Sugar Daddy.

Así se disfrazo el amor.

Antes de dormir, antes de despertar.

Veía a Daddy de esa manera tan dulce, Samuel haría lo mismo.

-Quieren desayunar aquí o fuera?

Tom amanecía casi siempre de buenas y si por mucho lo que sea que tenga que hacer lo pondría de mal genio este hasta ahora se desquitaría conmigo.

Al poco tiempo, vale. Creí que era poco tiempo pero casi ha pasado más de una hora.

-Daddy, anda despierta.

Toqué el hombre de José quien tiene a Samuel abrazado en esta helada mañana de sábado.

El olor del desayuno ya recorría toda la sala.

Tom a veces tomaba un poco de café, casi no lo hace pero ya que es de vez en cuando está bien.

Samuel salió del baño con esa cara que nos caracteriza de recién levantados.

La lluvia se escuchaba en toda la casa.

Era curioso ya que no se indico que iba a haber lluvia.

-Y si nos quedamos en casa?

Diría José al estirarse con sus pantuflas de hot dog.

-Tampoco quiero salir.

Diría Tom al servir el desayuno en la mesa cerca del mesón de la cocina.

Samuel quien se recostó a mis hombros se sonrió.

-Quedémonos un rato más y luego damos una vuelta a la universidad, necesito unos libros que se quedaron en la biblioteca.

...

La ducha fue algo nuevo para los cuatro, el agua caliente bajaba sobre el pecho de Daddy que salpicaban a los muslos de William. Tom pasaba el jabón liquido sobre mi espalda mientras tomaba aquella esponja para talar en pecho de Daddy.

El vapor se apoderaría de todo el baño, su piel rozar con la mía ya al punto de no saber de quién era lo que la parte baja de mi espalda rozaría.

-Hey... (riendo Daddy)...

-Lo siento, es el calor...

Reiría Tom al besar la espalda de Daddy.

-Vale, no me molesta sabes...

En carcajadas esto se volvió muy confuso pero agradable.

Al salir de la ducha el sonido de la lluvia era más propio para que nos quedásemos en casa y no salir. Que mala suerte el tener que ir por los libros.

-Joder, hace mucho más frio ahora.

Diría William.

-Pónganse abrigos.

Tom tomó una bufanda ya que no era normal que tal lluvia se dé justo ahora, pero esto ya lo había dicho hace unas horas.

Fuimos hasta la cochera para tomar el carro de Tom que suele ser el más grande mientras conducía Willy.

El camino no era propio para conducir pero no es que nos demoraremos en estar en la universidad ya que solo está abierta hasta la una y recién han dado las doce.

-Ahora vuelvo.

Mencioné al dejarlos un momento en el pasillo de la universidad ya que todos los pasillos están cerrados y solo me dejarían pasar por ser estudiante.

No encontraba los libros.

---...---

Un sonido se escuchó cada vez más cerca de donde estaba.