WADE © [TERMINADA]

Capítulo 41

  —  Nada — escupió William entrando por la puerta —  Absolutamente nada. 

Cogí aire. Esto no podía estar pasando. Esto no. Esto no debería haber sido nunca así. Lo único que quería era el cadaver de la chica que había robado mi corazón solamente para llorar su muerte. Para creermelo de una vez por todas. Llorarla, extrañarla y arrepentirme de todo lo que podía haber hecho y no hice por miedo.

Tuve miedo a perderla, cuando el destino quería arrebatarmela. Podría haber aprovechado cada momento a su lado, cosa que no hice. Cerré los ojos y me calmé. Esto no era bueno para mi.

Mi cabeza retumbaba en busca de paz, una tranquilidad que llevaba días sin poder darle.

Desde que la perdí.

Desde que perdí al amor de mi vida.

— ¿Cómo que nada? — escupi con irritación — ¿Cómo que nada? — volví a repetir con el tono de voz más alto — ¡Es imposible!

— La policía a rastreado la zona. Solo han encontrado tres cadáveres de hombres — informó sentándose en la silla que estaba en frente de mi — Edler no está entre ellos.

Cogí aire y agarré mi nariz intentando controlar la ira que resurgía cada vez que escuchaba ese nombre. Puse mis codos en la mesa y me agarré la cabeza, suspirando.

— ¿Y mi chica? — interrogué con un hilo de voz — ¿Hay algo de ella?

— La puerta trasera del coche estaba abierta — dijo lentamente — Pensamos que al caer, Elizabeth abrió la puerta con intención de escapar pero Edler no le dejó.

— Si así fuera — susurré con enfado — ¿Dónde cojones está?

— Creemos que Elizabeth logró salir del coche con Edler pisándole los talones — mi corazón comenzó a bombardear con más fuerza, dándome esas esperanzas que había perdido — Pero no sobrevivieron. Se hundieron. Se ahogaron.

Cogí aire con fuerza. El dolor en el pecho había aumentado. Ya apenas podía respirar, había algo que no me dejaba hacerlo. Elizabeth. Elizabeth.

William quiso hablar, quiso contarme algo más. Pero lo mandé a callar. No podía creermelo.

No podía hacerme la idea de que había perdido a Elizabeth. Que por mi culpa se había metido en este mundo de mierda.

— Quiero que bajéis y me traigáis a a Elizabeth — ordené — Me importa una mierda si me arruino. ¡Quiero que me la traigan!

— Wade no podemos hacer eso — tartamudeó William — Es mucho dinero, y estamos teniendo problemas con nuestros clientes.

— ¡Me importa una maldita mierda! — grité señalándolo con la mano — O empiezas con la búsqueda, o me encargaré personalmente en elegir a otra persona para que ocupe tu lugar.

William siempre había estado en mi vida desde el principio. Cuando conseguí hacer la banda, llena de personas que habían estado solas lo conocí. Me lo presentó Kevin, otro chico. Son muy amigos, pero Wil logró llegar más lejos que su amigo.

Al principio fue difícil porque Kevin también era muy bueno en lo que hacía, pero Wil siempre llamó la atención de todos.

Porque parecía que no tenía sentimientos.

Parecía que no le importaba nada.

Nadie de todos nosotros tenía una razón para seguir viviendo. Adam tenía a su hermana, sí. Pero parte de su vida la había pasado solo, sin apoyo alguno.

Cuando fuimos creciendo, nos pegamos más los unos a los otros, convirtiéndonos en una familia.

Adam tenía a su hermana. Seth tenía a Axel y Axel me tenía a mi.