Sugar Daddy.

Con un escándalo.

Los asuntos del país no estaban bien; pero los adultos o los jóvenes se detenían en pensar más de lo que deberían.

Samuel tenía esa oportunidad gracias a Galeano por una empresa a que comience a trabajar.

Por otra parte Middleton se ha cautivado por la emoción de William al querer trabajar en sus empresa pudiendo escoger otra que el rubio Daddy tendría para su novio.

No Daddy, claro que el menor prefería pasar más contigo.

-Narra Tom.

Besaba a William después de despertar; sin haber mas emoción que tenerlo en la cama sin callar lo que existe en sus corazones.

El primer y segundo día de la semana se daban de forma neutral; las buenas noticias siempre superaban a las malas.

Pero algo extraño sucedió al ser este parte de una visita inesperada.

-Tom, crees que puedo salir por una pastilla?

Preguntó William al entrar y ver que un sujeto espera junto a la puerta de Tom.

Por otro Daddy no sabía porque se lo preguntaba pues es claro que podía salir sin preguntárselo.

En ese momento el sujeto se puso de pie y entro con William en la puerta.

Tom se molestó pues no dijo que alguien podía pasar y peor que fuese empujando a William.

A punto de decir algo por la intromisión el menor le dijo.

-HEY!

Con tono de estar molesto.

Tom reconoció ese rostro por lo que enseguida se puso molesto.

-Joseph.

Tan solo eso diría el rubio al saber que ese día llegaría.

William entonces se pauso a su salida.

-Se conocen?

Volvería a preguntar Daddy.

-Claro que sí.

En tono burlesco respondería Joseph.

-Joseph es alguien que me extorsionó al principio de de fundar esta empresa; pero sabe que no puede hacerme más nada, acaso lo olvidaste?

Diría Tom al saber que este ya no tenía más fundamento que acusarlo a un tipo de un diario amarillista.

-Seguro?

Diría el infeliz de Joseph.

-Como que lo has chantajeado?

Dijo William.

-Estas en un mundo de hombres mayores, esos que es confuso y que no me admiten porque ya me conocen sin saber que ellos sabían de mí. Seguramente has sido tú quien ha advertido esto.

-Si quieres intenta chantajearme pero de una vez te advierto que ellos no tendrán contemplación en destruirte. Fui muy bueno contigo y no creas que ellos son igual de imbéciles que yo.

-Tom, podemos intentarlo.

Eso era de lo cual el rubio se podía reír; incluso burlas por lo estúpido que sonaba, pero no.

En su historia al menos unas veces cuando no sabía que estaba siendo usado este mayor fue feliz.

Era recordar y...

-Flashback.

-Es un chantaje?

Mencioné al despertar en su piso.