Capítulo 35 - Renacer para Luchar.

481 29 0
                                    


Apenas vi las luces halógenas, mientras estaba recostada en una camilla, con una mascarilla de oxígenos sobre mi nariz y boca... y veía algunas caras borrosas.

¡La perdemos...! Está bajando el pulso. –escuché la voz de una mujer... supuse que era una doctora.

Debemos estabilizarla... perdió mucha sangre y puede perder el riñón.... –decía la voz alterada de un hombre.

¡Entremos al quirófano! –aulló una mujer, distinta a la primera.

¡Ya está disponible... no perdamos el tiempo! –sentí de lejos la voz de la doctora. Comencé a tener convulsiones... y de allí no me acuerdo más nada.

Abrí los ojos... estaba acostada en una cama que no era la mía, y un techo que no era el de mi habitación....

–Hospital.... –dije quejosa apenas con un hilo de voz. Tenía la boca seca y me dolía donde Antón me había herido. Miré hacia adelante y estaba mi madre al lado de la doctora que escuchaba.

–Hola, Malena. –me saludó con una sonrisa, acercándose a mí.

–Hola... ¿Mamá? –le respondí apenas. Me dirigí hacia ella porque me miraba con una cierta angustia, pero a la vez de decepción. Estaba fría conmigo, no como esa vez cuando me corté las venas.

–Malena, tuviste suerte. Si no fuera por tu amiga, podrías haber perdido el riñón....

–¿Mi amiga? ¿Vera...?

–Sí, ella misma.... Dormiste durante tres días.... –me sonrió nuevamente.

–¿Nos deja a solas, doctora? –le pidió mi madre con amabilidad, pero en su voz noté un cierto enojo.

–Por supuesto. Tienen que hablar.... –se retiró de la habitación.

–¿Qué sucedió? –le pregunté a mi madre con nerviosismo.

–Estoy muy decepcionada de ti, Malena... no sé en qué te convertiste....

–¿Disculpa?

–Nunca te creí capaz de amenazar a alguien con algo tan privado... ¿En qué estabas pensando? ¿De dónde sacaste ese video?

–¡Lo amenacé porque no me dejaban en paz...! ¡Te dije que tenía un secreto de él!

–¿Y preferiste hacer eso y no decirme lo que realmente sucedía?

–¡Te he dicho muchas veces que me molestaban! Pero no... preferiste no meterte ¡Ahora soy yo la culpable! –le respondí con angustia.

–Malena.... Fuiste muy irresponsable....

–¿Irresponsable? Estás hablando con tu hija... me hirieron con un cuchillo, casi pierdo el riñón ¿Acaso tú me ibas a dar el tuyo si lo perdía?

–¡No seas insolente, Malena! –me respondió ofuscada.

–Estás del lado de ellos ¿Qué clase de madre eres...? Soporté los peores insultos y me defendí con ese video para que Antón y sus amigos no abusaran de mí.... –comencé a llorar.

–No se justifica, Malena ¡Te he dicho que me dejaras ayudarte con este asunto y no quisiste! ¿Desde cuándo no me tienes confianza? Ahora tratas de ponerte en el lugar de víctima en esta situación... ¡Fue muy grave lo que hiciste! Ahora sus padres quieren una reprimenda para ti por amenazas y chantaje....

–¿Qué dices? ¡Eso es injusto! –grité indignada.

–Dime, Malena. Antón no era el que te visitaba por las noches ¿No es cierto? ¿Quién es ese chico?

Malena a Los 14Donde viven las historias. Descúbrelo ahora