Pasado.

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-Diganme muchachos ¿A donde van tan de prisa?-pregunto la reina madre viendo a ambos jovenes alfrente suyo con una pequeña sonrisa.

-A ningún lado, Reina madre-respondio Shira pasando al costado de ella-Si me disculpa, debemos irnos.

-Espero que tu cumplas tu deber sin respingar-susurro la reina a la chica, ella apreto sus puños molesta.

-Si, no se preocupe reina madre-respondio sonriendo cortezmente, hizo un reverencia y llendose rapidamente de hay con paso firme se fue Sebastian a su atras.

-¿Estas bien?-pregunto Sebastian en su susurro al sentir tensa a la chica, Shira asintio sonriendole y siguiendo su camino. El castaño hizo una mueca pero no digo nada.

Maria solamente suspiro tristemente viendo como ambos se iban por los pasillos.

-Perdon...
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-Disculpe-el rey de corta cabellera azulada llamo al pelirrojo alfrente suyo-¿Usted es el tutor real de los principes?

-Asi es señor-respondio haciendo una pequeña reverencia-Heine wittgenstein, a sus servicios.

-Dominik za eslovenia, un gusto-se presento con una sonrisa.

Heine abrio los ojos sorprendido al darse cuenta que estaba hablando con el rey de Eslovenia.

-M-Mis disculpa su alteza, no sabia que usted...-haciendo una reverencia se disculpo.

-No se preocupe-sonrio ladinamente-Despues de todo, no avise mi llegada.

-S-Si, pero de todas formas me disculpo.

-Descuide... aunque nunca pense que el tutor se viera tan joven-dijo mirandolo de arriba a abajo, Heine miro a otro lado esperando a que le dijeran niño-¿Usted tiene la juventud eterna? Porque estoy seguro que no es un niño.

A Heine le empezo a agradar el rey de Eslovenia quedandose a conversar un rato mas con el ante la atenta mirada de un rubio que estaba escondido en una de las columnas del lugar.

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-Sabes Erns...

-¿Si, Eins-sama?-pregunto el albino con una mueca preocupado, viendo alfrente suyo al pelinegro.

-No quiero volver al palacio...-susurro cerrando los ojos recordando su niñez y como fue tratado.

-...Se que tiene malas memorias en ese lugar pero...-inclinandose un poco, tomandolo de la mano le sonrio-tambien tiene buenas memorias ahi...

Eins sonrio levemente ante eso, apretando levemente su mano abrio los ojos.

-Si, eso lo se bien.

-Tranquilo Eins-sama, solo sera una visita rapida.

-¿Crees que mi madre aun ame a mi padre?

Al conde le sorprendido esa pregunta. Se tomo su tiempo para pensar.

-...Talvez.

-Bueno, espero que mi padre no haya hecho una tonteria como comprometer a mi hermana con el principe de Eslovenia...

-Ajaja~-rio nervioso el albino, se habia enterado de ciertas cosas pero prefirio que el mismo se enterara-¿No cree que este imaginando mucho?

-De mi padre me puedo esperar muchas cosas...-hizo una mueca molesta-Como que embarazo denuevo a mi madre tambien...

El baston de Ernts Rosemnerg cayo al piso del carruaje de la impresión y el neeviosismo.

-Se me cayo...-susurro volviendo a levantar el baston.

The royal tutor (Viktor x Heine)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora