Realidad [Kuroko no basket]

52-¿Qué hacer?

Se escuchaba un horrible sonido por toda la habitación incluyendo esas horrendas risas con cada golpe, Kuroko cerraba los ojos con fuerza intentando no dejarse llevar con la situación, ya que si lo hacía de seguro se soltaría a llorar en frente de todo.

Aki le acarició la cabeza suavemente al ver el sufrimiento del pequeño peliceleste, pero aun así sonreía, mientras tanto al otro lado del comedor torturaban a Hanamiya, golpeándolo, varias líneas de sangre le recorrían el cuerpo y el suelo ya tenía varias manchas de esa misma sangre, Kuroko no pudo resistirlo más, tenía que hacer algo para evitar el sufrimiento de su amigo, se puso de pie y corrió hasta donde estaba Cordelia con el látigo, lo sostuvo con sus mano y con la otra sujeto el mismo brazo de Cordelia.

—¡Basta! Porfavor—gritó con fuerza

Cordelia le miró sorprendida por un momento, Aki también estaba impresionado, pero Jason le miraba feliz, Rido estaba en el suelo casi sin consciencia.

—tú, un estúpido animal ¿te atreves a gritarme? —Cordelia se giro dándole una bofetada a Kuroko tan fuerte que lo tiro al suelo — ¡Basura inútil! —

Esas palabras le recordaron a su madre, los mismos gritos, los mismos golpes y la misma sensación, Kuroko no hizo nada, solo se quedó en el suelo sujetándose la mejilla, esa sensación que le recordaba a su madre le obligaba siempre a no moverse, solo a esperar el siguiente golpe.

—Un estúpido animal no le gritara a mi madre—el niño se acercó a Kuroko para su sorpresa.

Kuroko levanto la mirada para ver a Jay sujetando un plato, el niño le arrojo el plato de vidrio haciendo que se rompiera en el brazo de Kuroko, luego tomo un vaso y otro plato arrojándoselas sin parar, Kuroko, en su temor por cortarse con el vidrio se puso de pie para alejarse del niño, pero un trozo de un plato roto se le encajo en el pie.

—Auch—se sujetó el pie pero este movimiento lo desequilibro, se resbalo cayendo y golpeándose la cabeza en la mesa.

Cayó al suelo sin moverse, Aki se levantó asustado y se acercó a Kuroko con rapidez, le toco el cuello, el pecho y reviso sus signos vitales.

—Está vivo—susurro para sí mismo intentando calmarse, eso lo había alterado demasiado, se puso de pie mirando a Jay totalmente molesto.

—Vamos Aki, ese animal se lo merecía—dijo el niño con tranquilidad—sería mejor que estuviera muerto—

Aki tomo una profunda respiración antes de acercarse al niño, dio un paso hacia delante dándole al niño un golpe en la cara haciendo que se cayera al suelo, Jay le miro desde el suelo confundido y asustado.

—¡La única basura aquí son tu madre y tú pequeña rata! —Gritó Aki dándole una patada al niño para alejarlo, después miro a Cordelia, se acercó a ella tomándola por el cabello—¡quiero que tú, zorra y tu pequeña rata salgan de mi casa, les dije que no lo tocaran!—

Aki empujo a Cordelia tirando al suelo de camino a la puerta, desde arriba la miro con odio.

—¡Largo de mi casa! —

—Me las pagaras por esto Aki, me llevare a ese animal como sea para tratarlo peor que a cualquiera—dijo Cordelia poniéndose de pie y dirigiéndose a la puerta—¡Vámonos de este basurero Jay! —

Jay se dirigió a la puerta sujetándose el estomagó, solo miro algo molesto a Aki antes de salir.

—Jason, tu igual—Aki miro a Jason que seguía en la mesa sonriendo.

Jason se puso de pie y camino con tranquilidad a la puerta.

—claro, pero yo te digo lo mismo, obtendré a ese gatito a como dé lugar, no es una advertencia porque es algo que sucederá—

—Te lo advierto, si tu o tu familia se acercan a él les arrancare la cabeza y la pondré en mi sala de trofeos—respondió Shitsueki apretando los puños—ahora váyanse antes de que cumpla mi amenaza ahora mismo—

—como quieras—Jason salió por la puerta, se escuchó un automóvil alejarse, por fin esa horrible familia estaban lejos.

Aki camino hacia el comedor de nuevo, miró a sus dos mascotas tiradas en el suelo, una llena de sangre y la otra inconsciente, las cosas empeoraban ¿Qué debía de hacer con ellos?