Su dulce y delicada dama roncaba. Pero no unos ronquiditos suaves, más bien los ronquidos que uno asocia a un camionero con apnea del sueño.
El resto del camino hasta la casa de la doctora lo hizo sin incidentes. Incluso tuvo la suerte de encontrarse con uno de los vigilantes que estaba de guardia, quien le abrió la puerta de la casa.
Los problemas surgieron cuando entró en el cuarto de su hembra.
Un caballero la habría dejado sobre la cama y se habría ido de inmediato.Y con esa simple revelación Over llegó a la conclusión de que no era un caballero.
Y si, la posó delicadamente sobre la cama. Pero no podía dejarla dormir con aquellos tacones altos, o con el vestido tipo corsé, tampoco con el pelo atado en la coleta, acabaría despertando con dolores.Eso se dijo mientras le quitaba primero un zapato y luego el otro. No pudo evitar acariciar levemente su suave y delicado tobillo. Se sentia casi indecente hacerle eso. Nunca le había tocado esa parte a un mujer. Al menos nunca así. Con todas las hembras con las que había compartido sexo, siempre había sido eso, sexo.
Sin cabida a caricias a zonas no específicamente erógenas.
Lo más cerca que había estado antes de unos tobillos femeninos era cuando las hembras los usaba para aferrarse a él . Nada comparado con la suavidad de ella.Tuvo que soltarla antes de que sus manos migraran al norte.
Lo siguiente fue el vestido. Maldita sea. El sabía que pronto ella sería suya.
Que muy pronto conocería cada centímetro de su hermoso cuerpo. Así que que más daba si aprovechaba el momento para ir familarizandose con el? Pues que daba. Aún sabiendo que no tardarían en compartir intimidad no se sintió capaz de explorar su cuerpo estando ella inconciente.
Tal vez si sólo estuviera dormida... Pero estaba borracha y desde luego ese era un puente que no pensaba cruzar.
Así que la tapó desde el cuello hasta sus pequeños pies, luego metió las manos bajo las sábanas y buscó la crematera lateral que ya había identificado antes.
Una vez bajada la crematera no tuvo más que dar unos pocos tirones.
Se aseguró en todo momento de que la sabana tapaba su cuerpo, pero no era ciego y no pudo evitar ver como esta se amoldaba a sus delicadas curvas.De pues pies al lado de ella en la cama, miró su furiosa erección, que amenazaba con romper la cremallera para salir libre y como si fuera una persona o un animal le dijo.
- Estate quieto, maldita sea!
Tal vez fueron esos murmuros los que llamaron la atención de la hembra de la cama, que se revolvió y abrió los ojos.
Por un segundo parecía desorientada, y Over temió que empezara a llorar o a gritar asustada, pero casi de inmediato una sonrisa sensual adornó su cara.- ummm mi fantasía preferida.
E hizo ademán de incorporarse en la cama, lo cual logró dos cosas, la primera que las sábanas resbalaran por su cuerpo dejando expuestos dos magníficos pechos emarcados en encaje rojo, y segunda que la cabeza le diera vueltas y volviera a caer inconciente en la cama.
Over, cuya respiración se había detenido, luchó por serenarse y se obligó a moverse. Delicadamente cogió con las puntas de sus dedos índice y pulgar un extremo de las sábanas y la subió hasta volver a taparla entera.
Sólo entonces pudo volver a respirar.Rápidamente le soltó el pelo y le masajeo, disfrutando de los gemidos de placer de ella ,luego, tras echarle una última mirada llena de deseo, salió de la habitación.
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Los tenues rayos de sol que se filtraba por la ventana fue lo que la despertó.
¿ porque diablos se había olvidado bajar las persianas la noche anterior?Ah! Ahora se acordaba.
Despacio se levantó de la cama, no quería arriesgarse a hacer ningún movimiento brusco que activara el dolor de cabeza o las náuseas.
Si, efectivamente el dolor de cabeza estaba allí, pero nada qie no pudiera manejar. Cuando finalmente sus ojos se ajustaron a la luz del lugar pudo ver que al lado de su cama, en la mesilla, reposaba una botella grande de bebida isotonica y dos pastillas que identificó rápidamente como ibuprofenos.
¿quien...? OH.
Claro, quien sino. No sabía de donde había sacado la bebida, pues en su casa eso no había. Pero se sintió muy agradecida por el detalle . La bebida ayudaría a compensar la deshidratacion asociada a la resaca.
Se tomó las pastillas y se llevó con ella al baño la botella y durante la siguiente hora, estuvo en remojo en un caliente y flagante baño de espuma.Durante esa hora, se dedicó a poner en orden todo lo ocurrido la noche anterior. Sólo tenía una pequeña Laguna, supuso que se dormido o se quedó inconciente. Recordaba haberle hecho un par de insinuaciones al sexy Over, incluso vanagloriarse de ser una princesa cuando el la tomó en brazos y... de verdad a sus 28 años todavía fantaseaba con ser la Bella y tener una Bestia ?
Esperaba sinceramente qie el no hubiera entendido esa parte de su diálogo alcoholizado.También recordaba despertarse y destaparse a propósito para que el pudiera ver su cuerpo, pero que las náuseas le impidieron hacer nada más.
Luego el le masajeo el pelo y se marchó.
SE MARCHÓ!!!claramente ella no quería que el fuera el típico abusador de mujeres indefensas. Pero al menos podría haberse quedado a dormir. En el sillón de la habitación. O en el suelo. O a su lado en la cama...
Sin duda estaba desvariando .Con sentimientos encontrados y después de cepillarse los dientes bajó al piso de abajo en busqueda de algo para comer.
Iba por la mitad del tramo de escaleras cuando lo vio.
SE HABÍA QUEDADO!!!
encogido claramente en un sofá demaciado pequeño para él . Allí estaba. Con el pecho desnudo durmiendo y claramente incómodo.Estuvo viéndole respirar durante al menos diez minutos cuando él , tal vez sintiendo su presencia se despertó.
Maldita sea. Estaba loca por él .
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Quien quiere una escena hot?? ?

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Over (#5)
Fiksi PenggemarMandy es la nueva ginecóloga de la ONE, amó y perdió y vive con el dolor desde entonces . Hoy, años después , decide seguir adelante Over lleva años viviendo aislado y sin confiar ni siquiera en aquellos que son como él . Un día se descubre anheland...