Niñero en problemas [Chris Evans]

Capitulo 8

Cuando golpeé la pared todo se quedo en silencio pero escuché pasos por el pasillo del segundo piso.

— Downey escuchamos ruidos que provenían de aquí, ¿estás bien?—preguntó mi papá aún desde afuera.

— Si, no te preocupes—sali del baño acariciando mi mano.

— Creo que deberías entrar—aconsejó él otro Chris.

La puerta se abrió y ahi estaban todos, y yo buscando una venda para mi mano.

— ¿Qué fue lo que pasó?—se acerco Scarlett.

— Nos vemos luego, debo irme—solo me miró por unos segundos y se fue.

Mis ojos me picaban, tenía ganas de llorar pero no podía aquí. Pero no sirvió de nada, ya estaba llorando.
Los mire y estaban confundidos como era de esperarse, mi padre no hacía nada, sólo me observaba serio.

— Basta de esto Danik, estoy harto de tus shows—se adentró a la habitación con aire intimidante.

Mis lágrimas no cesaban, me aparté de él y sali corriendo de la casa, necesitó tiempo a solas, tal vez no sería tan mala idea irme con Beatriz. Así dejaría de arruinarle la vida a mis padres. Corría sin dirección alguna, no traía mi celular para llamar a mi mamá y decirle que no sé preocupara, pero de alguna manera debo decirle. Ahora que lo veo bien voy para las afueras de la ciudad, perfecto, terminaré perdida. Entre a la tienda de una gasolinera.

— Hola disculpe, ¿podría utilizar su teléfono?—le pregunté al dueño.

— Claro bonita—si no fuera por que es un anciano y tiene pinta de buen hombre, me daría miedo. Marque a casa, tres pitidos y nada.

Suspiré, deje el teléfono en su lugar.— Gracias.

Le sonreí y sali. Genial probablemente estén haciendo una fiesta por mi desaparición.
Caminé por la carretera pero nada, no llegaba a ningún lado, me senté debajo de un árbol.
Mis ojos comenzaban a cerrarse lentamente.

Escuché una puerta cerrarse y abri los ojos inmediatamente, las cosas de mi alrededor son de madera vieja, la cama o bueno más bien el colchón que fingia ser cama, solo la cubría una cobija verde.
Estuve apunto de gritar pero más vale ser silenciosa. Sali de la habitación pero como soy torpe me tope con la dueña de la cabaña.

— Oh ya despertaste, ven sientate a desayunar conmigo—la miré confundida y la segui—. Es malo dormirse sola en la carretera sola ¿sabias?

— ¿Quién es usted?—observaba cada uno de sus movimientos por si intentaba matarme o algo. Si soy dramática, pero en serio. ¿Quién ayudaría a una chica y la traería a su casa sin pedir nada a cambio?

— Me llamo Andrea, ¿eres tú?—apuntó a su televisor.

Y si, efectivamente soy yo en las noticias, al parecer si me están buscando después de todo. Robert salía histérico gritando y dando órdenes a los policias, mi madre llorando y Scarlett consolándola, los chicos también están sólo que al lado de mi padre—. Si.

Fue lo único que le respondí a la señora, Chris también se encuentra ahí y si no me equivoco ya estaba apunto de llorar como mi mamá.

— ¿Te gusta ese chico no? Has sonreído tontamente al verlo—me sonrojé y río.

Desayunamos, hablamos un poco de nosotras, al final resultamos ser casi iguales. Ella también era de fiestas y al final huyó de casa, sólo que a ella sus padres no la buscaron, la ayudé a carrear agua de la presa a la cabaña.— Si quieres puedo llevarte a casa.

— No me quiero ir, sinceramente me la pasé mejor contigo, aunque seas una desconocida—bromeé, por otro lado si quiero volver. Pero solo para ver a Chris.

— Yo también me la pasé bien, me hacía falta compañía, pero si te llegan a encontrar aquí creerán que te secuestré y no quiero problemas—tiene razón, aparte como tengo un padre testarudo no la iba a dejar ni decir pio.

— Si, mejor llévame a casa—subimos a su auto clásico y partimos a la ciudad.
La casa estaba rodeada, bueno no solo la casa, toda la cuadra lo estaba.

— Yo ire, no quiero que los policias o mis padres te quieran encerrar, gracias por todo pronto iré a visitarte—me baje del auto sonriendo.

— Cuando quieras, mi casa es tú casa—me sonrió y se regresó.

Suspiré y me dirigí a mi casa no sin antes ser interrogada por los policías de la entrada, miré como todos salian de casa corriendo al ser avisados de mi regreso, mi padre corrió hacía mí y me abrazó ¿acaso Downey está llorando? Wow esto debe ser captado.
Mi madre me abrazó cuando se apartó mi padre y susurraba "gracias a Dios".
— Pequeña volviste—Jeremy me cargó y rei.

— Sólo fue por un día—me bajé y miré a Chris, quien sólo me miraba, algo lo detenía para que se acercará a mí. Lo entiendo, después de que estuve apunto de romper su amistad con mi padre debe odiarme, los demás también me abrazaron y me apretaron los cachetes.