Capítulo 52

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Karol: Solo dilo
Paul: Mike, ven un segundo
Michael: Ya voy -Respondió a Paul que se encontraba abajo del bus aun-
Paul: Es urgente -Gritó nuevamente y Mike hizo una mueca, luego volteó y se bajo del bus-
Karol: Pero, ¿quién es Shane?
Ruggero: Parte del equipo de producción de la gira, nos espera en Colorado.
Karol: Ah -Asintió y se sentó en uno de los sofás-
Ruggero: Comienza a hacer frío, ¿quieres algo para abrigarte?
Karol: No cariño, estoy bien así.




Karol Sevilla.

En no más de diez minutos el bus partió rumbo a Denver.
Íbamos cantando como lo hacíamos usualmente en todos los viajes. Camino a Colorado hacía mucho calor. Dormí un poco, Ruggero durmió casi todo el viaje. En un momento lo desperté para que tomara su medicina nuevamente y luego volvió a dormir. Agus se mensajeaba constantemente. Jorge, Gaston y Kendra escuchaban música y Mike con Valu dormían.
Me sentía mareada y lo único que quería era llegar pronto. Por algunas fallas del bus llegamos más tarde de lo previsto.
Al llegar, el bus se detuvo frente a dos grandes y lindas casas. Me pareció extraño y mientras los que estamos despiertos íbamos bajando del bus, abrían las puertas de las casas y probaban si estaban habilitadas para usarlas.

Karol: -Me acerqué a Paul- ¿Por qué nos detuvimos acá?
Paul: A los chicos les gustan estás casas, así que una será para la estadía de ellos y ustedes, incluyendo a Kendra, y la otra será para el equipo de producción y así.
Karol: ¿Dices que no nos quedaremos en un hotel?
Paul: -Negó abriendo la puerta de la casa- Puedes entrar a dejar tus cosas.
Karol: Claro... -Iba a entrar hasta que Paul tomó inesperadamente uno de mis brazos, deteniéndome-
Paul: ¿Te sientes bien?
Karol: ¿Por qué lo dices?
Paul: Porque te ves pálida y además te notas muy cansada.
Karol: Lo estoy...
Paul: Mejor ve a dormir, yo subiré tus cosas.
Karol: Está bien...

Subí aún estando mareada a la habitación que Paul me había asignado. Al entrar me sorprendí de ver una habitación tan grande. Me recosté en la cama y comencé a llorar, detestaba llorar tanto, más aun sin saber la razón del porque. Agarré una almohada y tallé mi cara en esta. Tenía miedo, sentía ese miedo y comencé a congelarme. Mi labio comenzó a tiritar y se tornó a morado. Recordé la noche de mi cumpleaños en Los Ángeles. Sonreí en medio de tantas lágrimas. Tengo 17 años y siento que todo ha sucedido tan rápido. Limpié inútilmente mis lágrimas y con la sensación de miedo aun, me senté, cogí mi cabello, me coloqué una chaqueta y bajé. Iba a salir al jardín, pero Gaston me divisó desde la cocina. Me detuve sin mirarlo fijamente desde el ventanal, pero sentía su mirada recargada en lo que haría. Levanté la mirada, lo miré y volví a estallar en lágrimas, dejó su vaso a un lado y se acercó rápidamente a abrazarme. Respondí a su brazo y desentendido me miró, su ceño estaba fruncido. Me llevó hasta una silla y me sentó ahí.

Gaston: Pero, ¿por qué lloras?
Karol: No... -Mi voz se ahogaba en mi llanto- No lo sé, yo estaba bien y ahora no lo sé...
Gaston: Tus ojos están muy hinchados, ¿quieres agua?, ¿algo?
Karol: Tengo miedo, ¡es desesperante!
Gaston: Estás pálida, te traeré agua...
Karol: No quiero agua -Llevé mis manos a mi cara-
Gaston: Dime qué puedo hacer y lo hago, solo... no llores, por favor
Karol: Solo quédate acá, ¿sí?
Gaston: Claro, acá estaré -Se sentó a mi lado. Jorge caminó hacía donde estábamos nosotros-
Jorge: ¿Qué hacen acá?, prepararemos pasteles, vamos...
Karol: No me siento bien
Jorge: ¿Qué pasó? -Me miró fijamente-
Karol: Malestares -Corrí mi cabello tras mis orejas-
Jorge: Vamos hermosa, te sentirás mejor, lo prometo
Gaston: Tiene razón, te distraerás y así, probablemente se pase la pena...
Karol: Ajá -Me levanté de la silla- Me cambiaré, espérenme en la cocina.

Subí e hice lo que dije. Me coloqué un jeans y una blusa cómoda. Bajé en busca de Kendra, la vi en la sala de estar con Agus y Rugge. Le entregué su vestido agradeciéndole. Apunté mi mirada a Ruggero, manteniendo la distancia. Sentí una pequeña gana de llorar y me sentí mal. Volteé angustiada y caminé hacía la cocina. Ahí estaban Jorge, Gaston y Mike cocinando. Decidí distraerme, por lo que fui con Gaston y lo ayudé con la crema. Estaba tan apretada, que cuando ambos hicimos fuerza para que saliera un poco, salió gran cantidad, ensuciando lo que estaba a nuestro alcance. Nos reímos y cogí un mantel para limpiar. El jugaba con la crema y sin darme cuenta, colocó mucha crema en una de mis mejillas. Riendo sorprendida, rosé mi dedo en la crema y luego ensucié arriba de su labio superior. Jorge nos miró y nos quitó la crema por seguridad y para poder echarle a los pasteles. Entre jugar y reír, Mike y Jorge terminaron los pasteles y fuimos los primeros en probarlos. Luego, fui a lavar mis manos y mi cara. Al salir, Jorge me detuvo.

Stole My heart- RuggarolDonde viven las historias. Descúbrelo ahora