciando su sorpresa y emoción. Cuando sin querer tomamos el mismo manga del aparador.
— ¿Yo? —Solté de inmediato el manga.
— ¡Que sorpresa! —Ahora si ya había dejado claro que le sorprendía el verme de nuevo—. No sabía que visitaras este tipo de lugares... —Agrego.
—Lo hago en mis tiempos libres... —Respondí— Yo tampoco imagine encontrarme contigo en un lugar como este.
— ¿A no? Y entonces ¿en qué sitio te imaginaste encontrarme? —Arqueo la ceja.
—No es, como que me haya imaginado un montón de sitios para encontrarme contigo —Musite irónica.
—Mh...
—Ni siquiera recordaba tu existencia.

No supe como paso, pero de un instante a otro ya me encontraba tomando un café y en una extensa platica con él. De pronto mi celular comenzó a sonar.

—Disculpa. —Dije al ser interrumpidos por el sonido del celular.
Taehyung asintió bebiendo su café.
— ¿Si? —Respondí.
—Tn__ ¿Dónde estás?
—En un café.
— ¿Con quién?
—Sola —mentí.
— ¿Y qué haces sola en un café?
—Me tomo un tiempo para mí misma.
— ¿Y desde cuando prefieres pasar el tiempo sola que conmigo?
—Oye tranquilo... —Resople y note incomodo a Taehyung. Yo también estaba incomoda— ¿Te parece si te veo al rato?
—Por favor no tardes...
—Y tu relájate —Colgué— Suga comenzaba a tomarse un papel de amante desesperado y paranoico. Igual lo amaba y jamás lo engañaría..., incluso ni con un semi dios como Taehyung—. Lo siento. —Me disculpe con Taehyung.
—No te preocupes. Si yo tuviera una novia como tú, la cuidaría igual.
Antes de poder responder, Volvió a sonar mi celular. Rodé los ojos y conteste.

— ¿Si?
— ¿En donde estas?
—En un café.
¿Sola?
—Si.
—Mh... Regresa con cuidado. Te estaré esperando.
—Está bien Jin. No tardare. —Colgué— Otra vez perdón.
Taehyung me miro confundido esperaba no haberme delatado.
—Está bien —sonrió.
—Y bien, ¿en que estábamos?
—Te estaba coqueteando.
—Oh cierto... Era la parte en donde se suponía debía ruborizarme y cohibirme ¿cierto?
Río —Saltémonos esa parte hasta donde tú correspondes mi coquetería.
—Ríndete Taehyung. Me caes bien, no arruines eso. Acepta de una vez que estoy comprometida.
— ¡Maldición! ¡Lo sé!
Y por enésima vez en el día mi celular volvió a sonar.
— ¡Demonios y ahora quien es! —Exclame— Un momento por favor.
—Tomate tu tiempo.
—Enserio lo siento. —Conteste el celular— ¿Si?
— ¡Tn__ mierda! ¡Estoy alarmada!
—¿¿Enserio?? ¿Qué es lo que te pasa?
— ¡Jin me llamo!
— ¿Y?
—¿¿Y?? ¡Tn__ él lo sabe todo!
— ¿Qué sabe? —Era mi turno de alarmarme.
— ¡Que lo engañas!
— ¡No es cierto! Me acaba de llamar y sonaba.., serio. Pero no sonaba mal.
—Bueno. No sabe con quién lo engañas, ni si en verdad lo haces. Solo sospecha y me pidió ayuda para averiguar mas. ¡Necesito verte para contártelo todo!
—Está bien. Voy para allá —Colgué— Taehyung..., lo siento. Debo irme. —Me levante de inmediato al mismo tiempo que él lo hizo. Camine y él me detuvo de los hombros.
— ¿Te volveré a ver? —Murmuro en un tono retador con esa mirada tan profunda que por un instante me calaba hasta los huesos.
—Tal vez.... —Dije sin pensar en absolutamente nada.
—Sí, o si. —Dijo manteniendo su tono tentador mordiendo su labio inferior. No sabía si eso era coquetería o simplemente un hábito suyo.
—Está bien. Ahora debo irme. —Dije casi sin aliento. Y Salí de inmediato.

**********

—Estaba algo confundido y afligido. Dijo que estabas rara y que salías mucho, más de lo normal.
— ¿Dijo solo eso?
—Si... Y quiere que le ayude a investigar si sus sospechas son ciertas.
—Bueno, no es tan grave... Solo debo cuidar más mis movimientos.
— ¡Estás loca! —Me lanzo una almohada.
— ¡Oye!
— ¡Deja de hacer tonterías! ¡Deja a Suga! ¡No arruines sus vidas!
—Esto terminara pronto. Ya lo verás
— ¡Tn__! ¡Entiende! ¡Actuar como una loca no te ayudara!
—Shh ¡No grites! Ya te dije esto terminara. Todo se solucionara, solo debes hacer exactamente lo que yo te digo...

********

—Llegas tarde. —Dijo Suga mientras baja las escaleras de la casa.
—Mi amor ahora no me molestes —Murmure pasando a su lado directamente para dirigirme hacia Jin. Abrí la puerta, deje mi bolsa en la cama y mire a Jin, estaba leyendo un libro.
—Llegas tarde. —Me miro reprendiéndome por mi falta.
—Lo siento Jin. Fui a visitar a mi mama y...
— ¿Enserio?
—Sí. ¿Estás bien?
—Sí. ¿Por qué? ¿Debería estar mal? —Se puso de pie dejando a un lado su libro y camino hacia mí.
—No lo sé. Dime tú
¿Debía ser sincero con él y hablarle de lo mío con Suga? No. Antes debía hablar con Suga. No era una decisión fácil.
—Todo está bien...
— ¡Genial! —Noto mi desinterés y se indigno.
— ¡Espera no! aquí hay algo mal. —Espeto.
— ¿Eh? ¿Qué es lo que te parece mal?
—Mmh... No lo sé, tu actitud. Tu actitud me parece mal.
— ¿Qué hay con mi actitud?
—Siempre has sido fría y extraña... pero últimamente eres peor.
— ¿Últimamente? ¡Pero si nunca estas en casa!
— ¿Y qué haces cuando no estoy?
—Salgo... A veces.
— ¿Con quién?
—Con mi hermana o sola.
— ¿Segura que es con tu hermana o sola?
—Si quieres que permanezca encerrada en la casa solo dímelo o átame a la cama con una correa de perro.
—No seas exagerada...
¿¿Exagerada?? Lo pulverice con la mirada Me di la vuelta y camine hacia la salida.
— ¡Tn__!
—Volveré cuando estés más tranquilo.
— ¿A dónde vas?
—Solo bajare un momento.
Salí de la habitación sin dudar en ir con Suga.

— ¿Qué fue todo eso? —Se refería a la intensa conversación que obviamente escucho.
—Jin cree que tengo un amante...
Se puso de pie —¿¿Qué??
—Cálmate no sabe que eres tú. Pero creo que ya es tiempo de decirle todo.
—Tn__ no lo sé. Primero deber divorciarte bien.
—Oh bueno creo que después de que se entere de lo nuestro el querrá el divorcio.
— ¡No! Lo que debes hacer es divorciarte primero. Después nos vamos lejos a vivir juntos tú y yo... Sin decir nada más. Así no habrá corazones rotos.
—Yo tampoco quiero corazones rotos Suga... Pero cada vez el panorama se pone peor.
—Ven —Me tomo de las manos acercándome hacia él. Me abrazo y me sentó en sus piernas— Pensemos bien las cosas. De todas formas jamás te dejare sola porque te amo. —Me beso.

De pronto su celular comenzó a sonar.
— ¡Ah! ¡Hoy es el maldito día de las mil llamadas! —Me levante.
—Tranquila mi amor —Rió— Contestare, pero no te vayas. No tardo
Asentí.
—Hye Ra. —Dijo— ¿Qué pasa? Si. Estoy ocupado. Pero ¿por que? —Resoplo— No sé, no puedo... Está bien, tranquila lo intentare. Adiós. —Colgó.
— ¿Qué paso?
—Hye Ra dice tener algo importante que decirme que no puede esperar. —Me miro pidiendo permiso. Bueno eso lo supuse.
—Pues ve.
— ¿Segura?
—Sí. Yo te esperare.
—Prometo no tardar. Es más. Terminare con ella pronto.
—Mientras yo intentare hablar con Jin.
—Volveré rápido. —Me beso y salió.

***
—Volviste —Anuncio Jin.
— ¿Sigues de nena?
Resoplo.
— ¿De nena? Tu celular no dejaba de sonar. Tienes muy preocupado a Taehyung —Me lanzo mi celular
— ¿Taehyung? —Revise mi celular. El no tenía mi número telefónico ¿Cómo lo consiguió?
—Sí. Dice que dejaste olvidada tu cartera en el café. ¿Continuaras negando que aquí sucede, algo extraño?
—Basta Jin. No es lo que crees.
— ¿A no? Explícalo entonces.
—Si no confías en mi es mejor que...
—Que ¿Qué Tn__?
—Que nos divorciemos.

¡Ugh! Era patética. Pedirle el divorcio solo por algo así.
Un silencio incomodo se había apoderado de la habitación. Estaba decidida, iba terminar con mi matrimonio. Ni siquiera lo pensé, solo me deje llevar por mi corazón.

— ¿Divorcio? —Pregunto el indignado.
—Si...
—Muy bien. Si tanto te cautivo ese Taehyung como para querer terminar con nuestro matrimonio mañana mismo tienes el divorcio. Solo espero que lo hayas pensado y reflexionado bien. Tn__ yo podre amarte como un idiota, pero una traición, jamás la perdonare.
¡Vaya! Fue más fácil de lo que había pensado.
—No es por Taehyung... A él solo lo he vito en dos ocasiones —resople— Ni siquiera sé, porque te estoy dando explicaciones
— ¿A no sabes? Muy bien. Mañana saldré de viaje, no volveré dentro de una semana. Cuando vuelva hablaremos sobre este tema, espero una explicación y una decisión firme de tu parte. —Sus maletas ya estaban hechas, las tomo y se dirigió a la puerta. Por primera vez en mi vida, había visto un Jin decidido con carácter y sinceramente me asusto un poco.
—No es necesario que te vayas a dormir a otra parte.
—Tal vez así empieces a valorarme más.  

MI PECADO FUE AMARTEDonde viven las historias. Descúbrelo ahora