Stole My heart- Ruggarol

Capítulo 26

Karol Sevilla.

La fiesta continuó normal, los chicos se divertían y las chicas también, había mucha gente y la verdad, no soy de aquellas que sociabilizan rápidamente. Solo me senté en un asiento que estaba cerca de algunas mesas, donde no hubiera tantas personas, no me sentía bien, no después de lo que ocurrió hace un par de horas con Ruggero. Estaba todo completamente normal hasta que llegó la hora de sentarse a cenar, me senté muy cerca de Gaston, para todas esas personas el y yo éramos novios, debíamos actuar como tal. Eran buenas personas, no hubo nadie que me mirara mal ni nada parecido, a excepción de Candelaria, no entiendo que tiene ella contra mi, por sus miradas me dejaba claro que para ella no era bienvenida ahí. La comida estuvo sabrosa, lo que venía después, no tanto. Luego de cenar y hacer sobremesa, los chicos que tenían novia, debían sacar a bailar a sus respectivas novias, y los que no, debían sacar a bailar a una chica que les atrajera.

Xx: ¿Bailarías conmigo? – Bebí un sorbo de ponche de frutas, voltee sorprendida –
Karol: Ah... - Estaba boquiabierta, sin saber que decir –
Candelaria: Olvídalo Jimmy, tiene novio, ¿no es así? – Me miró con una mirada que comunicaba desprecio, la miré también y asentí con un pequeño Si que salió de mis labios –
Jimmy: Oh, lo siento, no lo sabia – sonreía incómodamente –
Karol: No te preocupes – Sonreí y miré a Gaston y a Ruggero que venían hacia nosotros –
Gaston: Karol, ¿Me concedes esta pieza de baile? – Dijo a la vez que sonreía y me guiñaba –
Karol: Si, claro – Asentí y tomé su brazo, dirigiéndonos hasta la pista de baile –.

La música comenzó a sonar y las luces se apagaron, para luego encenderse otras. Miraba a Gaston e intentaba sonreír cuanto mas pudiera, pero me conocía lo suficiente como para saber que no estaba cómoda. Noté como Ruggero y Candelaria bailaban cerca de nosotros. Continué bailando con Gaston unos minutos más, pero no podía seguir haciéndolo. Le mentí a Gastom diciendo que estaba cansada y me salí de ahí yéndome a recoger mi cartera de mano, respiré unos segundos y luego caminé hasta encontrar un baño. Al estar en el baño, cogí mi celular y me senté sobre el suelo. Comencé a escribir en "Mis notas" todo lo que me estaba pasando, solía hacerlo cuando estaba mal y no tenía a quien decirle, me descargaba escribiendo, eso hacia hasta que sonó mi celular.

*Karol: Hola – Contesté la llamada con una voz entrecortada –
Xx: ¿Dónde estás? – El parecía preocupado, no escuchaba completamente bien debido al ruido –
Karol: Estoy... lavando mi cara, es que no me siento muy bien – Respondí –
Xx: ¿Puedes salir al jardín?
Karol: Rugge...
Ruggero: Por favor
Karol: - Respiré hondo antes de responder – Está bien
Ruggero: Te veo allá*

Mojé mi cara y salí del baño, miré detenidamente a ambos lados para encontrar una salida al Jardín. Caminé hacia la puerta más próxima que daba hacía afuera y salí. Era tan aliviador estar ahí, no había ruido ni... Candelaria. Caminé un poco buscando a Ruggero con la mirada, hasta que lo encontré apoyado en un árbol fumando, con apariencia de chico malo, pero con ojos frágiles. Me acerqué más a el, un poco nerviosa.

Karol: ¿Necesitas algo? – Simulé no entender nada –
Ruggero: Hablar contigo... - No lo miraba fijamente, miraba para varios lados, pero no a sus ojos - ¿Piensas que soy un cobarde verdad?
Karol: - Me sorprendió oír eso, lo miré detenidamente - ¿Por qué pensaría eso?
Ruggero: Vamos, tu sabes porque. Lo que ocurrió hace un rato – Bajó el cigarro y apoyó una de sus piernas en el tronco del árbol –
Karol: Olvida eso, no es nada, ya no importa. – Volví a agachar la mirada –
Ruggero: No es solo eso, te he lastimado sin querer – mantenía mi mirada fuera de el – No he sabido decirte la verdad y no te he dado explicaciones – continuó -.
Karol: ¿Verdad de que?, Rugge... estás confundiendo más las cosas
Ruggero: De eso hablo, he hecho las cosas mal hasta el punto de confundir todo – lo miré – sobre todo dos cosas... amistad con amor.
Karol: ¿Podrías ser más directo? – Comencé a sentir algo inexplicable, concentré mi mirada en el y me mente en lo que decía –
Ruggero: Me gustas Karol, me encantas, me vuelves loco, tú, tu aroma, tu sonrisa, tu voz, aun mas tu forma de ser. Intento disimularlo por miedo a que me rechaces, soy... soy un cobarde.
Se acercó a mi y colocando una de sus manos en mi mejilla y la otra en mi cintura, acercándome a el, me dio un cálido beso en mis labios, duradero y muy cálido. Separamos nuestras bocas para que pudiéramos respirar, aunque no logramos respirar calmadamente.
Karol: Mi cobarde – Sonrió y luego bajó su mano que tenía en mi mejilla hacía mi cintura, quedando ambas en esta. Me dio un pequeño impulso hacía arriba y volteando para quedar yo apoyada en el árbol, continuamos besándonos. Era un beso romántico y a la vez descontrolado, era como si estuviéramos en medio de nuestro mayor deseo, así me sentía.

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