Hit The Lights ➵ j.b

Capítulo 3; Oscuridad

Justin's POV.

-¡Veintidós años ya! Eres un viejo - Johnny me dió una palmada en mi hombro mientras pasaba a casa.

Había decidido pasar mi cumpleaños de una forma completamente distinta a la del año anterior. Necesitaba tranquilidad, y no imágenes filtradas por todos sitios. Era un cumpleaños, privado, con mi entorno más cercano.

Hicimos una barbacoa mientras hablábamos en su mayoría del tour, en unos días comenzaba y era el tema estrella estos días...

Recibí un facetime de parte de Marisa. Fruncí mi ceño y me separé del resto yendo dentro de casa para coger la llamada.

Sonreí inmediatamente, cuando vi aparecer en la pantalla a Allie.

-¡Qué chica tan preciosa! - enseguida una gran sonrisa se hizo en sus labios.

-¡Felicidades de parte de mi familia! - sonreí amargamente al escucharla decir eso.

-Gracias... ¿Qué tal está mi Brooks favorita?

-¡Muy bien! ¡Estoy en Los Ángeles! - la miré con sorpresa. Empezó a andar dejándome oír varias voces por donde pasaba -Tengo un secreto.

-Cuéntamelo...

-¡Voy a ser bailarina! - abrí mi boca haciéndola reir.

-¿Qué? Eso no es posible... - asintió enseguida -¿Sabes bailar?

-¡Si! Un día tienes que verme, bailo mejor que mi hermana - se encogió de hombros haciéndome sonreír.

Pude diferenciar la voz de Ashley riéndose a más no poder entre otras que no conseguía diferenciar. Suspiré tocando mi pelo mientras me sentaba en el taburete de la barra de la cocina.

-¿Estáis bien? - asintió -Te echo mucho de menos, pequeña.

-Yo también - hizo un puchero y empezó a contarme todo lo que había hecho desde que llegó a Los Ángeles, incluyendo lo que había hecho su hermana. Gracias a ello, pude saber que iba a hacer un nuevo álbum, cuando empezaba su tour y varias cosas más que me sorprendieron.

Sonreí a Fredo y Hailey cuando pasaron por la cocina. Ella se fue, y Fredo se sentó a mi lado bebiendo una cerveza mientras veíamos a Allie sin parar de hablar -... y mamá está más recuperada, vamos a vivir aquí - fruncí mi ceño.

-¿Recuperada? - asintió - ¿De qué?

-Tuvo una caída tonta, ¿verdad? - intervino mi amigo extrañándome aún más.

Miré a Fredo buscando respuestas en él una vez finalicé la llamada.

-¿Qué? - negué dejando a un lado mi móvil -Te ha cambiado la cara.

-Estoy bien, vamos fuera - hice un gesto con la cabeza para que me siguiera.

Durante el resto de la fiesta, bebí, reí, nos hicimos fotos y me lo pasé increíblemente bien. Pero desde que Allie me había llamado, sentía que me faltaba algo y odiaba profundamente esta sensación.

-¿Cuál es el problema? - pude sentir la mano de Scooter sobre mí.

-Se me están ocultando cosas, y me siento como una mierda - mi representante frunció su ceño y se sentó a mi lado en la mesa del jardín mientras veía a la gente bailando y la música sonaba sin parar un segundo.

-¿De qué hablas?

-Ashley - arqueó sus cejas sorprendido de que dijera su nombre.

Durante estos últimos meses, no había pronunciado su nombre, no lo aguantaba. Siempre que alguien hablaba de ella, recibía mi mal humor o bien, me iba de ese lugar...