capitulo 13

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- Yo este fin de semana tengo buenos planes -su sonrisa seductora junto a su mirada picara, dejaron a Kim embobada.- En tres palabras: Fiesta, chicas, sexo.

Carlos y Kendall hicieron sonidos de admiración con su boca y se abalanzaron a Logan a darle apretones de manos y abrazos, alegrándose por sus planes.

Kim quedó estática en su asiento, asimilando sus palabras. No entendía por qué le habían dolido tanto, pero sintió como su corazón sangraba de nuevo.

- ¡No, no!, no puedes sentirte tan mal porque ni siquiera te gusta -se reprimía Kim.

Estaba de nuevo en su cuarto sola e iba caminando de lado a lado mientras discutía consigo misma.

- Todo son tonterías. Seguro que me han puesto algo en el Ketchup.

Se tiró en la cama con los brazos y las piernas extendidas a los lados y suspiró. No quería sentir lo que sentía. Pero no sabía si era lo que pensaba, porque nunca se había enamorado. ¿Qué hacen los protagonistas de las películas cuando se enamoran?, pensó. 

Pero no era capaz de asimilar que eso fuera cierto. Se negaba a atender la presión que sintió en el corazón cuando él dijo eso. ¿Pero, qué podía hacer? Él realmente no la conocía como Kim, solo como Christian, su estúpido compañero de habitación al que siempre dice que de pequeño le dieron poca leche porque no ha crecido. Se burlaba de ella y Kim solo podía adorarlo cada vez mas.

Se llevo las manos a la cabeza, abrumada por sus pensamientos y sentimientos.

Lo mejor en estos casos, era un baño caliente.

Logan estaba con los chicos estudiando para una recuperación que tenían el viernes.  Kim no llevaba mucho tiempo dando clases en el internado, pero la teoría de música la llevaba aprobada. Estarían allí mínimo una hora.

No podía bañarse porque si se metía en la bañera lo más seguro era que se durmiera. Aun que lo necesitaba, optó por la ducha.

Entró al baño, abrió el agua y mientras se calentaba,

Dejó todas sus cosas en un rincón, junto su peluca, pelos de cejas y patillas y rellenos. Encima, puso la ropa limpia para cuando saliera. 

Antes de meterse, le dio un empujón a la puerta para que se cerrara y se metió bajo el agua. Era la mejor idea que había tenido en el día. Sintió como sus músculos se relajaban y no pudo más que sonreír ante la sensación que producía en ella.

- No puedo creer que nos echaran del examen –replicó Logan furioso.

- Ya decía yo que nos iban a pillar. Mirabais demasiado la hora. -contestó Carlos con tranquilidad.

- ¿Y qué querías? Tenemos en el brazo todo el examen. Podíamos haber sacado matricula.

- Pero no fue así, Logan. Nos han echado. ¿Ahora qué hacemos? -Kendall paró en seco para mirar a sus amigos.

- Yo me voy a pedir ayuda. Seguro que Christian sabe como arreglarlo. Él se lleva muy bien con la profesora.

Carlos y Kendall asintieron y cada uno fue a sus respectivas habitaciones.

Cuando Logan entró en la suya, estaba menos furioso. Había sido su culpa por haber escuchado a sus amigos y haber rellenado sus brazos de letras. ¿Cómo los había escuchado? En las piernas habría sido mejor.

Dejó su mochila al lado de su cama y entró al baño frotándose los ojos.

Kim terminaba de aclararse el jabón del pelo cuando oyó como se abría la puerta. La sangre se le heló y no pudo hacer ningún movimiento. Se dio cuenta de que no aseguró la puerta. Rápidamente se tapó el cuerpo con sus manos.

- ¡Logan! -gritó la chica.

- Oh, Christian. ¿Te estas duchando a estas horas? OK, no voy a tardar. -se levantó lo más que pudo las mangas y empezó a frotar las letras que tenía escritas en su piel.

Ella no sabía donde meterse. Ahora no podía salir o vería lo obvio. Por la raja que dejaba la cortina descubierto, pudo ver como sus cosas estaban tapadas por la ropa. Dio gracias a Dios a no haber sido tan descuidada en todo.

- ¿Qué haces aquí, Logan? ¿y el examen?

- Nos han encontrado copiando a los tres y nos han echado. Me preguntaba si podrías hablar con la profesora para que nos lo repitiera.

- De acuerdo -resopló- ahora vete.

- Tranquilo, tío. No me voy a unir contigo a la ducha -bromeó, aun que a Kim no le hizo tanta gracia.

A Logan le encantaba molestarlo, y sabía que se sentía muy incomodo por estar con él mientras estaba desnudo. Terminó de enjabonarse los brazos, se dejó el jabón “para que hiciera efecto” y se dirigió a la ducha, donde estaba su compañero.

- ¿Christian?

- ¿Qué? -contestó de mala gana.

- Mírame un momento -pidió Logan mirando a las cortinas. Eran oscuras así que solo podía ver una vaga silueta.

Kim estaba en shock. No podía asomarse ni un poco. Aun que solo fuera la cara, vería su pelo rubio. Estaba perdida. Tenía que improvisar.

- ¿Pa-Para qué? -tartamudeó. La lengua empezó a sentirse pesada en su boca.

- Para enseñarte algo, venga solo será un segundo.

Se oyó el ruido de un bote caer y la silueta de Christian se movió muy rápido unos segundos. Cuando paró, Logan an no pudo evitar la risa. Christian había asomado la cabeza , con el pelo, las cejas y toda la cara llena de jabón simulando barba. Si hasta tenía un pegote de jabón colgando de su barbilla.

- ¿Por eso no salías, porque haces cosas de niños? -dijo Logan aun riéndose de él.

- Si. ¿Qué querías, Logan? -dijo evitando ponerse colorada, sin éxito. Menos mal que también llevaba espuma en las mejillas.

- Te aconsejo -dijo intentando suavizar su risa- que nunca te apuntes el examen en el brazo.

Acto seguido, echó agua en sus brazos y salió del baño despidiéndose con la mano. Al oír el portazo, Kim se dejó caer al suelo, arrastrando su espalda por la pared y cerro los ojos. Había estado muy cerca, y no solo de pillarla sin sus patillas, sino de verla como su madre la trajo al mundo.

Suspiró y escupió la espuma que había tragado por accidente. Genial, no podía ir mejor su día.

Cambio obligatorio. TERMINADADonde viven las historias. Descúbrelo ahora