◑Capítulo XXXIX: Contigo hermosa.

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Para cuando me fije en lo que estaba haciendo, estuve justo detrás de Maya con la mayoría de la gente aglomerados en la improvisada tarima, si es que así se le podría llamar a eso.

Al ser la que mejor conoce a la rubia, lo deduje primero.

El miedo se había apoderado de ella, por que opté por colocar mi mano sobre su hombro asustándome por su sobresalto ante mi toque.

Voltea verme, suspire antes de hablarle y brindarle palabras de aliento

-sé que puedes hacerlo, cariño-le digo, recibiendo una mirada llena de suplicas. Era como si quisiera decirme algo que no lograba entender.-vamos demuéstrame de que esta hecha mi artista...

-¡Necesito estar sola Riley! -exige en un grito bajo, solo para ambas. Con seguridad, la abracé acomodando antes un mechón de su cabello detrás de su oreja.

-Tus deseos son ordenes para mí, pero recuerda si estoy aquí... Y así sea que este a miles de kilómetros siempre estoy y estaré contigo hermosa. -deje un pequeño beso en la coronilla de su cabeza, aceptando su petición y dejándola sola.

Me encamine para observarle desde una distancia considerable, justo a un lado de padre de la fallecida, y, con mis amigos llegando hacía mí.


-Ella va a lograrlo -les aseguré en un susurro en voz baja a los ocho ojos expectantes.

El pequeño pitillo del micrófono les hace dejar de verme y concentrarse en lo que es, las palabras de despedía de Maya a Lynn.

Por un momento me sentí insulsa, desorientada en la situación. Pero todo dejo de serlo cuando por fin ella pudo concentrarse en lo que diría.

"¿saben? Esto no es algo con lo que algún día me imagine que sería. La mayoría de los presentes que se encuentran aquí a penas los conozco-comienza diciendo después de unos minutos, mirando extraño a cada persona del lugar-...Y-o había preparado un discurso pero déjenme decirles que no hay manera en la que pueda expresar lo que siento....porque justo ahora, siento que la cincuentava hoja que arranque previamente a esta es insignificante para lo que realmente estoy viviendo y sintiendo. Justo ahora...-sus labios tiemblan a media que habla. Mira donde esta la chica, sacando el micrófono y dirigiéndose hasta donde se encuentra Lynn le sonríe con lagrimas recorrer sus mejillas sin pudor-. ¿te gusta cariño? Es el vestido para mí graduación, ¿recuerdas cuando decías que seria divertido? Déjame decirte que no lo es. Sin ti no lo será. -siento la presión en mi pecho creciendo, odio cuando esa preguntas salen de sus labios y mas al saber que Lynn no podrá responderle, justo cuando su manos acarician el cristal con tanto amor me siento terriblemente peor-no se si podré continuar sin ti, amor... Aunque sé que me cuidarás desde donde estés, déjame decirte también que no es de la manera en la que quiero que me protejas te extrañaré, y no habrá nadie como tú amor. no te gusta perder, es una lástima que hallas perdido esta batalla-nos observa, justo a todos y cada uno -, pero que quede claro, eres lo mejor que me pudo pasar Jeanne Lynn Campbell.

Me sorprende la manera en la que ha dicho todo con tanta fluidez, sin complicarse con cada palabra y justo sé que Maya es donde mas me necesitará.
Deja el micrófono dónde se encontraba, un susurro de música se comienza a escucharse. Es tan fúnebre que me sumerge a las ganas infinitas de llorar.

Todo a mi lado comienza a recorrer lento, despacio y la gravedad del asunto me asusta.

-Gracias, Maya-le dice el padre de la fallecida y mi rubia solo le mira son una sonrisa y limpiando resto de sus lágrimas.

Top secret's Riley | #WGA2017Donde viven las historias. Descúbrelo ahora