Capítulo 15; Chantaje

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Imágenes, noticias y más imágenes de nosotros en Manhattan habían llegado a los ojos de todo el mundo. Los rumores con nuestra vuelta habían saltado, los fotógrafos siguiendo nuestros pasos se habían multiplicado. La presión que ejercía sobre nosotros y las preguntas incómodas y fuera de lugar no paraban. ¿Qué no entendían de la palabra amistad? Puedes llevarte bien con tu ex pareja después de todo.

Los Ángeles, CA. Agosto, 2016.

—Y... ¡Corten! Perfecto — dio un grito el director y con ayuda de Maluma me baje de la barra de aquel bar.

El día de ayer y hoy, habíamos estado grabando el videoclip para nuestra canción. Había tenido que acomodarlo con los conciertos que tuve ayer en Los Ángeles, y hoy por la noche. Por suerte, acabamos antes de lo previsto y decidimos grabar algunas escenas de más para la versión salsa que tendría nuestra canción.

Maluma me enseñó algunos pasos de salsa y yo intenté imitarle. Bailamos, una y otra vez mientras nos grababan todos nuestros movimientos. Si esto quedaba bien, sería genial.

—Te espero esta noche — le señalé acercándome a él después de recoger mis cosas.

—No te librarás de mí tan fácil, beba — me guiñó el ojo y besó mi mejilla antes de dirigirse a hablar con el director. Últimamente, era ese su mote para referirse a mí desde hacía algunos meses.

Abrí la puerta de casa de mi madre encontrándome con Allie viniendo hacía mí corriendo. Pude ver al fondo como mi tía, mi abuela y mi madre se dirigían al jardín. Habían venido hacía unos días de España y mi tía se había venido con ella dado que le había salido un trabajo cerca de Los Ángeles. Eso, y porque quería estar cerca de su hermana.

—¿Cómo está mi pequeña? — cogí en brazos a Allie y caminé con ella hasta el jardín mientras me contaba que había hecho hoy —¿Cómo?

Asintió —Mucho, me gusta mucho.

Saludé a todas dándolas un beso y me senté en una silla oyendo a mi madre y a mi tía reír sin parar. Allie se sentó en mis piernas y me contó ese secreto ultra confidencial que tenía. Le gustaba un chico.

—¿Así que te ha llamado de nuevo el abogado? — preguntó mi tía justo cuando mi madre entró en casa con mi hermana para curar la herida que se había hecho en el jardín jugando con Kobe.

—Así es — me miró instándome a continuar —Más dinero, más líos. Lo mejor es lo que me hace su familia.

—¿Cómo han podido caer tan bajo? ¿Cómo pueden chantajearte con hablar de tu relación pasada con Justin? — muevo mi pierna nerviosa negando. No obteniendo las respuestas —¿Cuándo empezó con todo esto tu padre? — me encojo de hombros.

—No lo sé... Para mí está muerto, no tengo padre y mucho menos familia paterna — mi tía me miró comprensiva y con cariño.

—Entonces, ¿por qué pagas ese dinero?

Noté mis ojos aguarse mientras tocaba mis dedos nerviosa —No quiero que le pase nada. Si tengo en mi mano poder protegerle de esas cosas... Lo haré, es difícil tener que decidir estas cosas, nunca me he visto envuelta en algo así y no sé si estoy haciendo bien.

—Las drogas siempre son un problema, cariño. Espero que un día se dé cuenta del camino que ha elegido — asentí lamiendo mis labios.

—Voy a ponerme el bañador — dije levantándome de mi sitio —Quiero aprovechar el sol para ponerme morena — sonreí cuando mi tía dio una palmada a mi trasero en aprobación.

—Me gusta como estás ahora, más rellena, con más curvas. No eres un palillo — rodé mis ojos haciéndola reír antes de entrar en casa.

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Hit The Lights ➵ j.bDonde viven las historias. Descúbrelo ahora