Mi nombre es D. | Saga La Voluntad De Uno.

CAPITULO DOS

                                               ...                                                                        

Me despierto por los rayos del sol que entraba por la ventana y me daba en la cara.

—Mhmm —Fue lo único que pronuncie mientras me tapaba la cara con las cobijas. Miro de reojo el reloj que se hallaba en mi mesa de noche y eran las siete de la mañana.

—Mhmm —Me queje de nuevo mientras escuchaba como entraban a mi habitación, era Louren la ayudante personal de mi mamá.

—Levántate, hoy es el día.

—¡¡mhmm!! —Me queje más fuerte para darle a entender que no quería levantarme, especialmente porque hoy sería el día que mi mamá contrataría un "escolta" para mí, y digo escolta entre comillas ya que siento que más que un escolta o ayudante es una niñera, a pesar de que le dije a mamá que era capaz de valerme por mí misma.

—Levántate prepare tu desayuno favorito —Me levanto casi en un salto y camino lo más rápido que puedo a la puerta.

—Espera —Volteo mi cabeza en su dirección para poder verla—. Primero debes de arreglarte, tu madre está haciendo entrevistas, y no querrás que te vean así ¿verdad?

Doy un bufido y sin decir más tomé mi toalla y me dirigí al baño. Me mire en el espejo y aunque no quería admitirlo me veía fatal y eso sin mencionar que aún sigo en pijama. Me quité la ropa y entré a la ducha, abrí la regadera y sentí como el agua tibia recorría mi cuerpo dándome una sensación de relajación mientras pensaba a la decisión que mamá tomo al contratar un "escolta." No entiendo porque no confía en que me puedo valer por mí misma, solo es otro empleado que en dos días se ira.

—Igual que todos —Exclamo antes de cerrar la regadera.

Después de vestirme cómodamente decidí bajar a desayunar, después de todo no siempre puedo aprovechar los desayunos especiales de Louren que siempre me los prepara para levantarme los ánimos, más que un empleado o el simple ayudante de mamá Louren es una amiga de la familia, aunque mamá no lo diga yo sé que lo siente así. Al dirigirme a la cocina pasé frente a la sala de invitados y pude divisar a un hombre alto, tez blanca y por su cara parece ser que no le está yendo nada bien con la entrevista de mamá. Al llegar a la cocina diviso a Louren que se encuentra enfrente del mesón de cocina con un plato de panqueques con mermelada de frutas encima y un chocolate caliente.

—Buenos días —Digo mientras me acerco a Louren para quitarle ese exquisito platillo de sus manos.

—No, conoces las reglas —Me dice poniendo una mano enfrente de mi obstaculizando mi camino hasta mi objetivo.

—Oh vamos —Exclamo haciendo pucheros lo cual después de tantos años parece ya no tener efecto en Louren.

—Conoces las reglas María —Dice señalando el gabinete de medicamentos.

—Está bien —Digo con aire de rendición. Tomo un vaso para llenarlo de agua y me dirijo al gabinete de medicamentos, abro el gabinete y tomo un frasco de píldoras sacando dos de ellas y las metí en mi boca para tomármelas con el vaso de agua.

—Listo —Digo dejando el vaso de cristal en su lugar—, ahora ¿Dónde está mi premio?

Louren da una pequeña risa.

—Está bien, aquí tienes—Dice dándome el plato de panqueques y el vaso de chocolate caliente.

—Gracias, eres la mejor —Exclamo mientras me dirijo a la sala de estar.

Tomo el control remoto y me siento en el enorme sofá. Enciendo el televisor, miro el reloj de pared y vi que ya eran las nueve y cuarentaicinco por lo cual decidí poner el canal de noticias, hubo una noticia que me llamo mucho la atención "¿Demon nigth desaparecido?."

—¿Qué? —Es lo único que puedo decir ante la noticia mientras metía una cucharada de panqueques a mi boca.

" Después del complot operado por la CIA y el FBI para capturar al criminal enmascarado conocido como Demon nigth, la CIA y el FBI dieron con el paradero de lo que parece ser su base, a pesar de haber encontraron el lugar totalmente vacío, sin embargo, no se encontró registro alguno del aparecimiento del enmascarado en toda la ciudad, la misma noche en la que el FBI y la CIA encontraron la que podría ser su base."

—¡¡WOOOOW!! —Es lo único que pude decir tras la noticia. Ese sujeto debe ser un pro si pudo incluso escapar así como si nada a pesar de que llevan casi un año buscándolo.

Después de que el noticiero terminara como mi desayuno decido llevar mi plato y mi vaso hasta la cocina. Después de lavar los platos decido volver a la sala de estar para poder ver caricaturas. A pesar de tener dieciséis años me siguen gustando las caricaturas. Miro entretenida la televisión cuando sin darme cuenta me quede dormida.

Me desperté por los constantes llamados por parte de mamá a lo cual solo gruñí mientras abría mis ojos, mire el reloj de mi celular que estaba en mi bolsillo izquierdo y veo que marcan la una de la tarde ¿Cuánto tiempo dormí?

—Ughh —Exclamo irritada. Siento que la cabeza me da vueltas. Me levanto para ir a la cocina mientras pongo mi mano en mi cabeza para por el dolor, pero antes de salir de la sala mamá entra por la otra entrada llamándome.

—María —Me volteo para mirarla de frente y veo que no está sola.

—Quiero presentarte al señor D, el será tu guarda espalda personal.

Inmediatamente cruzo el ceño dándole a entender a mamá que estoy en total desacuerdo. Siento que la cabeza me arde, pero no sé si por el dolor de cabeza o por el enojo que siento en este momento.

—Mamá yo...