Wade Hall
Estábamos nerviosos. Todo el mundo esperaba que el trato se realizara con éxito. No solo teníamos de nuestro lado el lugar donde se guardaría el cargamento, si no que también teníamos algo de fama por hacer nuestro trabajo bien.
Eso sí, este era un negocio demasiado grande y nosotros estábamos acostumbrados a los pequeños, a los vistos y no vistos.
Teníamos que ir a la propiedad privada de nuestro socio, ya que tenía que darnos parte del dinero que nos habían prometido y también, algún que otro detalle más sobre el transporte.
Estaba confiando demasiado en una persona a la que no había visto ni había oído hablar en mi vida. No dio nombres, no dio nada.
Y eso era algo bastante sospechoso, pero no podíamos quedarnos con los brazos cruzados.
Necesitábamos ese dinero como respirar. Ya no solamente por mi, si no por las familias de mis chicos que esperaban ese dinero día tras día.
Había decidido hacerlo, y no había marcha atrás.
— Nos llevaremos las armas — informó Seth dejando una mochila negra encima de la mesa — ¿Entendido?
— Pero eso podría hacerlos desconfiar — se quejó uno llamado Louis — Y podrían echar el trato atrás.
— Pero también podría ser una trampa — soltó William llamando la atención de todos — Si no lleváramos armas nos pondríamos en peligro tontamente.
— Lleven una pistola por cabeza, ni una más — ordené cogiendo una desert eagle — Que no se note que la llevan, así de fácil.
Me aseguré de que tenía el seguro puesto y la guarde detrás de mi espalda agarrada por los pantalones.
Los demás me imitaron con una sonrisa en sus rostros. Les gustaba este mundo tanto como a mi. Les gustaba que la adrenalina fuera día tras día la única sensación que tenían.
La mayoría de mis chicos no tenían nada en la vida por lo que luchar, y por eso se unían. Cada día que pasaba nos uniamos más y más hasta que la confianza fue más que ganada.
Nos habíamos convertido en una familia gracias a nuestra soledad. Es lo que nos había conducido a buscar alguna banda, la falta de cariño.
— Wade — gritó Axel desde la otra punta del salón — ¿Vamos en el Ranger Rover? ¡Tenemos que dar una buena impresión! — Se cruzó de brazos y me miró mal — ¡Que todo el mundo suba a su habitación y se vista elegante! ¡Puede que ese jefe tenga unas mujercitas con buenas curvas y llenas de fantasías que tenemos que cumplir!
— Vete a dormir un rato anda — se burló Adam poniéndose a su lado — Si una mujer te ve saldrá corriendo con esa cara de sandía que me traes.
— No hablemos de ti, cuerpo escombro — contraatacó Axel —
— No dijiste eso cara albóndiga — Adam abrió la boca con demasiado dramatismo, puso sus manos en la cintura como si fueran jarras y frunció el ceño — Pues para tener cuerpo escombro como tú dices, bien que tu madre me agarraba las nalgas cuando me la folle.
Axel abrió la boca sorprendido. Siempre estaban así, discutiendo cada vez que tenían la oportunidad. Quise acercarme para intentar apaciguar la pelea, pero los chicos no me dejaron.
Josué y Louis me cogieron de los brazos reteniendome. Se estaban divirtiendo con la pelea y no querían que me entrometiera.
Malditos imbéciles
— Pues cuando me folle a tu hermana no le importó mi cara de sandía como tú dices — atacó Axel poniéndose enfrente de él — ¡Bésame Axel! ¡Bésame! ¡Ah! — intentó imitar la voz de Diane, pero solo le salió la voz aguda — ¡Oh, así! ¡Si!
— Mi hermana jamás se acostaría con un huevón como tú — gruñó Adam acercándose a él. Malo. Muy mala señal — Mi hermana se merece algo mucho mejor que tú, gilipollas.
— El amor no tiende a razones — Axel se encogió de hombros y sonrió — Cuñadito.
Adam se abalanzó a Axel dispuesto a pegarle con todas sus ganas, pero William lo agarró y lo sujetó antes de que eso pasara.
Algo me decía que a mi mejor amigo le llamaba la atención Diane. Pero que no quería nada con ella por cualquier razón, pero aún así era algo que no tenía que tocar.
Lo más importante para Adam era su hermana. Aparte de Elizabeth.
Elizabeth.
— ¡Nos vamos! — grité llamando la atención de todos — ¡Quién no esté dentro de un minuto en los coches pasará una noche sin comida ni alcohol! — al ver que nadie se movía, seguí hablando — Y estará totalmente prohibido que llamen a señoritas para que le chupen la polla, señores.
Todos me miraron con los ojos abiertos por la sorpresa. Los empujé y salí del salón dispuesto a subirme en el coche para ir a la casa de nuestro nuevo cliente.
Los demás no tardaron en llegar. Nos subimos todos al coche y nos pusimos rumbo a la casa donde nos darían los últimos detalles.
•••
—Es aquí — informó William. Este tenía el GPS en las manos, con la ubicación exacta dónde nos estarían esperando.
Asentí y doble a la izquierda, metiéndome en un portón que estaba cerrado. Presione un botón que tenía un pequeño cuadrado para que me abrieran.
Sin decir nada, abrieron el portón y entramos en la mansión.
Tenía un gran jardín lleno de flores de todos colores. También tenía una piscina bastante grande que se veía desde el coche. La casa era de color blanco con las ventanas pintadas de azul.
Era bastante bonita.
Un hombre nos estaba esperando en las escaleras, que llevaban hasta la puerta principal.
— Buenas tardes — saludé acercándome al hombre después de bajarme del coche — Nos están esperando.
— Lo sé, Wade Hall — sonrió el hombre. No me transmitía mucha confianza pero aún así, le seguí — El señor les está esperando en el despacho.
Nos llevó por algunos pasillos hasta que llegó a una puerta de color marrón que se mantenía cerrada.
Este me señaló la puerta con los ojos y se fue sin decirnos nada más.
Observé a mis chicos y ellos asintieron, satisfechos.
Golpeé la puerta y sin esperar una respuesta, entré en el despacho.
— Cuanto tiempo Wade — saludó el chico — Creía que no te iba a volver a ver
— ¿Tú? — escupi con asco — ¿Qué cojones haces tú aquí?
Preguntas para conocerlas!
° ¿Tienes alguna mascota? Yo tengo un canario llamado Pichi (sí, señores y señoras, Pichi)
° ¿Han viajado alguna vez? Yo fui a Italia hace mogollón de años, desde ese momento no he viajado más en avión. En coche si, a muchos sitios.
° ¿Tu canción favorita? No puedo decidir, pero la que me gusta más ahora es Stay de Zedd y Alessia Cara.
° ¿Qué es lo que más odias de una persona? Lo que más odio es la falsedad. Yo siempre he sido sincera y siempre espero que sean sinceros conmigo.
Si quieres entrar en el grupo de WhatsApp háblame al privado!
Un placer amores.
Las quiero.
Ro
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WADE © [TERMINADA]
Action•°• -No puedo seguir con esto - declaré cruzándome de brazos. Sus ojos estaban llenos de tristeza. Estaba apunto de explorar, y todo era por culpa mía-. -¿Y que fue para ti esto, según tú? - Gritó de vuelta. -Fue algo - solté con tranquilidad. Sa...