Niñero en problemas [Chris Evans]

Capitulo 24

Al salir de la universidad tuve que irme caminando por que le pedi a Robert que prefería irme sola, la verdad es que no queria que fuera por mi por que cuando la mayoria de los estudiantes de ahí se enteraron que él es mi padre intentaron hacer una amistad conmigo por conveniencia, no me lo creo que esto esté pasando ahora. Ni en el bachillerato molestaban tanto.

Entre a casa y ahí estaban los dos hombres que amo, ambos fijaron su mirada en mi. Robert estaba tenso como si se estuviera conteniendo para decirme algo, en cambio Chris estaba relajado pero a la vez impaciente. Espero que no le haya dicho nada a papá sin mi.— Hola—los saludé con un beso en la mejilla a cada uno.

— ¿Porqué no me lo dijiste? ¿No me tienes confianza?—me miro decepcionado, aunque no era la reacción que me esperaba, ¿aceptó mi relación con Chris? Queria saltar de felicidad y besar a Chris. Pero por otro lado, me sentí mal, mal por el sermón que tuvo que aguantar y mi padre por la sorpresa que probablemente le dio un infarto antes.— ¿Porqué no me dijiste qué Susan ya tiene pareja?

El alma me volvió al cuerpo, no se si sentía alivio o decepción. Creo que ambas, él está realmente destrozado. Mi madre era la única que habia soportado su ritmo de vida y ahora, ella estaba rehaciendo su vida al lado de otro hombre con una vida más en calma. Pero él fue quien arruinó eso, por eso no le prohibi a mi madre continuar su vida.

— Por que no crei que te interesará—me sente a su lado, ahora entiendo la presencia de Chris. Él estaba aqui para apoyarlo.

— Claro que me interesa, la amo Danik, a las dos las amo igual. Con la misma intensidad, ustedes han sido lo mejor que me ha pasado, son mis compañeras—ahora yo era la que derramaba lagrimas, nunca lo había visto asi, tan vunerable.

— Papá lo siento, pero sabes como es mamá. Tú sabias que ella nunca te perdonaría una infidelidad, aunque solo haya sido un beso—suspiré intentando desaparecer el nudo en mi garganta.

— Lo sé y me siento un idiota—después de eso lloró más fuerte. Lo abracé más demostrandole que no estaba sólo, miré a Chris que crei que estaría incomodo pero no, nos miraba con ternura y golpeo levemente la espalda de Robert en forma de apoyo.

— Ya pasará hermano, si se fue es por algo. Tal vez ella ya cumplió su destino contigo, te dio una maravillosa hija que ha venido hacernos feliz a todos, ella no era la indicada para estar a tu lado, pero lo fue para darte una razón por la cual luchar y que te des cuenta cuál es el verdadero amor, y ese es el amor de padre a hija—las palabras de Chris nos dejaron con la boca entreabierta impresionados, eso ha sido demasiado tierno.

— Tienes razón, lo mejor que me pudo dar es a este pequeño tornado—beso mi frente y me acurruco en él.

Lo mejor sería no decirle nada por ahora lo de Chris y yo ya que se sentiría más decepcionado o abandonado por su hija y su mejor amigo. Con la mirada le di las gracias a Chris, sin él no sé que hubiera hecho. Tampoco se si mi padre se contendría para llamar a mamá y reclamarle.
Acompañe a papá para que se acostará un rato, necesitaba descansar. Lo tape y sali asegurándome que estaba profundamente dormido.

— ¿Cómo está?—se levanto del sofa, continúa preocupado.

— Sigue sensible pero estará bien, es fuerte—asintió mirando a la puerta pensativo.— ¿Qué sucede?—me acerque a él lo abracé por la cintura.

Me beso.— Sólo pensaba en cuando seria el momento indicado para decirle que estoy enamorado de su hija.

— Esperemos un poco más, mientras se tranquiliza y asimila todo esto—sonriendo lo bese— ¿Te quedas a comer?

— Claro por que no, aunque preferiría comerte a ti—me miró picaron haciendome sonrojar.

— ¿Acaso no te cansas Evans?—rei caminando a la cocina.

— De ti no—me dio una nalgada provocando que me asustará rio—lo siento, no crei que te lo tomaras por sorpresa.