𝐉𝐔𝐒𝐓 𝐏𝐄𝐓𝐄𝐑 ↯ Peter Parker/Tom Holland.

Eleven.

{—Amelia —pronunció su nombre por lo bajo.

Ella tomo su mano y se arrodilló delante de él.
—Abraham —sus lágrimas no paraban de salir de sus ojos.

—No llores, Amelie; pareces un Gremlin.

—No vuelvas a decirme Amelie —sonrió entre sus lágrimas. —Vamos a salir de esto, tú puedes Aham.

—Escucha —respiro entre cortada mente— Pase lo que pase, tienes que hacer algo.

La chica asintió frenéticamente.
—En mi cartera está el número de Greg Tucker, llámalo, él te dirá...

–No, Abraham ¿que haces?

—Es sólo por si...

—¡Tu no vas a morir! ¡Podemos esperar hasta que estés bien!

—Sólo hazlo Amelia.

Siguió llorando aferrada a su chamarra, Abraham era la única persona que tenía, no iba a poder sobrevivir sin él.

—Te amo pequeña, nunca olvides que lo único que quise hacer era protegerte. }

Pasó una de sus manos por su cabello mientras esperaba en la sala de emergencias alguna noticia sobre la condición de su hermano. Sostenía en la otra mano el pedazo de papel con el número del tal Greg Tucker. No tenía ni la más mínima idea de quien podría ser aquel sujeto ni mucho menos por que tendría que llamarlo.

—No sé como agradecerte por quedarte aquí conmigo —dejo salir en un susurro.

El chico pasó un brazo por sus hombros y la atrajo más hacia él.

—No tienes que agradecerme nada.

Peter llego al hospital en menos de veinte minutos después de la llamada que Amelia había hecho a su celular.
Desde entonces se sentó a un lado de ella para consolarla y hacerle compañía.

Nadie más que Peter sabía como era perder a alguien que considerabas tu padre.

Un médico se acercó a ellos lentamente y cabizbajo.

Al momento se pusieron de pié los dos, esperando a que el doctor hablara para dar el último reporte.

—¿Ustedes son familia del paciente Abraham Loyal?

—Si —dijeron al unísono.

—¿Los acompaña algún mayor de edad?

Negaron con la cabeza.
—No, yo soy su hermana la más grande. Vivimos solos.

El médico asintió y levanto su tabla de expedientes y análisis para comenzar a leer.

Estúpida tablita que pone de nervios, de seguro puros dibujitos pendejos deben tener. Pensó para estabilizar su mente ante lo que estuviera a punto de escuchar.

—Como decirlo —se removió incómodamente —El paciente Abraham fue golpeado arduamente en las costillas, encontramos varias de ellas rotas. Tenía una grave herida en el estómago a causa de un ataque con algún objeto de punto que causo una abertura, gracias a Dios logramos parar la sangre y no hay ninguna hemorragia.
El daño más grave que pudimos encontrar y el problema de todo, es que recibió varios golpes con algún objeto duro en la cabeza. Ese objeto causó un derrame en la parte más baja del cerebro y...

Peter tomo la mano de Amelia.

—Me temo que el paciente entro en un estado de coma inducido. Abraham tiene un aneurisma cerebral.